A partir de la década de 1980, y mediante la absorción de empresas como MV Augusta, Ducati, Moto Morini, Husqvarna y muchas otras, se comenzó a fraguarse la configuración del grupo italiano Cagiva, uno de los mayores consorcios europeos de motos. Cuando más tarde el grupo se desintegró, Cagiva se estableció como marca de motos de 125 cc. La marca Cagiva había adquirido fama mundial a finales de los años setenta como el constructor que presentó en la categoría de 350 cc modelos como la Cagiva SST en versión naked. A partir de mediados de la década de los 80, Cagiva aprovechó motores de gran cilindrada de la marca Ducati para desarrollar una nueva gama de modelos deportivos.
También se hicieron mundialmente conocidos los modelos enduro de la línea Elefant de entre 350 y 900 cc y las enduro de la serie Cagiva T4 de entre 350 y 500 cc que representaron a los italianos en el deporte del cross. En el apartado de las enduro de calle, Cagiva desarrolló la Canyon y la Gran Canyon 900, así como los modelos de la serie Cagiva W12 y W8 pertenecientes a la categoría de 350 y 125 cc. Pero el fabricante también contaba entre sus filas con modelos cruiser y tourer como la Cagiva Navigator o la Cagiva Roadster.
Uno de los modelos de carreras clásicos de Cagiva fue la Cagiva Raptor que vio la luz por primera vez en 2000 con motores que oscilaban entre los 125 cc y los 1.000 cc. Tras la reorientación de la marca Cagiva llegó al mercado la Cagiva Raptor (2005) con una motorización de 125 cc. Desde el año 2008 el motor de dos tiempos y 11 kW de la Cagiva Raptor cumple las disposiciones de la normativa de emisiones Euro3. El segundo modelo de 125 cc de la gama era la deportiva Cagiva Mito.