Con el trabajo llevado año tras año, y no sin grandes dificultades, e incluso, ayudas por parte de inversores chinos, Volvo se ha ganado por derecho una plaza entre las marcas Premium, donde tres de las más importantes: Audi, BMW y Mercedes “campan a sus anchas”. El XC 60 que tenemos hoy en Autosocut24 es un claro ejemplo de superación.
Un coche que supone el 30% de las ventas de Volvo, que tiene Google integrado en toda la gama, un nuevo filtro de aire opcional que limpia hasta partículas microscópicas, un sistema de control de alcoholemia que no deja arrancar el coche si das positivo o nuevas llantas más aerodinámicas y neumáticos de bajo rozamiento para bajar consumos.
En este nueva prueba, acompañada por un vídeo, en Autoscout24 vamos a conocer las cosas buenas y las mejorables del coche con el que Volvo compite contra los tres grandes del segmento: Audi Q5 40 TDI, el BMW X4 2.0d y el Mercedes GLC 220d. Todos rondan los 60.000€ y, dicho sea de paso, lo que nos más nos gusta es que tienen la posibilidad de motor diésel con hibridación ligera y etiqueta ECO... parece que la cordura aún se mantiene en la tierra. En el caso del Volvo es el B4 diésel, porque también lo hay con motor de gasolina. Por cierto, si queréis una opción más enfocada al placer de conducir, incluimos gustosamente al Alfa Romeo Stelvio.
Como te anticipábamos, en el vídeo que aparece a continuación te contamos muchas cosas del coche y esperamos servirte de ayuda a la hora de conocerlo un poco mejor.
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Qué hay de nuevo en el Volvo XC60
Este coche llegó al mercado en 2019 estrenando una nueva plataforma. Lo más destacado, a día de hoy, es que tiene versiones gasolina y diésel, (sí, diésel) con etiqueta ECO de la DGT. El coche que probamos es la prueba de ello. También está disponible con tracción delantera o a las 4 ruedas y, también interesante hoy en día, es que tiene Google instalado, con todas las ventajas que conlleva.
Con respecto a los rivales mencionados, el Volvo XC 60 gustará a los fieles a la marca porque trata muy bien a sus pasajeros: tiene buena calidad de fabricación y los materiales están elegidos con mimo. El confort de marcha es elevado, en gran parte porque tiene suspensiones neumáticas opcionales, pero sí que se queda un paso por detrás a la hora de las curvas y, casi podríamos decir, dos pasos atrás si lo comparamos con el Alfa Romeo.
Qué significa la "B" en el Volvo B4
Normalmente, los fabricantes “sacan pecho” de sus versiones “Sport”, “Turbo”, “Rally”… en esta ocasión, Volvo lo hace con la regeneración de la energía. El Volvo XC 60 B4 recarga las baterías de sus sistema híbrido, principalmente, con las frenadas. Sí, además de rodando por inercia con una marcha engranada, la energía cinética se transforma en electricidad a través de los frenos, “brake” en inglés, y así recargar la batería para alimentar a la unidad eléctrica. De ahí viene la “B”.
Durante la prueba, siempre hemos visto el pequeño indicador de carga de la batería lleno, aunque Volvo no nos ha facilitado su capacidad.
Qué destaca en la versión B4 diésel
El coche monta un motor diésel de 4 cilindros y un sistema híbrido a 48V con motor eléctrico de 14 CV que también aporta unos generosos 40 Nm de par máximo, lo que ayuda al motor de combustión a bajas revoluciones.
Eso sí, conduciéndolo, raro será que notes el sistema de hibridación, ni por el empuje al motor de combustión, ni siquiera porque maniobres con el motor eléctrico. Tampoco hay indicadores en el cuadro de relojes que nos digan potencia extra o carga de la batería. Nada. Pero, y es un pero muy importante y positivo: en el día a día no notarás nada por parte de la electricidad… a no ser que te fijes en que llevas etiqueta “ECO” de la DGT y eso te ayuda a circular con libertad y a aparcar a menor precio en la ciudad. Volvo también habla de un descenso de un 15% en el consumo homologado de combustible, nosotros hemos rondado los 6,5 litros de media y eso es un poco más de los 6,1 homologados. No nos preocupa, hemos visto el indicador de autonomía rondar los 1.300 kilómetros.
Cómo es el motor diésel de la versión B4
La base es un motor de 4 cilindros ya conocido dentro de la gama XC60. Completamente fabricado en aluminio, tiene 2 litros de cilindrada, inyección directa por raíl común, turbo de geometría variable e Intercooler. Desarrolla 420 Nm de par máximo entre 1.750 y 2.750 rpm y lo consigue, en gran parte, gracias a tener carrera larga: 93,2 mm de carrera por 82 mm de diámetro de pistón. Por su parte, la potencia es de 197 CV a 4.000 rpm.
En la práctica, tenemos un motor suave en su funcionamiento, aunque un pelín ruidoso, con buena entrega de fuerza desde bajas vueltas, por sí mismo y por la ayuda del eléctrico, y muy agradable de usar porque “siempre” ofrece respuesta.
El Volvo XC 60 B4 tiene cambio automático y AWD
Puedes elegir un Volvo XC 60 B4 con motor gasolina o diésel. Si lo eliges con gasolina, tendrás un coche un poco caro y que consume 1,5 litros más de media homologada. Aparte, sólo puede tener tracción delantera.
Si miras al recomendable diésel, tendrás, como decimos, un precio de partida parecido: 56.250€ y un consumo medio mejor. Además, puedes elegirlo con tracción delantera o a las 4 ruedas. Las versiones con tracción a las 4 ruedas parten de 60.300 €.
En cualquier caso, la caja de cambios es automática de 8 marchas, deliciosa en su funcionamiento, porque apenas notarás los cambios de marcha y con un pomo del cambio muy especial: parece una joya tallada.
Un repaso al equipamiento del Volvo XC60 B4
La gama arranca en la versión Essential. Bien, es posible que tenga equipamiento de sobra para la mayoría de nosotros, pero si puedes acceder al siguiente acabado, denominado Core, ya tendrás un equipamiento mucho más satisfactorio por unos 1.500 € más.
Aunque, eso sí, aunque Volvo tiene a gala un equipamiento de seguridad muy bueno, tendrás que pagar aparte, solo es de serie en el tope de gama, por unos 1.400 €, el pack “Drivers Assit” que suma la asistencia de colisión trasera con frenado de emergencia, conducción semiautónoma “Pilot Assit”, el recomendabilísimo si viajas normalmente por autopista control de crucero adaptativo y el detector de vehículos en ángulo muerto “BLIS”.
Es decir, para tener un coche con muy buen equipamiento, has de pensar en 3.000 € más a partir de los 56.000 iniciales.
