Que los C-SUV llegaron para dominar era algo previsible, con lo que quizá no contábamos era con el dominio que han ofrecido. Y digo esto porque muy pocos pensábamos que los CUV, para que me entiendas mejor, los Coupé Utility Vehicle o, en la lengua de Cervantes, los todocaminos con carrocería coupé, que fueran a tener el éxito que atesoran ahora mismo.
Y es que ya representan un 20% del total del segmento C-SUV por lo que parece que se puede convertir en un auténtico filón y Renault no es ajeno a ello. Así nos lo acaba de demostrar con el Arkana que, para que me entendáis, sería el hijo que podrían tener el Laguna Coupé y el Kadjar aunque con cierta duda de si el Captur entró en la ecuación.
Porque aunque este SUV coupé se sostenga sobre la plataforma CMF-B de Renault, la que da vida al comentado Captur, por tamaño (mide 4,57 metros) se sitúa entre el Kadjar y el Koleos. En lo que a diseño se refiere, el frontal guarda los rasgos de los últimos Renault (faros en forma de C, calandra amplia…), pero la enfatiza con detalles de corte deportivo sobre todo en la versión R.S. Line que hemos conducido.
Ahora bien, lo más representativo se observa tanto en el lateral como en la zaga, lógicamente. De lado se le percibe una silueta elegante con una amplia distancia libre al suelo para ser un SUV, de 20 cm, y una caída del techo pronunciada que, como veremos, no afecta a la habitabilidad interior. Esta caída lleva directamente a la zaga, de aires deportivos, con un ligero spoiler en su zona final y unos paragolpes robustos. La firma lumínica es la habitual en Renault mientras que los escapes son falsos en el acabado R.S. Line. Nivel este que enfatiza esa deportividad con llantas de aleación de 18 pulgadas y varios de los detalles exteriores en negro. Adicionalmente está disponible en los acabados Intens y Zen.
Buena habitabilidad
De puertas para dentro tenemos un salpicadero idéntico al del Captur y Clio. El acceso es cómodo gracias a la elevada altura libre al suelo mientras que la calidad de los materiales es excelente. Está completamente digitalizado gracias al cuadro de instrumentos de 10,25 pulgadas y a la pantalla central de 9,3 pulgadas en disposición vertical. Las diferencias que hemos encontrado han sido en la colocación del pomo del cambio, algo más abajo que en el Captur, y la moldura imitando la fibra de carbono exclusiva del nivel R.S. Line.
La habitabilidad también difiere… pero para bien. Porque los 2__,72 metros de batalla__ (un Captur tiene 8 cm menos) dan lugar a una zona trasera amplia, con espacio más que de sobra para albergar a un adulto tanto en hueco para las rodillas como para la cabeza. En este sentido, la altura disponible al techo es buena y en nuestro caso (mido 1,79 m) sobraban casi 7 cm para que tocáramos con la coronilla. Otro punto positivo, el maletero, que cubica 513 litros en los Arkana microhíbridos y 480 litros en los Arkana E-TECH híbridos (la colocación de una batería mayor es la causa de la reducción). Cifras más que sobresalientes si lo comparamos con los 472 litros que cubica el Kadjar.
Apuesta híbrida
En el párrafo anterior hemos mencionado cuáles son sus alternativas mecánicas. Si te has percatado, no hemos mencionado ni una opción diésel sino que directamente hablamos de hibridación. Antes de continuar, tampoco hay opción de transmisión manual. En este contexto el nuevo Arkana podrá escogerse con un 1.3 TCe que declara 140 CV y que se combina con la caja EDC de siete relaciones y que luce la etiqueta ECO gracias a la microhibridación que monta con batería de 12 voltios. Tras el verano llegará una versión de 160 CV con el mismo sistema MHEV.
Por encima se sitúa el protagonista de nuestra toma de contacto, el Arkana E-TECH completamente híbrido que luce el mismo sello medioambiental y que hereda el sistema de propulsión visto en el Clio E-TECH. Hablamos de un motor de gasolina atmosférico de 1,6 litros que genera 90 CV combinado con otros dos bloques eléctricos de 49 y 22 CV. En total, 143 CV de potencia que son 3 CV más que los del utilitario y que se gestionan mediante la caja de cambios multimodo de 15 relaciones enfocada a la máxima eficiencia.
Porque una de las máximas de este Arkana E-TECH es contener al máximo el consumo. Monta una batería de 1,2 kWh de capacidad que si bien puede suministrar de energía al conjunto durante un intervalo breve de kilómetros si decidimos movernos exclusivamente en modo EV, lo cierto es que al dejar trabajar al sistema de manera automática Renault asegura que podremos circular hasta el 80% sin emitir ni gastar carburante. Para ello el sistema va eligiendo el motor más óptimo en función de nuestra conducción aunque, como te decimos, ofrece además del programa EV, el Comfort, el My Sense (individual) y el Sport.
En marcha, la sensación general ha sido la de suavidad y la de confort. El Arkana E-TECH no es un prodigio de agilidad pero se mueve de manera bastante equilibrada en todo tipo de escenarios. La suspensión filtra bien el asfalto y la dirección cuenta con un tacto bastante directo, __mayor incluso que el del Arkana MHEV según nos cuentan desde Renault. __
Precios del Arkana E-TECH
En definitiva, Renault parece haber sacado partido al vacío impuesto en el segmento C generalista en el que actualmente solo podríamos contabilizar al Toyota C-HR con una carrocería infinitamente menor. Para tener rivales dignos en tamaño habría que poner, en cambio, el ojo en los modelos Premium mucho más costosos tales como el Q3 Sportback, el BMW X2 o X4 o Mercedes-Benz GLC Coupé.
Pero una de las ventajas del Arkana es que con el acabado más deportivo, el R.S. Line, el pecio de partida es de 30.600 € sumando las llantas diamantadas, la tapicería de cuero, la pintura metalizada, los asientos calefactables o el asistente de aparcamiento Easy Park.
Ahora bien, desde el nivel más básico, el Intens, que cuesta 27.100 € propone llantas de aleación de 17 pulgadas, faros LED, sensores de aparcamiento, cámara de visión trasera, sistema multimedia con pantalla táctil de 7 pulgadas y cuadro digital de 7 pulgadas. Para optar por el de 10,25 pulgadas y el monitor de 9,3 pulgadas habrá que dar el salto ya al Zen, con un precio de partida de 29.100 € que además suma el selector de modos Multi-Sense o la carga inductiva. En cuanto a los precios del Arkana MHEV de 140 CV parte de los 25.750 € para el Intens, los 27.750 € para el Zen y los 30.250 € para el R.S. Line.