Nunca digas de esta agua no beberé porque si en algún momento los responsables de Polestar pensaron que era un ultraje pasar de ser una firma de alto rendimiento a entrar en la electrificación, el tiempo les ha puesto en su sitio. El tiempo y Geely, pues el gigante chino ha decidido que Polestar deje de ser una filial de Volvo para convertirse en una firma independiente que comercialice en todo el mundo productos eléctricos, eso sí, que no dejen de lado las prestaciones.
En otros mercados ha puesto a la venta el Polestar 1 pero en nuestro mercado han decidido comenzar por el Polestar 2 que protagoniza estas líneas. Un modelo que pronto estará rodeada de otros cuatro modelos más pues la estrategia de la marca es lanzar un nuevo producto cada año. El primero ya se ha desvelado, el Polestar 3 a los que seguirán los Polestar 4, 5 y 6.
Volvo parece…
El Polestar 2 es una berlina que mide 4,60 metros largo por 1,86 de ancho y 1.48 de alto. Entre sus principales rivales se sitúan tanto el BMW i4 como el omnipresente Tesla Model 3, el eléctrico más vendido de nuestro mercado. Luce un aspecto deportivo, con una ligera caída del techo y un pilar C robusto, que se entremezcla con cierto aspecto crossover por las protecciones plásticas de los pasos de rueda.
De lo que no hay duda es que tenga reminiscencias de Volvo pues ofrece detalles como las luces diurnas en forma de martillo con unas principales LED matriciales. La calandra es estrecha y en el centro del capó se coloca el símbolo de la marca. La zaga es quizá la zona de mayor personalidad por culpa del diseño de las luces, en forma de C y conectadas mediante una tira de LED inferior. Por cierto, la pintura que estáis viendo en esta unidad se denomina Snow, es metalizada, cuesta 1.000 euros y es una de las pocas opciones disponibles en el modelo.
… Volvo es
De puertas para dentro, lo primero que llama la atención es su semejanza con la firma sueca en lo relativo a la disposición del salpicadero. El cuadro de instrumentos es digital pero ofrece pocas visualizaciones y elecciones de meno, de hecho el ordenador de a bordo no se queda fijo nunca y siempre es necesario pulsar el comando del botón.
Respecto al monitor central tiene disposición vertical, mide 11 pulgadas e incorpora además el sistema operativo Android Automotive. Entre sus ventajas, además de proponer un funcionamiento rápido e intuitivo, como el de un smartphone, suma Google Maps y otras aplicaciones que se pueden descargar desde Google Play. Sin embargo, ser un coche tan digital tiene sus peros y la principal es la supresión de comandos físicos estando obligados a manejar todas las funciones a través de la pantalla, incluida la climatización.
En términos de calidad este Polestar 2 consigue una buena nota pero se queda a las puertas de ser un Volvo. Por ergonomía, los asientos son confortables, pueden estar tapizados en un material reciclado y cuenta con varios huecos portabojetos. Si hablamos de habitabilidad, el hueco resultante es suficiente para adultos de 1,80 metros aunque no destaca por su amplitud en el hueco para las rodillas ni para la cabeza. Por anchura, mejor viajarán dos que tres.
Para hablar del maletero hay que hacerlo en plural pues equipa dos: uno trasero y otro delantero. Al posterior se accede mediante un portón eléctrico con función manos libres dejando a la vista 405 litros con unas formas regulares y bastante profundidad. Además, tiene un práctico soporte que se levanta para evitar que las maletas se muevan y un doble fondo con un hueco bastante profundo que puede sujetarse mediante una barra. El delantero se encuentra, como en muchos eléctricos, bajo el capó. Cubica 41 litros y es más que suficiente para dejar ahí los cables de carga e incluso colocar una bolsa de deporte.
La versión a escoger
En marcha podríamos definirle como un coche equilibrado más que deportivo. Ahora mismo se situaría entre medias de un BMW i4, más dinámico, y un Tesla Model 3 en el que prima la eficiencia. Dentro de la gama de versiones, el Polestar 2 Long Range Single Motor que probamos aquí es la que deberías comprarte si quieres despreocuparte de la autonomía. Homologa un rango de 551 km gracias a la batería de 78 kWh brutos que equipa y que puede cargarse a potencias hasta de 155 kW en corriente continua y 22 kW en corriente alterna.
Pero la realidad nos dice que este Polestar 2 es un coche bastante pesadote lo que te va a impedir bajar de los 19 kWh/100 km de media. Con este gasto conseguirás cubrir una distancia de aproximadamente 450 km, pero en el momento en el que seas demasiado incisivo con el pie derecho, es improbable que superes los 400 km, aumentando el gasto medio a los 22 kWh/100 km.
Dicha versión monta un único motor colocado en el eje delantero que entrega 170 kW (231 CV) con un par máximo de 330 Nm. Las prestaciones son razonables pues cifra el 0 a 100 km/h en 7,4 segundos y la punta de velocidad es de 160 km. Se le nota perezosote en las aceleraciones fruto de esa peso excesivo ya comentado que roza las 2 toneladas.
No tenemos modos de conducción per sé sino simplemente la opción de elegir la dureza de la dirección y la intensidad de la frenada. En función de cuál elijas, lo cierto es que los cambios son notables sobre todo en los niveles más altos. En cuanto a la dirección es bastante precisa y mueve con mucha solvencia el conjunto. Pese a su equilibrio general es relativamente sencillo pasartelo bien en una carretera con curvas, más aún si activas el modo Sport del control de tracción que te permite juguetear un poco con el eje trasero. Respecto a la seguridad, no hay peros aunque la mayoría de asistentes está incluido en el paquete lite que cuesta 2.500 euros y que resulta imprescindible.
En definitiva
Que la electrificación haya hecho que el número de fabricantes aumente en un 20% respecto a hace un lustro no hace sino diversificar la oferta. Pero ser uno de los primeros en ofrecer una gama 100% cero emisiones puede resultar más que satisfactorio… y si no que se lo digan a Tesla. En el caso de Polestar, además, lo hace de manera on-line aunque se complementa con tiendas físicas conocidas como Polestar Spaces y Polestar Destinatios donde se consigue una experiencia de primer nivel. De momento en España están abiertos tanto en Barcelona como en Madrid donde podrás conocer de primera mano este Polestar 2 y, dentro de poco el Polestar 3.
Por posicionamiento, la marca sueca da el do de pecho adelantándose a su otrora marca matriz (Volvo) y complicándole la vida a los i4 y Model 3, sin obviar quizá el Mercedes-Benz EQE. Una terna a la que próximamente se unirá el Audi A6 e-tron. Si eres un conductor más racional y lo que buscas es parar lo menos posible, el Polestar 2 Long Range Single Motor es tu opción, para lo cual tendrás que tener preparados cerca de 50.000 euros, que es una tarifa más reducida que la del BMW, con más potencia eso sí, y más alta que la del Model 3.