Prueba: Daelim S3 Fi 125 Touring – Más rutero y confortable.

Para ello, el S3 Fi 125 llegó con un motor de lo más sofisticado y rápido, un buen nivel de confort y un precio que nada tenía que ver con el de sus rivales. Así y todo, flojeaba un poco en la protección aerodinámica, aunque ciertamente se ha solucionado en esta versión Touring con un nivel de equipamiento superior que apenas se nota en el precio final.     De este modo, el Daelim S3 Fi Touring no supera ni los 2.800 euros, con que sigue siendo un maxiscooter realmente accesible, y más si se tiene en cuenta que algunos de sus rivales más directos y exclusivos, como el XMax 125, pasan de los cuatro mil. Ahora bien, este es un scooter más urbano y compacto y con un concepto más cercano a modelos como el Citystar 125i de Peugeot. Es decir, un scooter largo y espacioso y con una gran capacidad de carga, pero que no se olvida de la agilidad y facilidad de conducción para solventar los desplazamientos y las maniobras en ciudad.

Esta nueva versión Touring se distingue de la normal por el respaldo para el pasajero y el parabrisas alto, lo que encarece el modelo únicamente en 150 euros. Por supuesto que sigue habiendo la posibilidad de montar un asiento diseñado para conductores de gran envergadura que no tengan suficiente con las regulaciones que permite el soporte lumbar, esas mediantes las cuales podemos ajustar a nuestra talla el espacio disponible. Los colores son el negro, el blanco y el gris titanio.

Estilo sugerente

Estéticamente no cabe duda de que ha primado el buen gusto gracias a unas líneas de lo más modernas que casan a la perfección con las tendencias más recientes del mercado. Así pues, por lo general, su línea es muy refinada, aunque son las luces de diodos LED delante y detrás las que más lo distinguen del resto porque son muy visibles incluso a la luz del día. El resto de detalles también están a una gran altura, especialmente los de carácter deportivo. En este sentido llama la atención el grosor del tubo de escape con doble salida —que por cierto emite un sonido muy deportivo al ralentí—, así como la presencia de un asiento ribeteado con hilo rojo, de unas llantas de cinco radios dobles y, finalmente, de un disco delantero lobulado.

Soluciones inteligentes

Vale la pena recordar lo útil que resulta la llave electrónica incluida de serie que activa la cerradura multifunción a menos de un metro de distancia. Con este sistema no hace falta que hurguemos en los bolsillos para buscar la llave de contacto. Basta con acercarse, presionar la cerradura para desbloquearla, girarla a la derecha cuando esté iluminada en azul y arrancar el motor. En cuanto al asiento, para abrirlo y acceder al espacio destinado a la carga, será suficiente con acercarnos y presionar el botón “SEAT” situado en el contra escudo. De hecho, la llave sólo abre una de las dos guanteras, donde por cierto también podremos encontrar un sistema de abertura mecánico para acceder al baúl.

De esta manera tan sencilla Daelim ha logrado simplificar un poco más la movilidad de cada día: encender el motor y abrir el asiento para coger el casco sin tener que sacar la llave del bolsillo lo hace todo mucho más sencillo y permite ganar tiempo. Por otro lado la capacidad de carga es sobresaliente, y aunque no podemos albergar dos cascos integrales bajo el asiento, sí que hay espacio para uno integral y otro tipo jet, además de lo fácil y cómodo que resulta poder cargar bolsas entre las piernas en un suelo plano de verdad. Detalles como el gato hidráulico o la luz de cortesía en el baúl no pueden ser de obligada presencia en un modelo tan económico, pero he aquí un nuevo punto a su favor que confirma el esfuerzo hecho por la marca sudcoreana.   

Datos técnicos

Un diez en ergonomía y comportamiento

A sus mandos tampoco da muestra de ser un modelo low cost. Ergonómicamente, por ejemplo, se agradece la disponibilidad de espacio para las piernas, pues tendremos plena libertad para moverlas por el suelo plano y también para estirarlas lo que nos apetezca si queremos relajarlas cuando circulemos por carretera. Y el manillar, que gira mucho y resulta de gran ayuda en las maniobras en espacio reducido, se encuentra en una posición muy elevada para que en ningún caso nos toquemos los brazos con las rodillas. Para que esto sea así, el precio que se paga es un manillar con un diseño un tanto extraño, casi como de custom. Finalmente, un asiento de una altura muy contenida (745 mm) y un soporte lumbar que se puede regular permiten que cualquiera pueda sentirse cómodo en él, desde la persona más alta a la más menuda.       

En ciudad, además de un amplio margen de giro y un asiento bajo, también ayudan las ruedas de 14 pulgadas delante y de 13 detrás, medidas que siempre son un garantía para moverse con soltura por las zonas más transitadas. También dispone de un sistema de frenada integral que mejora la seguridad en las desaceleraciones, aunque ya de por sí la potencia de sus frenos es buena gracias a los dos discos, de 240 mm el delantero y de 220 el trasero. Las suspensiones también cumplen bien con su cometido, si bien, puestos a pedir, su poder de absorción y su tacto están un poco por debajo del de otros modelos de la competencia, naturalmente mucho menos económicos. Pero su buen hacer en las grandes ciudades no le resta puntos a la hora de circular por carretera, pues la nueva pantalla de esta versión Touring protege mucho más y el motor corre como pocos…

Suave, progresivo y rápido

Era muy corriente, hasta la fecha, percibir grandes diferencias entre el tacto y las prestaciones de los motores de referencia, como por ejemplo los japoneses o italianos, y el resto. Poco a poco la distancia entre unos y otros se ha ido reduciendo, hasta el punto que, en el caso de este Daelim S3 125 Fi, ni se perciben. Esto se ha logrado gracias a un motor que busca acercarse al límite de la potencia que permite su cilindrada gracias a un doble árbol de levas en culata, un sistema de inyección electrónica de última generación y cuatro válvulas.

Con todo, la respuesta al acelerador es de una suavidad impecable, y, una vez pasados los primeros metros y el S3 125 Fi ya se ha lanzado, también muy sensible a nuestra voluntad. Tanto, de hecho, que en seguida percibes que es un scooter realmente rápido y que recupera bien, lo cual no sería posible si no fuera por un peso bastante contenido para un scooter de su condición (159 kilos en seco). No es raro, pues, ver la aguja del velocímetro sobrepasar los 110 por hora de marcador, o incluso más allá si circulamos por carretera y las condiciones nos acompañan. Y todo acompañado de unos consumos muy ajustados, ofreciéndonos una autonomía inmejorable, en parte gracias a los cerca de 13 litros de combustible que caben en el depósito.      

Conclusión

Esta versión Touring del S3 125 Fi no hace más que reducir el coste de algunos componentes que antes se ofrecían como opción. Y es que, por sólo 150 euros más, Daelim nos incluye la pantalla alta y el soporte lumbar para el acompañante, unas piezas que hasta ahora, vendidas aparte, rozaban los 250 euros. De esta manera no sólo se mejora el confort del conductor, que quedará más protegido del viento, sino también el del acompañante, que además del soporte lumbar también gozará de unas asas donde cogerse, de unos estribos auto-desplegables con el talón, y de un asiento muy espacioso.

En resumen, si ya era un maxiscooter con una relación calidad – precio muy atractiva, esta versión Touring la supera. Además, es muy habitual poderse beneficiar de alguna de las constantes promociones que lanza la marca sudcoreana, pues tiene por costumbre rebajar, de tanto en cuando, el precio de tarifa en unos doscientos euros, como por ejemplo durante todo este verano.