El Mercedes-Benz GLC estrena su segunda generación para seguir con la estela del éxito marcada por su predecesor, un modelo que ha arrebatado a los Clase A y Clase C el honor de ser los Mercedes más vendidos. Este nuevo GLC 2022, del que por cierto ya puedes ver el videocontacto haciendo clic aquí, desembarca con una gama mecánica 100% electrificada y con una tecnología heredada directamente del nuevo Clase S.
Ya está disponible por un precio que parte de los 58.150 euros y, como decimos, llegará con cuatro versiones microhíbridas (GLC 200 de gasolina con 204 CV, GLC 300 de gasolina con 258 CV, GLC 220d diésel con 197 CV y GLC 300d diésel con 269 CV) y con dos versiones híbridas enchufables (GLC 300 e de gasolina con 313 CV y GLC 300 de diésel con 333 CV.)
Todos automáticos y con tracción total
Todos los modelos incorporan un motor de cuatro cilindros y dos litros de cubicaje, así como una caja de cambios automática del tipo convertidor de par con nueve relaciones y el sistema de tracción total 4Matic. En el caso de los MHEV, añaden una pequeña batería con red de 48 voltios que suma en torno a 25 CV de potencia al rendimiento de los motores térmicos, mientras que en los híbridos enchufables la novedad más destacada es la nueva batería de 31,2 kWh de capacidad (el doble que la de los anteriores GLC PHEV). Ambos PHEV homologan una autonomía eléctrica de 100 km que es algo superior si se usa exclusivamente en ciudad.
En materia de diseño, pese a que no hablamos de un cambio revolucionario, sí se aprecian novedades en la parrilla, que cambia del acabado básico al acabado AMG Line, en los paragolpes y en los grupos ópticos (full led de serie.) Las llantas van de las 17 a las 20 pulgadas y la longitud crece en 60 mm (llega hasta los 4,72 m), por lo que mejora ligeramente la habitabilidad en la segunda fila y el volumen del maletero (400 l en los PHEV y 600 l en los MHEV, gracias a un gran doble fondo.) La variante coupé, muy demandada en nuestro país, llegará a los concesionarios en 2023.
Tecnología de Clase S
De equipamiento va bien servido, aunque lógicamente existe una infinita lista de extras. También mejora en lo que respecta a calidad percibida y a tecnología con dos pantallas de 11,9 y 12,3 pulgadas y el sistema de infoentretenimiento MBUX 7.0 con todo tipo de conectividad y navegación.
Durante nuestra toma de contacto hemos podido conducir el GLC 220d, una de las opciones del catálogo más racionales para alguien que necesite hacer muchos kilómetros en vías rápidas y al mismo tiempo entrar en los grandes núcleos urbanos sin encontrarse restricciones. Su respuesta es muy buena, lineal pero contundente y, aunque es verdad que notamos en ciertos momentos el ruido propio de un diésel, cuando el motor coge temperatura se mitiga bastante.
Cómo va el nuevo Mercedes GLC 2022
Por supuesto, el rendimiento es más que bueno en todos los escenarios posibles y, a nivel de chasis, prioriza el confort sin olvidar la estabilidad y la seguridad al circular en entornos más virados. De hecho, la dirección es bastante precisa y nos permite guiar el conjunto con total facilidad pese a los kilos y al tamaño de este SUV-D.
Hay disponible en opción una suspensión neumática Airmatic y un sistema de eje posterior direccional que facilitarán todavía más las cosas, pero ya de serie es un coche que dará satisfacciones a todo el que viaje en él. Eso sí, con la suspensión de serie los ocupantes traseros notarán más de lo deseado las irregularidades del asfalto y los obstáculos urbanos (badenes, etc.) que podamos encontrarnos.