Mercedes-Benz ha seguido el camino marcado por BMW al estrenar en su gama el primer SUV cupé. Se llama GLE Coupé y nosotros ya hemos probado el único motor diésel que se oferta: el 350d de 258 CV. Los experimentos ‘genéticos’ llevan décadas siendo criticados a nivel social, sobre todo por su uso fuera de fines médicos y curativos. Sin embargo, en el sector del automóvil son una tónica aceptada que lleva, igualmente, décadas produciéndose. En estos más de 100 años de historia automovilística hemos sido testigos de auténticos ‘engendros’ de cuatro ruedas generados a partir de la unión de dos conceptos: monovolumen y descapotable, compacto y furgoneta…
Ahora bien, si hay un segmento que siempre fue fiel a sus orígenes, ese era el de los todoterrenos… hasta que en 2005 eclosionaron los todocaminos. Desde entonces, las marcas no han hecho más que experimentar con ellos: desde reducir sus dimensiones hasta, incluso, privarles del techo y convertirlos en auténticos cabrios, pasando por la evolución genética que nos ha traído hasta aquí: el combinar su robusta figura con una línea coupé.
En este sentido, el pionero fue el BMW X6 (target=undefined). Un modelo que revolucionó el mercado cuando apareció en 2008 y que, desde entonces, ha dominado a sus anchas… hasta ahora. Sí, hace poco más de un año, Mercedes-Benz se sumergió en una profunda renovación de su gama todocaminos en la que no sólo varió la nomenclatura de sus modelos existentes sino que anunció la llegada de nuevos vehículos para seguir dando sentido a su eslogan comercial “algo está pasando en Mercedes”.
Uno de esos nuevos modelos es el que, además, ha hecho que estemos escribiendo estas líneas. Se trata de GLE Coupé, la variante deportiva de su GLE (conocido anteriormente como Clase M o ML), o lo que es lo mismo, el único rival capaz de plantarle cara al mencionado X6… de momento. Y es que está previsto que tanto Audi como Porsche lancen en los sucesivos meses (no antes de que acabe el año) sus respectivos SUV coupé bajo el nombre de Q6 o Caynne Coupé. Una moda que ya se ha extendido a otros segmentos más pequeños como bien se puede comprobar con los Land Rover Range Rover Evoque Coupé, BMW X4 y Mercedes GLC Coupé, a los que posteriormente se unirá el Audi Q4.
Como una apisonadora
Nada más situarnos ante él, lo primero que impresiona es su descomunal figura. Si me permitís hacer un paralelismo televisivo, este GLE Coupé me recuerda al personaje “La Montaña” de Juego de Tronos. El SUV deportivo alemán impresiona por sus proporciones que vienen determinadas, numéricamente, por una longitud de 4,90 metros, una anchura de 2 metros y una altura de 1,73 metros. Pero más allá de sus cifras, visualmente, el GLE Coupé es toda una bestia. Desde su voluptuoso frontal, con una calandra de grandes dimensiones presidida por un logo sobredimensionado, hasta su enorme zaga, con un parachoques que la domina por completo… sin olvidar, claro está, los descomunales pasos de rueda (causantes de que su anchura llegue a los 2 metros) ni los gigantescos faros que equipa, tanto delanteros como traseros y todos con tecnología LED (los delanteros son adaptativos). El toque deportivo se lo otorga la pronunciada caída del techo, seña de identidad de este y otros modelos de la marca de la estrella que llevan adherido el término ‘coupé’. Una línea que finaliza en un voladizo trasero muy aerodinámico, con un portón achatado y con una luneta trasera muy inclinada.
- Ficha Técnica Mercedes-Benz GLE Coupé 350d 4Matic
Motor: Diésel, seis cilindros en V
Cilindrada: 2.987 cc
Potencia: 258 CV a 3.400 rpm
Par: 620 Nm a 1.600 rpm
Velocidad Máxima: 226 km/h
0-100 km/h: 7,0 seg.
Consumo (urbano/extraurb./mixto): 7,5 / 6,4 / 6,9 l/100 km
Emisiones CO2: 180 gr/km
Dimensiones: 4.900 / 2.003/ 1.731 metros
Maletero: 650-1.720 litros
Peso: 2.250 kg.
Cambio: Automática con convertidor de par, de nueve velocidades
Depósito: 93 litros
Precio: 79.475 euros
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Una estética impresionante que, eso sí, no está exenta de alguna que otra dificultad relacionada, principalmente, con la comodidad de acceso. Y es que el contar con una carrocería tan alta provoca que los pasajeros tengan que hacer un mayor esfuerzo tanto para para subirse a los asientos como para cargar sus maletas. En este último caso, destaca negativamente la elevada boca de carga de la que dispone, situada a nada menos que 90 centímetros de altura, provocando que tengamos casi que hacer contorsionismo para depositar los bultos, sin mencionar la dificultad que ello implica si, además, este pesa más de la cuenta.
Ahora bien, no todo iban a ser inconvenientes. Si tienes niños pequeños, este exceso de altura te permitirá atarle en su silla sin tener que agacharte y tirar de espalda. Además, otra de las ventajas que ofrece es la amplia visibilidad del entorno con la que cuentas. El ir sentado por encima del resto de vehículos te permitirá contar con una ventaja a la hora de maniobrar, aunque si eres más o menos ‘pequeñito’ puede que no acabes de ver dónde acaba el capó delantero.
Espacio Premium
Ya que hemos conseguido acceder a los asientos delanteros, decirte que estarás posicionado en un vehículo que derrocha calidad por los cuatro costados. Se nota que es uno de los modelos ‘top’ de Mercedes-Benz, como se comprueba en el tacto y en el perfecto ajuste de sus materiales. Eso sí, si esperas algo de innovación estética, deja de imaginar porque su apariencia es idéntica a la del resto de hermanos, de hecho, salvo por las dimensiones del salpicadero, si nos dijeran que estamos ante la consola central del renovado Clase A… nos lo creeríamos.
Sin embargo, si por algo destaca este GLE Coupé es por su excelente habitabilidad. Más allá de las comentadas complicaciones para entrar en su habitáculo, una vez te has colocado en sus asientos traseros gozarás de un espacio superior tanto para las piernas como para la cabeza. Sí, pese a la caída del techo antes mencionada, a no ser que sobrepases los 1,95 metros de estatura, no deberías tener ningún problema para colocarte sin tocar el techo. Lo mismo ocurre con el hueco horizontal pues un conductor de 1,78 metros, como el que suscribe estas líneas, tendrá espacio más que de sobra. Todo ello se completa con un maletero envidiable que cubica nada menos que 650 litros, de los cuales, 90 se esconden bajo el piso, permitiéndote guardar los objetos de mayor valor. Una capacidad sobresaliente que supera, con creces, a la del X6 (580 litros).
Deportivo de peso
Una de las grandes dudas que suscitan este tipo de vehículos hace referencia a su comportamiento, más aún cuando vemos que en su ficha técnica, el peso declarado, con conductor incluido, es de 2.250 kilogramos (ahora cobra más sentido el apelativo apisonadora con el que le hemos bautizado previamente). No obstante, una vez nos ponemos en marcha, este GLE Coupé nos sorprende muy gratamente. El confort de marcha que ofrece, tanto por carretera como por ciudad, es muy elevado. En vías secundarias también se muestra muy noble en las reacciones. Sí, el peso está ahí, pero si somos finos en la trazada, seremos capaces de hacer que esos casi 5 metros de carrocería y esas más de dos toneladas de peso, se metan en la curva igual que si fuera un AMG GT... o casi. Para ello, de serie, equipa el selector de modos de conducción Dynamic Select, con cuatro programas distintos (Sport, Comfort, Calzada Resbaladiza e Individual) que varían la respuesta del motor, del cambio y de la dirección, dependiendo de cuál elijamos.
Si queremos conseguir una sensación más deportiva, además, te recomendamos que añadas tanto las barras estabilizadoras activas, que reducen el balanceo de la carrocería, como la suspensión neumática Airmatic. Bien es cierto que tendrás que desembolsar 4.500 y 2.500 euros, respectivamente, pero merece… porque qué cantidad es esa cuando estás pagando cerca de 79.500 (y eso de serie) por una unidad como la nuestra.
Un precio que corresponde con la única versión diésel que se oferta, de momento, en la gama del GLE Coupé. Se trata de la 350d y se propulsa gracias al conocido motor turbodiésel V6 de 3.0 litros de cilindrada que genera 258 CV y 620 Nm de par. Un potencial más que de sobra para que el conductor se sienta satisfecho con lo que tiene entre las manos, ya que proporciona un gran empuje desde bajas vueltas que se mantiene constante hasta más allá de las 4.000 rpm. Como decimos, no parece que estemos ante un vehículo de 2.250 kilos, ya que como dictaminan sus datos, este sólo necesita 7 segundos para alcanzar los 100 km/h desde parado.
Para gestionar toda esta potencia, el GLE Coupé opta por una caja de cambios automática con convertidor de par, 9G-TRONIC, de nueve relaciones. Gracias a ella, el consumo, sobre todo por carretera, decrece bastante. En este sentido, durante nuestra semana de pruebas, el modelo registró un gasto medio de 8,5 l/100 km. Es un dato alto pero se palia con un enorme depósito de combustible de 93 litros. Cierto es que a ritmo legal jamás llegaremos a engranar la novena marcha pero como dato reseñable, decir que cuenta con un desarrollo a 1.000 vueltas de casi 80 km/h, circunstancia que provoca que a 120 km/h, la aguja del cuentarrevoluciones supere por poco las 1.600 vueltas, régimen al que entran en su totalidad los 650 Nm de par.