Land Rover tiene en su nuevo Defender dos posibilidades de carrocería: corta, de 3 puertas, denominada 90; y larga, de 5 puertas, denominada 110. Antiguamente, hacían referencia a las pulgadas de la batalla. Hoy, solo recuerdan a esa denominación y aún diferencian los tamaños. También, tienes una interesante gama mecánica con motores gasolina y diésel con hibridación ligera y hasta un híbrido enchufable.
Y, después, está el V8. Este es el coche que nos ocupa, el tope de gama, lo más de lo más en prestaciones. Un coche que da la espalda a la hibridación y utiliza los recursos de Land Rover en un puro elemento de fuerza bruta: 525 CV y un 0 a 100 km/h en 5,4 segundos.
En este vídeo, además de leyendo está prueba, tendrás información e imágenes espectaculares del coche creadas por nosotros.
Qué tipo de coche es el Defender 110 V8
Estamos ante un coche que tiene numerosas cualidades extraordinarias. El Lando Rover Defender está fabricado con las últimas tecnologías de la marca inglesa en materia de resistencia y robustez.
Esto es aplicable a la versión corta, Land Rover Defender 90, y también a esta larga que nos ocupa.
La estructura del coche es denominada internamente “D7x” por Land Rover (donde la "x" es un guiño a "extremo”). Se basa en un monocasco de aluminio ligero a partir del cual han creado, según sus datos, “la carrocería más rígida de Land Rover fabricada hasta el momento”. Es tres veces más rígida que los diseños tradicionales de carrocería montada sobre largueros y travesaños y, por supuesto, sirve como base para la suspensión neumática o la de muelles. Por otra parte, la plataforma posibilita la incorporación de los motores electrificados.
El nuevo Defender ha superado más de 62.000 pruebas antes de dar por finalizada la fase de desarrollo, mientras que la arquitectura de la carrocería y el chasis se ha diseñado para resistir la intensa prueba de “fenómenos extremos” de Land Rover, por la que someten al coche a impactos repetidos y mantenidos, como subir escalones, y va más allá de los estándares habituales para SUV y turismos.
De esta manera, hay pocos coches que puedan rivalizar con el Land Rover Defender 110, que también lo hay ECO. El primero que, seguro, te viene a la cabeza es el Mercedes Clase G, un coche que responde a la definición de “todo terreno puro”. Coches como el Mitsubishi Montero o el Toyota Land Cruiser podrían ser otros rivales, aunque menos lujosos y más pequeños.
Cómo es el motor V8 del Defender
Esta versión es el tope de gama, el más potente de los disponibles. Puedes elegir unos interesantes motores diésel con hibridación ligera, un híbrido enchufable si tienes punto de recarga, sobre todo en casa o en la oficina o el V8 que nos ocupa.
Se trata de un motor alimentado por gasolina de 8 cilindros en V con 5 litros de cilindrada y sobrealimentado por compresor. Concretamente, la nueva versión V8 toma fuerza del legado del Land Rover V8 que va desde el motor original V8 de los setenta, los modelos de la especificación de Norteamérica de los noventa, ambos del Siglo XX, y el potente Defender Works V8, en los albores del XXI.
Pero no tiene nada que ver aquel coche de los años 70 con este. El motor, tampoco. Aunque ambos sean V8. Este nuevo Land Rover Defender es un coche moderno y ergonómico y en esta versión V8 tiene un comportamiento excepcional, como luego veremos.
Tiene 5 litros de cilindrada y 4 válvulas por cilindro, lo que nos da un total de 32 válvulas comandadas por doble árbol de levas. Se alimenta por inyección directa y cuenta con compresor e Intercooler. Está completamente fabricado en aluminio y pertenece a la familia de motores Ingenium de Land Rover.
Entrega 525 CV de potencia entre 6.000 y 6.500 rpm, por lo que tiene una buena capacidad para girar alto de vueltas. Por otra parte, desarrolla 625 Nm de par máximo entre 2.500 y 5.500 rpm. Una cifra que destaca por lo amplio del rango en que la ofrece.
Qué prestaciones consigue el Defender V8
Pocas esperanzas teníamos en que el coche fuera rápido. Tiene una longitud de 4,76 metros (llega a 5 metros sin contamos la rueda de repuesto), una anchura de 1,99 y 1,96 de altura. Pese a su construcción en aluminio, el Land Rover Defender 110 V8 pesa 2.678 kilos... luego le sumas la familia y el equipaje.
Es un peso elevadísimo, pero después echamos cuentas: con los 525 CV que desarrolla, tiene una relación peso potencia de 5,1 kg/CV... un kilo superior a la de un Porsche 911 y nada menos que 2,5 kilos mejor que un Mini 5 puertas Cooper S.
Así, el Land Rover Defender V8... “corre que se las pela”. Acelera de 0 a 100 km/h en... 5,4 segundos... y lo notas, notas el empuje, el sonido y la fuerza del motor. Y corre hasta los 240 km/h.
Para detener los 3.000 kilos a 240 km/h monta unas pinzas Brembo de altas prestaciones que no defraudan, aunque diríamos que mejor si tuviera los discos perforados, para ayudar a disipar el calor generado.
Sin ningún tipo de hibridación, tiene etiqueta “C” de la DGT.
El Defender V8 sigue siendo un 4x4 puro
La potencia sigue llegando a suelo a través de las 4 ruedas, con predominio en el tren trasero. Además, como el resto de la gama, el Land Rover Defender tiene reductora con lo que multiplica la fuerza del motor. Monta neumáticos bastante grandes, por no decir enormes, con medidas 275/45 R22.
De serie, equipa suspensiones neumáticas que elevan la altura de la carrocería o la reducen en carretera a alta velocidad. Además, varían la dureza en función de los modos de conducción.
Lo peor son los neumáticos. Aunque desarrollados para el peso del coche, están lejos de las posibilidades camperas del Defender y han sido más enfocados a un uso por carretera. Si quieres logar mejores prestaciones Off-Road, mejor piensa en unos neumáticos más camperos. Pero, no te preocupes, para hacer una excusión campera seria con garantías, tienes con los que monta de fábrica.
Cómo es la conducción del Land Rover Defender V8
Con todo lo visto hasta ahora: tamaño, peso, potencia, suspensiones, frenos, neumáticos te puedes hacer una idea de que es un “autobús atómico”. Se trata de un coche de gran tamaño con que puedes ir más deprisa que un pequeño Mini deportivo...
Pero, la pregunta es: ¿tiene buen comportamiento?. En términos absolutos: sí, de hecho mejor que el resto de la gama y, en términos relativos, doblemente “sí”. Es decir, para ser una “mole” de 2,7 toneladas y 1,96 metros de alto... el Land Rover Defender se comporta entre curvas como una dama en un baile de la alta sociedad.
Se apoya en un juguete electrónico muy interesante: el bloqueo activo de diferencial trasero que suma un controlador de giro para potenciar la agilidad y tener un reparto de potencia entre las ruedas traseras capaz de hacerle salir de la curva con propulsión. Una virguería.
Y nos alegra muy especialmente que pueda mantener el ritmo ágil de una conducción decidida, sin grandes balanceos (en parte por las suspensiones y en parte por las estabilizadoras específicas) y con una precisión de guiado encomiable. Nunca lo hubiéramos dicho.
Además, cuenta con el modo de conducción “Dynamic”, único para esta versión V8 por el que el coche se prepara para hacer una conducción dando lo mejor de sí entre curvas.
También son descomunales los consumos. Raro será verle bajar de 15 litros a los 100 en un uso normal, combinando ciudad, carretera y autopista.
Como tope de gama en potencia y prestaciones, también lo es en precio. Esta versión V8 del Land Rover Defender 100 parte de 139.000 €.
La parte buena es que todo de lo que hemos hablado está montado de serie: frenos de altas prestaciones, suspensión neumática, diferencial trasero activo... además de los elementos multimedia y cuadro de relojes digital.
