Como su rival galo, el Kia ahora es mucho mejor, pero... ¿tanto como el Renault? Estéticamente, el Carens -que cambia por completo- tiene un aspecto más llamativo y deportivo, sobre todo en su parte delantera. En cuanto a tecnología y equipamiento, ahora puede llevar muchos más dispositivos, como el avisador de cambio de carril... pero no es mejor que el Scénic. ¿En qué se impone realmente el coreano? Su motor 1.7 diesel es más agradable y 'contundente' que el 1.5 de Renault... y los siete años de garantía del Kia no los iguala ni el francés -con dos- ni ningún otro rival. Además, a pesar de ser mejor que su antecesor, el Carens sale... ¡5.090€ más barato que el Scénic a igualdad de equipamiento! ¿Y en qué cede el Kia? Básicamente, en capacidad de carga; no es que tenga poco maletero -ofrece 492 litros en la versión de siete plazas-, pero es que un Grand Scénic se va a unos interesantes 564 l.
El diesel de 115 CV será la versión más vendida... y la más lógica
19.440€... Toda la gama incluye 4.250€ de rebaja; muy buen precio.
115 CV... Un buen valor para ser la versión básica y con más cilindrada que sus rivales.
4,7 l/100 km... Valor correcto, pero sus mejores rivales se acercan a los 4,0 litros.
181 km/h...De sobra... para un coche familiar que no está pensado para correr.
Cómodo... y con cierta agilidad
El Carens estrena plataforma: va tan bien que más bien recuerda a un compacto -como el Cee'd 5p del que deriva-.
¡Muy bueno! Ha mejorado en comportamiento y se sitúa entre los mejores; no es el más cómodo -como el Citroën C4 Picasso- ni el más ágil -Ford C-Max-, pero su carrocería apenas balancea y se iguala a modelos como el Renault Scénic o el Toyota Verso.
Suficiente El 1.7 CRDi -motor que 'hereda' del Sportage- sustituye al anterior 1.6 CRDi. No es tan silencioso como el 1.5 dCi de Renault, pero sí tiene una mejor respuesta y también gasta poco -ronda los 5,5 l-. El cambio manual de seis marchas es rápido y su tacto resulta correcto, mientras que los frenos son potentes y resistentes -aunque aquí el Scénic es, de nuevo, la referencia-.
La Gama
Está disponible con tres acabados: Concept -básico, Drive -intermedio- y Emotion -completo-. Se puede elegir con cinco o siete plazas -por unos 700e más-. Todos llevan tracción delantera y cambio manual de seis marchas. No ofrece una variante de carrocería alargada.
Era necesario un cambio... y lo han mejorado
Todo es nuevo en el salpicadero: el volante -demasiado repleto de botones: hay 18, incluido el claxon-, la consola central, la instrumentación... Ahora resulta más moderno, tecnológico... y, según acabados, puede equipar una decoración bitono -como en la foto-. En conjunto, el diseño es atractivo y no tan 'de monovolumen' como en el Scénic.
Ha cambiado... a mejor; ahora, la postura de conducción es más bajita -mejor que en el Scénic-, pero la visibilidad lateral ha mejorado -aunque no gana al francés-. Como detalle, en las versiones de siete plazas -opción por 700 €- hay un pequeño espejo superior para controlar a los pasajeros de la tercera fila.
El interior cuenta con plásticos blandos y acolchados -en la zona superior del salpicadero- y, en conjunto, la sensación es de 'duradero'... y de ser tan bueno como un Scénic. Por practicidad es bastante bueno, con su amplia guantera principal -refrigerada- más otra entre los asientos, grandes huecos en las puertas, trampillas bajo el suelo, bandejas tras los asientos delanteros... -el Scénic es parecido, pero los huecos son, incluso, más grandes-.
El acabado Drive cuesta 1.700€ más que el básico Concept, pero añade sensor de lluvia y luz, climatizador bizona, llantas de 17", espejos exteriores plegables.... Es un equipamiento de serie algo mejor que el de un Scénic Dynamique.
Es una de las compras más interesantes de su segmento por precio, motor y garantía -nadie da siete años-. De hecho, en conjunto es tan bueno como el Renault Scénic... y sale mucho más barato.