En apenas 10 años de vida y con la segunda generación todavía bien fresquita, el Dacia Duster suma ya casi dos millones de unidades vendidas, lo que prueba con creces el afecto y la confianza de la que goza en el mercado global. Teniendo en cuenta esto y que pese a la incesable lucha que existe en los segmentos B y C el Duster sigue enraizado en la parte más alta de la lista de ventas, los encargados de renovar el modelo en la mitad de su vida comercial no han tenido que romperse mucho la cabeza. De hecho, los cambios con respecto a la versión de 2018 son mínimos. Eso sí, son tan escasos como acertados, porque ahora los clientes disponen de un Dacia Duster 2022 aún más atractivo, más maduro, más tecnológico y más confortable.
¿En qué cambia el Dacia Duster?
En el exterior solo apreciamos una nueva firma lumínica diurna led para los faros y los pilotos en forma de "Y" idéntica a la estrenada en el Sandero, un nuevo tono satinado para las barras de techo y un nuevo color Naranja Arizona para la carrocería. También se ha mejorado la eficiencia aerodinámica retocando las llantas de 16 y 17 pulgadas y el spoiler integrado en el portón.
Una vez dentro, existen nuevas tapicerías para los asientos, nuevos reposacabezas, un nuevo reposabrazos central deslizante y una pantalla central táctil que por fin llega hasta las 8 pulgadas. Además, la ergonomía mejora gracias a que los mandos del control de crucero y del limitador se sitúan ahora en el volante y a que en la versión de GLP se ha ubicado el botón que cambia el uso del combustible en una posición que queda más a la vista.
Motorizaciones del nuevo Dacia Duster 2022
En cuanto al catálogo mecánico, las novedades se ciñen a que el motor de gasolina más potente (1.3 TCe de 150 CV) se une de serie a la caja automática EDC de doble embrague y seis marchas. La gama se completa con los 1.0 y 1.3 TCe de 90 y 130 CV, el 1.5 Blue dCi de 115 CV -que puede ser tracción delantera o total- y el 1.0 TCe Eco-G de GLP que declara 100 CV y una autonomía máxima superior a 1.200 km con los dos depósitos llenos (50 litros de gasolina y 49,8 litros de gas.)
Durante la toma de contacto pudimos conducir la versión de 150 CV con la nueva caja automática y lo cierto es que tanto en lo referente a respuesta como a prestaciones no hay queja alguna. Empuja muy bien desde poco antes de las 2.000 rpm hasta lo que resta de cuentavueltas. El cambio en conducción normal hace las transiciones en el momento correcto para ayudar a ahorrar combustible y además las hace de una forma muy suave. Quizá en los momentos en los que menos cómodo se le nota es cuando le exigimos una reducción de marcha rápida al circular en un régimen bajo para afrontar con garantías un adelantamiento, pero basta con anticiparse un poco para solucionar ese hándicap.
El chasis no recibe modificaciones destacadas. Lo único, según la marca, es que la dirección electrónica es algo más firme a velocidades medias y altas. Sin embargo, en la práctica, la evolución apenas se siente.
Este nuevo Duster está disponible __desde 15.140 euros en su acabado más básico con el motor bifuel__ de gasolina y GLP que es, sin duda, una de las opciones más interesantes del modelo.
