Comparativa: Ssangyong Korando Vs. Toyota RAV4 – Buenas alternativas

Por su parte, el RAV4 ha dejado de ser un vehículo meramente off-road para demostrar su calidad como SUV urbano. Son dos alternativas excelentes si exigimos calidad o necesitamos un buen precio.   Por mucho que lo intentemos, el nombre RAV4 siempre invitará a pensar en 4x4. Toyota lleva muchos años comercializándolo con esta finalidad y resulta raro interpretarlo como un vehículo urbano. Pero en buena parte es el mercado y no los fabricantes los que mandan, así que los japoneses no han tenido más remedio que apostar por las versiones de tracción delantera si no querían verse obligados a jubilarlo antes de tiempo. En su último facelift, el RAV4 demostró que su carácter es más bien conservador y adquirió muy pocos retoques: tan sólo una nueva forma de la parilla, algunos cromados más en el frontal, unas molduras más grandes para los antinieblas y un paragolpes más pronunciado que aumentó su longitud en 4 centímetros. No es mucho pero, al fin y al cabo, su diseño es uno de los principales argumentos de compra y no había demasiada necesidad de cambiarlo.

Muy diferente es su rival, el Korando, un producto totalmente nuevo que ha sido creado bajo las líneas de un reconocido diseñador que algo sabe de esto. ¿Les suena el nombre de Giugiaro?. Su mano se ha dejado notar en los ángulos marcados y sobre todo en los musculosos pasos de rueda que, en nuestro caso, albergaban unas enormes llantas de 18 pulgadas a las que hay que sumar la doble salida de escape y el spoiler trasero, algo que resulta poco habitual en este segmento pero que es siempre atractivo a ojos del cliente. No está mal, ¿no?.  

Hay que recordar que SsangYong acaba de empezar una nueva etapa en su negocio, ahora dirigido por Mahindra tras la compra de un amplio porcentaje de la compañía, y que éste es el primer modelo de esa nueva era en la que ya hay prometidos otros cinco vehículos más.

3.500 euros de diferencia

Pero vamos al grano, ¿cuánto cuesta este nuevo coreano?. Aunque pronto se incorporarán más opciones, de momento SsangYong sólo ofrece el Korando con un único motor diesel de 175 cv a un precio base de 20.900 euros para la versión Line de tracción delantera. La unidad que hemos probado pertenece sin embargo al equipamiento más alto (Limited) también con tracción 4x2 y sin posibilidad de extras, por la que se piden 25.490 euros.  

La oferta de Toyota, cuyos precios arrancan en 22.000 euros, tampoco es mucho más amplia en este sentido. Los japoneses ofrecen sólo dos motores, un gasolina y un diesel, tres líneas de equipamiento y algún pack estético como el Cross Sport en el que se suprime la rueda de repuesto en el maletero (a cambio de un kit reparapinchazos) y las barras en el techo. Es una opción que se agradece si queremos darle un aspecto más urbano, pero por desgracia no ahorraremos ni un solo euro. Nuestra versión diesel de 150 cv con tracción 4x2, con el acabado más alto posible (Advance Cross Sport) cuesta 28.900 euros. Con algunos extras como el navegador con DVD, el techo solar o el arranque inteligente el precio sube hasta los 31.650 euros.

Interior

A efectos de calidad, la diferencia de casi 4.000 euros en el precio inicial se podría justificar en los materiales empleados y en la presentación de los instrumentos en el habitáculo. El Korando aprueba el examen porque no hay elementos mal ajustados ni terminaciones sospechosas, pero es cierto que abusa demasiado del plástico y podría haber prescindido de cosas lujosas - como los asientos de piel o la calefacción en los mismos – para darle algunas cosas a la instrumentación como un ordenador de a bordo más completo o una pantalla para la radio con algo más de atractivo. No obstante, tiene cosas muy buenas, como la buena habitabilidad en plazas traseras, la extraordinaria posición de conducción y los numerosos huecos portaobjetos repartidos por el habitáculo.

En el RAV4 el conductor no percibe tanta amplitud, pero sí una posición más baja que quita la sensación de todoterreno que no a todo el mundo gusta y que además facilita el acceso al habitáculo.  Por otra parte, la instrumentación es más detallista, muestra más cantidad de datos y los controles de la climatización bizona, por ejemplo, son más precisos porque no se limitan a una rueda de temperatura y otra de intensidad del aire.  La fila de asientos trasera, por cierto, es regulable en profundidad y hay algo más de espacio libre al techo en todo el habitáculo.

Conducción

Siendo ambos vehículos de tracción 4x2 parece más interesante buscar el dato de consumo y las capacidades en carretera antes que preocuparnos demasiado por sus prestaciones offroad. Sin embargo, hay que decir que los dos presentan buenas cotas off-road y una altura libre mínima (18 cm en ambos casos) suficiente para afrontar obstáculos moderados sin muchas preocupaciones.

Entrando en la mecánica, el motor 2.0T del Korando se caracteriza por un marcado efecto turbo que saca a relucir todo el caballaje anunciado en la ficha técnica. Es un motor potente que puede mover muy rápido sus casi 1.700 kg, pero le echamos en falta algo de progresividad para poder manejarlo de forma cómoda. Para que nos entendamos, es un motor que entrega mucho, pero todo de golpe (nada más pasar las 2.000 vueltas) y durante un margen del cuentavueltas estrecho. En el otro lado, el aspecto más positivo del SsangYong es su buen comportamiento en carretera: su estabilidad es buena a velocidades elevadas, la suspensión es más cómoda a pesar de las llantas de 18” y la capacidad de recuperación, con 360 Nm de par, es la mejor de los dos coches.

Datos técnicos

El RAV4, por su parte, es más suave y progresivo en todos los sentidos. Tanto el motor como el cambio están mejor coordinados y hay una mayor facilidad de manejo. En carretera, lo más destacable es el magnífico aislamiento de la carrocería en todos sus aspectos (rodadura, motor y aerodinámica) y la dirección, cuya asistencia eléctrica se adapta correctamente según la velocidad. Por el contrario, y aunque ambas fichas técnicas prometan casi lo mismo, los 25 cv que separan a ambos modelos se notan en la capacidad de recuperación y aceleración, que son ligeramente más lentas.    

Como comentábamos arriba, quizá una mejor entrega del motor repercutiría en el consumo del Korando, cuyo ordenador de a bordo marcó 7,4 litros de combustible al finalizar la prueba (realizada en un 80% autovía y un 20% ciudad). Con las mismas condiciones, el RAV4 consiguió establecer su consumo en 7,0 litros.

Maletero

El RAV4 gana la partida al coreano en cuanto a facilidad de carga se refiere. Su hueco de carga es más ancho y más alto, y también está situado a un nivel más cerca del suelo, lo que ahorra esfuerzos a la hora de subir bultos pesados. Además, el suelo del maletero es plano de principio a fin, con lo que sólo hay que empujar los bultos hacia el interior desde la boca de carga. La desventaja (y grande) de este modelo es que su portón se abre de forma lateral y no hacia arriba, lo que obliga a buscar aparcamientos con al menos un metro libre de distancia para abrirla completamente. Otra desventaja, por ejemplo en ciudad, es que tendremos que hacer coincidir el lado por la que se accede al maletero (izquierdo) con la acera si no queremos jugarnos el tipo muy cerca del tráfico rodado.

En cuanto a capacidad de carga, el Korando consigue unos 75 litros más de capacidad inicial gracias a su mayor longitud y a una distancia entre ejes mayor que permite colocar los asientos en una posición más adelantada. Sin embargo, en el RAV4 la banqueta trasera puede regularse en profundidad unos centímetros, cediendo o quitando algunos centímetros a la zona de carga que pueden resultar determinantes en algunos casos. En cualquier caso, hablamos de una capacidad de 486 litros por parte del coreano frente a 410 por parte del japonés.

Equipamientos correctos

En estas versiones, tanto uno como otro se encuentran equipados al cien por cien de sus posibilidades. El acabado Limited del Korando incluye todos los adornos estéticos mencionados, tapicería de cuero y calefacción en los asientos, control de velocidad, llantas de 18”, climatizador, bluetooth y entrada multimedia de tipo USB. Es un equipamiento amplio al que, por ejemplo, es imposible añadir una iluminación por xenón, automatismos de luz y lluvia o control de presión de los neumáticos.

El RAV4 tampoco puede añadir, ni siquiera como extras, los faros de xenón, los asientos de cuero o el control de presión. Sin embargo, el climatizador incluido es de dos zonas, se incluyen los sensores de luz y lluvia y se dan posibilidades a la hora de dotarle de un poco más de lujo. El techo solar eléctrico (900 euros) o el navegador con DVD (1.300 euros) son algunas de las opciones disponibles.

Resumen

Ambos modelos cuentan con una dura competencia en el saturado segmento de los SUV considerados urbanos (4x2).  Sus motores son potentes, consumen relativamente poco y se puede acceder a ellos a buen precio con un equipamiento más que decente. El Korando, por ejemplo, es recomendable para aquellos que busquen una posición de conducción más alta y un motor muy potente a un coste bajo. El RAV4, aunque es 3.000 euros más caro a igualdad de equipamiento, conquistará a aquellos que busquen facilidad a la hora de cargarlo de bultos, necesiten un buen acceso al habitáculo y den mayor importancia a la terminación de sus acabados y a la calidad de los kilómetros.