Sin embargo, esto no resulta suficiente ya que para muchos, poder disfrutar del prestigio y del placer de una buena conducción se necesita realmente un motor de gasolina de seis cilindros. Éste es precisamente el motor que ennoblece al Skoda Superb y hace de él una alternativa a tener muy en cuenta en su comparativa con el Audi A6 y el nuevo Mercedes Clase E.
Para ser exactos, el Skoda juega en una categoría inferior a la del Audi A6 y el Mercedes Clase E. Pese a ello, en muchos aspectos el hermano checo del Passat es capaz de sacarles los colores a las dos limusinas de alta gama alemanas. Y gracias a su sofisticado motor de seis cilindros se puede dejar ver en esas altas esferas.
El Superb: un milagro del espacio interior
Sobre todo en lo que respecta a la oferta de espacio ni el Mercedes y ni el Audi pueden plantarle cara al Superb. A pesar de que con sus 4,83 metros de longitud el Skoda es el candidato más pequeño – el Audi mide 10 centímetros más –, éste ofrece a sus ocupantes la mejor oferta de espacio, sobre todo en el banco trasero. Aunque en el Audi y en el Mercedes la primera fila resulta algo más espaciosa, en la parte trasera las condiciones de espacio son más bien normales.
Por el contrario, los ocupantes del fondo del Superb disfrutarán de una gran libertad a la altura de las piernas, de forma que incluso los pasajeros de mayor tamaño podrán cruzar las piernas. Tal cantidad de espacio resulta imposible de encontrar en los competidores y, en parte, incluso en el segmento superior. Sin embargo, gracias a esta característica el Skoda se convierte en la perfecta limusina de chófer apta para realizar largos y cómodos viajes.
Excelentes acabados
¿Cuál de los tres interiores es el más bonito? Esto es, sin duda, cuestión de gustos. El Audi representa la línea deportiva, el Mercedes es más clásico y el Skoda podríamos ubicarlo en algún punto intermedio entre ambos. La calidad de los acabados no admite queja alguna en ninguna de las tres limusinas, aunque el Audi es la referencia por excelencia y el Skoda también suma puntos gracias a la perfección habitual del grupo VW. No obstante, en el apartado de la selección de materiales Mercedes tampoco se queda corta.
En el plano del rendimiento al Skoda no le queda otra que asumir su derrota. Pero esto no resulta extraño, ya que aunque su motor de seis cilindros cuenta con la mayor cilindrada, éste desarrolla la menor potencia. Con un motor de 3,6 litros tan sólo alcanza los 260 CV. El motor montado por Audi consigue, gracias a la turbocompresión, casi 30 CV más con tan sólo tres litros de cilindrada y el motor de 3,5 litros de la casa Mercedes envía incluso 292 CV al cigüeñal.
Audi, el más rápido
Todos los candidatos tienen en común un amplio rango de revoluciones dentro del cual se sitúa el par motor máximo. En el caso del Skoda y el Audi esto sucede a partir de 2.500 revoluciones, y en el Mercedes a partir de 3.000 vueltas y hasta casi la marca de las 5.000. Esto proporciona un arranque espontáneo en todos los modelos, aunque en este aspecto no hay quien le tosa al Audi. Éste acelera a cien en 6,2 segundos. El Skoda resulta claramente más lento y necesita dos segundos más alcanzar los 100 km/h, mientras que el Mercedes precisa 1,5 segundos más. La limitación de velocidad se sitúa en todos ellos en los 250 km/h, aunque el A6 podría volar un poco más.
El Audi es el único que cuenta con una suspensión neumática adaptativa, aunque independientemente del modo de conducción que elijamos, el A6 dispone del chasis más duro. Para el día a día recomendamos utilizar el modo confort, dado que uno no desea percibir todas y cada una de las irregularidades de la carretera. Sin embargo, sus dos competidores también están equipados con bastidores rígidos – incluso, en parte, demasiado rígidos –que disminuyen en cierto modo el confort de conducción habitual de este segmento. Este reglaje llama la atención sobre todo en el caso del Mercedes, ya que no parece encajar bien en la filosofía de la casa. Quizá esto tenga un efecto positivo en la dinámica de conducción, pero los tres modelos son más bien limusinas de viaje clásicas para autopista que no suelen conducirse por carreteras sinuosas.
Tracción integral vs. tracción trasera
El Skoda y el Audi no sólo le sacan ventaja al Mercedes cuando se trata de trazar las curvas lo más rápido posible, sino también sobre un piso mojado o en invierno. Nos referimos, por supuesto, a la tracción integral. Tanto en el A6 como en el Superb, ésta proporciona en todo momento una buena tracción y un desplazamiento seguro. Bajo mi punto de vista, el hecho de que los de Ingolstadt incorporen un diferencial Torsen y Skoda un embrague haldex es mera teoría. Como es sabido, lo que cuenta es el resultado.
Y, en el caso del A6, dicho resultado se traduce en torsiones ocasionales perceptibles en el tren de propulsión. En la práctica, esto significa que cuando nos las vemos con un ángulo de giro pronunciado – por ejemplo al aparcar o en curvas estrechas –, las diferentes revoluciones en las ruedas obstaculizan la tracción si no somos cuidadosos con el gas. Este problema es ajeno a Skoda, ya que su embrague de discos múltiples de regulación electrónica sólo traslada la fuerza a las ruedas traseras en caso de necesidad. Ambos ejes no están unidos de forma "compacta" entre sí.
Una trasera firme gracias al ESP
Sin embargo, el sistema haldex reacciona en cuestión de segundos en caso de pérdida de adherencia de las ruedas delanteras, enviando de forma inmediata más fuerza a la parte posterior del vehículo. Además, el embrague haldex no sólo ahorra combustible, sino que funciona en ambas direcciones. Por el contrario, el diferencial Torsen sólo funciona en marcha hacia adelante.
En el caso de Mercedes, la situación es clara. El 100% de la fuerza se direcciona al eje trasero. Sobre superficies mojadas esto tiene como resultado una zaga algo bailona, lo que da lugar a una situación que, siempre y cuando no lo haga el conductor primero, corrige el ESP. Al tomar las curvas con cierta velocidad el Mercedes tiende más bien al sobreviraje, mientras que el Audi se mantiene casi neutral y traza la curva como si se deslizara sobre raíles y, a su vez, el Skoda comienza relativamente pronto a deslizarse el eje delantero.
Tres cajas de cambios
El conductor no debe preocuparse por el proceso de cambio de marchas en ninguno de los tres vehículos, aunque en este apartado también dispone de tres sistemas diferentes. Skoda monta una caja de cambios de doble embrague y de seis velocidades, mientras que las casas Audi y Mercedes incorporan un cambio automático con convertidor de par convencional, de seis velocidades en el caso del A6 y siete en el Clase E.
Aunque el cambio DSG del Skoda Superb represente la caja más moderna y maneje las marchas con gran rapidez y habilidad, no logra acercarse a la comodidad del clásico cambio automático. Sobre todo al arrancar y maniobrar resulta de vez en cuando algo molesto. La tecnología Tiptronic de Audi funciona a la perfección, pero a pesar de que Mercedes destaca por unos cambios de marcha extremadamente suaves, su cambio automático resulta en parte demasiado lento y necesita a veces algo de tiempo para llegar a la macha correcta.
El Skoda es el más económico...
En comparación con el Audi, el Skoda podría obtener dos puntos positivos en el apartado del consumo. Concretamente, por la tracción integral haldex y el cambio DSG. A esto cabe añadir el motor menos potente, lo que al final del día se traduce en un menor consumo (casi tres litros). Con un consumo medio de 11,4 litros, el Superb se perfila como claro vencedor en esta disciplina. El Mercedes se sitúa más bien en un punto intermedio entre los otros dos modelos registrando un consumo de 12,7 litros a los 100 km durante nuestra prueba. Aunque como buen tracción trasera debería ser más económico que los demás, también es cierto que debe alimentar a un motor más potente. El peso de 1,7 toneladas es prácticamente idéntico en los tres candidatos.
El Skoda no sólo pasa con menor frecuencia por la estación de servicio, sino que su marcador continúa aumentando cuando se trata del coste de adquisición. El precio del modelo básico de Skoda asciende a 37.320 euros, es decir 17.680 euros menos que el Audi – que se dice pronto – y éste, a su vez, casi 1.450 euros menos que el Mercedes.
Datos técnicos
Marca y modelo | Audi A6 3.0 TFSI quattro | Mercedes E 350 CGI | Skoda Superb 3.6 V6 4x4 | |||
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Acabado | ||||||
Especificaciones | ||||||
Longitud/anchura/altura (mm) | 4.927 / 1.855 / 1.459 | 4.868 / 1.854 / 1.471 | 4.838 / 1.817 / 1.462 | |||
Distancia entre ejes (mm) | 2.843 | 2.874 | 2.758 | |||
Diámetro de giro (m) | 11,9 | 11,25 | 11,52 | |||
Peso (kg) | 1.710 | 1.735 | 1.724 | |||
Volumen del maletero (l) | 546 | 540 | 565 | |||
Neumáticos | 225/50 R 17 | 225/55 R 16 | 205/55 R 16 | |||
Motor | ||||||
Cilindrada (cc) | 2.995 / V6 | 3.498 / V6 | 3.580 / V6 | |||
Potencia (cv) | 290 | 292 | 260 | |||
Par máximo (Nm/rpm) | 420 / 2.500 - 4.850 | 365 / 3.000 - 5.100 | 350 / 2.500 - 5.000 | |||
Tracción | Total | Trasera | Total | |||
Transmisión | Automática 6 velocidades (Tiptronic) | Automática 7 velocidades | Automática 6 velocidades (DSG) | |||
Consumo | ||||||
Combustible | Gasolina | Gasolina | Gasolina | |||
Urbano/Carretera/Combinado (l/100km) | 9,4 | 8,5 | 10,1 | |||
Emisiones CO2 (gr/km) | 219 / Euro 5 | 199 / Euro 5 | 235 / Euro 5 | |||
Consumo durante test (l/100km) | 14,1 | 12,7 | 11,4 | |||
Características | ||||||
Aceleración 0-100 km/h (s) | 5,9 | 6,8 | 6,5 | |||
Recuperación 80-100 km/h (s) en 4ª | 6,2 | 7,6 | 8 | |||
Capacidad depósito (l) | 80 | 80 | 60 | |||
Velocidad máxima | 250 | 250 | 250 | |||
Precio (sin extras) | ||||||
Euros | 55.000 | 56.450 | 37.320 | |||
Equipamiento extra | Control de velocidad (335 €), asientos delanteros calefactados (445 €), sensor de aparcamiento delantero (485 €), sistema MMI con navegación (3.025 €) | Asientos calefactados (464 €), sensores de aparcamiento delantero y trasero (996 €), sistema “Audio 50 APS con navegación” (1.584 €) | Sensor de aparcamiento delantero (350 €), sistema de navegación con DVD (1.460 €) | |||
Más datosMenos datos |
.. y el más asequible
Y eso que Skoda no escatima en el equipamiento. Los vehículos de serie presentan casi todos el mismo equipamiento, y los extras incluidos en el apartado del confort (climatizador, radio CD, etc.) son estándar en todos. El Superb incluye incluso el dispositivo Tempomat y los asientos calefactados delanteros de serie, algo por lo que en Audi tendríamos que pagar 780 euros y en el caso del Mercedes al menos 464 euros por los asientos calefactados.
Por contra, quienes decidan comprarse el Mercedes o el Audi dispondrán de una selección más amplia en la lista de extras. Skoda carece, sobre todo, de muchos sistemas de ayuda a la conducción, tales como el sistema de alarma de salida del carril o el sistema de detección de ángulos muertos. Sin embargo, el Superb también dispone de un completo equipamiento de seguridad. En lo que respecta a los extras de pago, éste modelo se encuentra claramente por debajo de sus competidores alemanes en cuestión de precios. Por ejemplo, el sensor de aparcamiento delantero cuesta 350 euros (Audi 485 euros, Mercedes 996 euros en un pack que incluye el delantero y el trasero) y un sistema de navegación con DVD ascendería a 1.460 euros (en Audi el MMI con navegación tiene un precio de 3.025 euros, por el sistema “Audio 50 APS con navegación” en Mercedes hay que desembolsar 1.584 euros).
Conclusión
Cualquier comprador sensible al precio debe decantarse por el Skoda Superb. El modelo checo ofrece el consumo más bajo y el precio de compra más asequible. En total, se puede ahorrar al menos 16.000 euros en comparación con el Audi o el Mercedes. Además, el Skoda ofrece una de las mejores ofertas de espacio y con su motor V6 de 3,6 litros dispone de un propulsor más que adecuado. El hecho de que el motor de gasolina resulte algo más escaso que los motores del A6 3.0 TFSI y del Mercedes E 350 CGI no tiene ninguna importancia en el día a día.