Hace unos años cualquier coche con un estilo deportivo estaba asociado necesariamente a una mecánica potente. Actualmente, con la aparición de numerosas versiones deportivas, es posible combinar la agresividad de la carrocería con motores menos potentes que rebajan el consumo de combustible y el coste del vehículo. Es el caso de un diésel como el Ford Focus 1.6 TDCi Titanium y de un gasolina como el Seat León 1.4 TSI Línea R, que tienen un precio de base que supera por poco los 20.000€.
Un línea R muy particular
La línea R es un paquete deportivo opcional que puede ser montado de fábrica con tres de las motorizaciones del León: 1.8 TSI de 160 CV, 2.0 TSI de 200 CV y 2.0 TDI de 170 CV. Sin embargo, también existe la posibilidad de incorporar este kit en los concesionarios a cualquier versión del compacto de Seat previo pago de unos 3.000€.
Este es el caso del León 1.4 TSI de 125 CV, que en su nivel de acabado más alto tiene un precio de 20.341€. Por medio millón más de las antiguas pesetas incorpora la línea R, que cambia por completo su diseño interior y exterior. Las carcasas cromadas de los retrovisores, las llantas de 18 pulgadas con cinco radios dobles, el paragolpes delantero con toma de aire sobredimensionada y el trasero con salida de escape doble, le dan un aspecto mucho más agresivo a su carrocería. Lo mismo ocurre dentro del habitáculo, donde los pedales de aluminio, el volante deportivo y el pomo del cambio esférico hacen que parezca que se está conduciendo un coche mucho más potente.
El acabado Titanium
Por su parte, el acabado más alto para el Focus de cinco puertas con motor 1.6 TDCi de 109 CV es el denominado Titanium. Tiene un precio de base de 20.705€ que aumenta en unos 2.500€ al incorporar algunos elementos que le dan un carácter muy deportivo. Se trata de los cristales tintados, los LEDs traseros, la pintura metalizada, las llantas de aleación de 17 pulgadas, la tapicería de cuero y la suspensión deportiva, que mejora notablemente el comportamiento del Focus en carreteras reviradas.
A pesar de ello, este tipo de vías no se le dan del todo bien al compacto de Ford. La principal causa es la caja de cambios de cinco velocidades asociada a la variante más potente del 1.6 TDCi, que cuenta con desarrollos demasiado largos en comparación con la transmisión de seis velocidades del León. El motor gasolina de Seat compensa su menor fuerza a bajas revoluciones con unas marchas mucho más cortas que permiten aprovechar al máximo sus prestaciones.
Gasolina Vs diésel
Enfrentado al 1.4 TSI de 125 CV del León con el 1.6 TDCi de 109 CV del Focus salen a la luz todos los argumentos del eterno debate entre gasolina y diésel. Mientras que el primero ofrece más nervio y menos sonoridad, el segundo se presenta como una mejor opción en cuanto a consumo y fuerza a bajas revoluciones.
El motor turbodiésel de Ford cuenta con 109 CV de potencia, 240 Nm de par motor máximo y unas cifras de consumo oficiales de 5,8 litros en ciudad, 3,8 litros en carretera y 4,5 litros en ciclo combinado. Por su parte, el propulsor gasolina turbo de Seat proporciona 125 CV de potencia, 200 Nm de par y unos datos de consumo de 8,2 litros en ciudad, 5,2 litros en carretera y 6,3 litros en una conducción mixta.
Todo esto se traduce en la supremacía del Focus en ciudad gracias a su reducido consumo de combustible, y en el predominio del León en carretera debido a su mayor potencia y a su sexta marcha, que le permite ahorrar mucho combustible en vías rápidas. De hecho, el consumo medio del Seat durante el período de prueba se acercó sorprendentemente a las cifras oficiales de la marca, mientras que en el caso del Ford se situó más de un litro por encima de los datos indicados.
Datos técnicos
| Marca y modelo | Ford Focus 1.6 TDCi | Seat León 1.4 TSI | ||
|---|---|---|---|---|
| Acabado | ||||
| Especificaciones | ||||
| Longitud/anchura/altura (mm) | 4337 / 1839 / 1500 | 4315 / 1768 / 1458 | ||
| Distancia entre ejes (mm) | 2640 | 2578 | ||
| Peso (kg) | 1357 | 1324 | ||
| Volumen del maletero (l) | 396 | 341 | ||
| Neumáticos | 205/55 R16 | 225/40 R18 | ||
| Motor | ||||
| Cilindrada (cc) | 1560 (4 cilindros en línea) | 1324 (4 cilindros en línea) | ||
| Potencia (cv) | 109 | 125 | ||
| Par máximo (Nm/rpm) | 240/1750 | 200/1500-4000 | ||
| Tracción | Delantera | Delantera | ||
| Transmisión | Manual, 5 velocidades | Manual, 6 velocidades | ||
| Consumo | ||||
| Combustible | Diésel | Gasolina | ||
| Urbano/Carretera/Combinado (l/100km) | 5,8 / 3.8 / 4,5 | 8,2 / 5,2 / 6,3 | ||
| Emisiones CO2 (gr/km) | 119 | 150 | ||
| Consumo durante el Test (l/100km) | 5,8 | 6,5 | ||
| Características | ||||
| Aceleración 0-100 km/h (s) | 10,9 | 9,8 | ||
| Recuperación 80-100 km/h (s) en 4ª | N.D | N.D | ||
| Capacidad depósito (l) | 53 | 55 | ||
| Velocidad máxima | 188 | 197 | ||
| Precio (sin extras) | ||||
| Euros | 20.705 | 20.341 | ||
| Más datosMenos datos |
Más espacio en el Focus
En lo que al espacio dentro del habitáculo se refiere, se puede tomar como referencia el volumen de carga del maletero de estos dos compactos. Mientras que el Focus tiene 396 litros bajo la bandeja y 1258 litros con los asientos traseros abatidos, el León cuenta con unas cifras de 341 y 1166 litros. Esta ventaja del coche americano se debe a que tiene unas dimensiones ligeramente mayores, que también influyen decisivamente en el espacio disponible para sus ocupantes.
Los casi cinco centímetros de altura de más que tiene el Focus se dejan notar especialmente en la amplitud de las plazas traseras. Tiene la banqueta en una posición bastante elevada que aumenta decisivamente el espacio para las piernas. En el León, todos los asientos están situados más cerca del suelo, lo que provoca cierta falta de espacio en los traseros y una sensación muy deportiva en los delanteros. De hecho, el puesto de conducción del Seat León es bastante “racing”, con un asiento que recoge mucho lateralmente y un panel de instrumentos en el que destaca la esfera central para el cuentarrevoluciones. Además, los pedales de aluminio que incorpora la línea R tienen un tacto muy agradable, así como el volante deportivo y la palanca de cambios, que cuenta con una bonita inscripción de Seat Sport.
Sistemas multimedia
Tanto en el salpicadero del Focus como en el del León, el elemento que más llama la atención es la pantalla táctil situada en la consola central. En el caso del Ford es de siete pulgadas en la opción del sistema de navegación, que tiene un precio de 1.600€. En el León es de 6,5 pulgadas y desde ella se pueden manejar el navegador, el disco duro de 30 Gb y el lector de DVD que forman parte del Seat Mediasystem, que cuesta 1.483€.
Sí vienen de serie en los dos modelos el ABS, el control de tracción, el control de estabilidad y la distribución electrónica de la frenada, así como el control de crucero, el ordenador de abordo, los mandos en el volante, los faros antiniebla y el climatizador bizona. El León cuenta con algunas opciones más de fábrica como las luces con función “coming home” o el testigo de la presión de neumáticos.
Conclusión
El Ford Focus con motor 1.6 TDCi de 109 CV destaca por la amplitud de su habitáculo y por su reducido consumo de combustible, que le hace muy competitivo para el uso diario en ciudad. En este entorno el Seat León 1.4 TSI de 125 CV no se siente tan cómodo, aunque se presenta como una buena opción entre los motores gasolina por su relación entre prestaciones y consumo. Además, el compacto de la firma española cuenta con una atractiva estética gracias a los extras de la línea R, cuya deportividad va muy acorde con el buen comportamiento dinámico del León.
