Mini, por el contrario, ha decidido hacer cada vez más grande su concepto de marca, rebasando la peligrosa frontera de los cuatro metros de longitud y arriesgándose a que eso de “mini” comience a perder todo su sentido. Pero es su estética, más que sus cualidades, lo que hace que sean coches muy demandados, sobre todo en configuración 4X2 y con motores de gasolina debido al ahorro en el precio final. Nos hemos puesto al volante del Juke 1.6i 4X2 (117 cv )y del Countryman Cooper (122 cv) para buscar todas las diferencias.
Con el Countryman, como decíamos, MINI ya ha superado en longitud la barrera psicológica de los cuatro metros, algo que no ha gustado demasiado a sus firmes defensores pero que hacía falta para crear un coche de cuatro plazas realmente cómodo. Nissan, por su parte, ha preferido dar más importancia al diseño y ha penalizado su maletero por una zaga deportiva traída directamente del 370Z (más…), que pretende dar un aire coupé al más puro estilo X6. En realidad, MINI haría la competencia perfecta al JUKE a nivel de diseño con el MINI Paceman (más…), previsto para finales de este año.
A lo largo de la carrocería del japonés se alojan formas muy exageradas como la de los enormes pasos de rueda, unos faros muy elevados y planos como los del Murano y un paragolpes delantero con tres orificios centrales que hasta ahora no habíamos visto en otros coches. El MINI, por el contrario, sigue conservando la discreción que le caracteriza y tan sólo ha añadido a su ensanchado y estirado chasis un capó algo más abultado, una parrilla más grande y prominente y unos faros más grandes. Todo lo demás en cuestiones decorativas queda en manos del cliente, que sigue contando con un amplio catálogo de colores, combinaciones y accesorios para el exterior.
No aptos para el "off-road"
Estamos ante dos versiones cuyas mecánicas no cuentan con sistemas de tracción total, y por tanto, tan sólo su cota de altura libre al suelo (14,9 centímetros en el MINI y 18 centímetros en el JUKE) les permitiría explorar terrenos de arena no muy abruptos con cierta facilidad.
En este sentido, el JUKE es el único capaz de dar una cierta percepción de todoterreno gracias a que la postura de conducción es bastante más elevada y a que la suspensión algo más cómoda se presta más a explorar fuera del asfalto. En MINI ocurre lo contrario, y aunque 13 centímetros pueden parecer mucho, la sensación que sigue dando es la de estar en un vehículo bastante “bajo” y muy firme de suspensiones.
Si a pesar de todo queremos decantarnos por un sistema de tracción 4x4 en estos modelos, no bastará con estos motores. Nissan sólo equipa la tracción integral en su motor más potente, el 1.6 Turbo de 190 cv, y pide 24.250 euros por ella. El problema es el mismo en MINI si queremos un gasolina, ya que tan sólo el Countryman Cooper S de 184 cv es capaz de llevar el sistema ”ALL4” (31.000 euros), al menos de momento.
Por encima de 7 litros
Una de las ventajas evidentes de quedarnos con la tracción delantera y menos potencia, además del dineral que nos ahorramos, es que el ordenador de a bordo comienza a manejar cifras de consumo más razonables. Aunque las fichas técnicas prometen rozar los seis litros de media (6,0 en el Countryman y 6,4 en el Juke), lo cierto es que es casi imposible bajar de los siete litros en ambos casos.
El Countryman parece en este sentido el más eficiente, ya que puede quedarse en los siete litros de consumo gracias a una sexta marcha que el Juke no tiene. Es medio litro menos de lo que necesita el de Nissan, que además está condicionado por una capacidad de recuperación y de salida desde parado algo más justa. Pero sin duda el motivo principal de esta diferencia a favor de MINI son las medidas de ahorro equivalentes a las EfficientDynamics de BMW, aquí llamadas MINIMALISM. Entre ellas se incluyen la recuperación de energía en la frenada, el sistema start&stop y el sistema de recomendación de cambio de marcha, elementos que en el Juke son de momento imposibles de equipar.
Oferta de motores
En lo que respecta a la oferta de motores, ésta es claramente más amplia en MINI, y además, está mejor escalonada. En el apartado de gasolina se ofrecen las clásicas versiones One (98 cv), Cooper (122 cv) y Cooper S (184 cv) permitiendo más libertad de elección. Mientras, Nissan pasa directamente de los 117 cv iniciales del 1.6 atmosférico hasta los 190 cv de la versión 1.6 Turbo.
Si, por el contrario, lo nuestro es el gasoil, MINI vuelve a ganar con dos versiones One D (90 cv) y Cooper D (112 cv), y otra futura SD de 143 cv (más…) con la que doblaría en motores al JUKE, que en el apartado diesel sólo cuenta con el 1.5 dCi de 110 cv.
Suficientes
Ninguno de los motores que hemos elegido nosotros puede alardear de ser deportivo. Es más, las prestaciones que ofrecen son simplemente correctas y parecen mucho más recomendables para una utilización urbana que para largos viajes por autopista.
Y es que ni la velocidad ni las recuperaciones contundentes son los fuertes de estos modelos, probablemente debido a su elevado peso. Ambos ofrecen un tiempo de aceleración parecidos (10,5 en el Countryman y 11 segundos en el Juke) e idéntico dato de par motor (escasos 160 Nm) que parecen cundir algo mejor en el caso del JUKE debido a que es 100 kilos más ligero. No obstante, en ambos modelos se pasa demasiado tiempo con el pie hundido hasta el fondo esperando una falta de respuesta que no llega hasta pasadas las 4.000 vueltas.
Datos técnicos
Marca y modelo | Mini Countryman | Nissan Juke | ||
---|---|---|---|---|
Versión | Cooper | 1.6i 4x2 Tekna Premium | ||
Especificaciones | ||||
Longitud/anchura/altura (mm) | 4097 / 1789 / 1561 | 4135 / 1765 / 1570 | ||
Distancia entre ejes (mm) | 2.595 | 2.530 | ||
Diámetro de giro (m) | ||||
Peso (kg) | 1.340 | 1.247 | ||
Volumen del maletero (l) | 350 | 250 | ||
Neumáticos de serie | 205/60 R16 | 215/55 R17 | ||
Motor | ||||
Cilindrada (cc) | 1598 (4 en línea) | 1598 (4 en línea) | ||
Potencia (cv) | 122 | 117 | ||
Par máximo (Nm/rpm) | 160 / 4250 | 158 / 4000 | ||
Tracción | Delantera | Delantera | ||
Transmisión | Manual, 6 velocidades | Manual, 5 velocidades | ||
Consumo | ||||
Combustible | Gasolina | Gasolina | ||
Urbano/Carretera/Combinado (l/100km) | 7,4 / 5,2 / 6 | 8,1 / 5,3 / 6,4 | ||
Emisiones CO2 (gr/km) | 140 | 147 | ||
Consumo durante test (l/100km) | 7,1 | 7,6 | ||
Características | ||||
Aceleración 0-100 km/h (s) | 10,5 | 11 | ||
Recuperación 80-100 km/h (s) en 4ª | 11,6 | 11,4 | ||
Capacidad depósito (l) | 47 | 46 | ||
Velocidad máxima | 190 | 178 | ||
Precio (sin extras) | ||||
Euros | 23.700 | 18.950 | ||
Equipamiento extra | ||||
Más datosMenos datos |
En el JUKE es sorprendente el cambio de carácter a partir de este régimen, pero se paga con la perdida de confort acústico en el interior. El MINI, por el contrario, se muestra más capacitado para circular a velocidades elevadas, con un régimen de vueltas inferior gracias a una sexta marcha y a un nivel de ruido más moderado. También en el paso por curva, el Countryman parece algo menos torpe de reacciones, es algo menos subvirador y la dirección se muestra más directa y precisa siempre que activemos el botón Sport en el salpicadero. En definitiva, sigue siendo un MINI con todas sus virtudes.
El japonés aporta novedades
Pero también hay pegas. Aunque el Countryman suponga aparentemente un modelo muy diferente, MINI sigue ofreciendo prácticamente lo mismo en equipamiento y de puertas hacia dentro. Los acabados son muy buenos, materiales resistentes y buenas terminaciones, pero se echa de menos algo novedoso más allá del útil y práctico Center Rail.
En este sentido, es de agradecer que Nissan no hay clonado el interior del Qashaqai y haya intentado ir un paso más allá. En concreto, han querido dar un tinte deportivo inspirado en el GT-R incluyendo un medidor de fuerza lateral en la pantalla, así como diferentes gráficos para evaluar el consumo medio de combustible realizado en una o varias etapas. Toda esta información viene agrupada en una sola pantalla en la que además se controlan los mandos del climatizador, de la información de a bordo y de los tres modos de conducción diferentes (Normal, Eco y Sport).
En cuanto al equipamiento, parece determinante que el Juke más equipado (Tekna Premium), siga resultando 5.000 euros más barato que el MINI. Incluso las llantas de 17”, el navegador de 5”, las conexiones de audio+teléfono y la tapicería de Alcántara vienen incluidas en ese precio. El Countryman Cooper empieza con el contador en 23.700 euros, pero habrá que añadir para igualarlo un ordenador de a bordo (150 euros), navegador (casi 2.000 euros), conexiones USB y bluetooth (650 euros), el botón Sport que tanto mejora su precisión en curva (130 euros), sensor de lluvia y luz (120 euros) y todos los accesorios para el Center Rail (en la foto). Aquí la cosa cambia, y mucho.
Cuatro o cinco plazas
El JUKE tiene un inconveniente que en MINI han solventado sin problemas. Sus cinco plazas son estrechas, y pensar en un viaje de cinco personas durante más de 200 km realmente no promete mucha comodidad. En MINI no es que su anchura sea mucho mayor, pero al menos han pensado en dar más comodidad a cuatro ocupantes de forma permanente y (lo mejor de todo) sin coste. El cliente puede elegir, por tanto, hacerse con un Countryman de cuatro o cinco plazas por el mismo precio, mejorando la habitabilidad y dejando espacio suficiente para instalar el Center Rail de longitud completa, un caprichoso sistema para instalar complementos como portabebidas, soportes para iPod y toda clase de gadgets que MINI ofrece como accesorios.
En el maletero la batalla también parece ganada de calle para el MINI, y es que parece que Nissan ha querido darlo todo en materia de diseño aunque ello fuera a dejar una capacidad de carga muy limitada y poca altura libre para los pasajeros en la fila trasera. Pero es así, y el Juke parte de unos escasos 250 litros de volumen mientras que MINI ha alcanzado una capacidad de 350 litros, ofreciendo como ventaja primordial algo de lo que siempre había carecido. Con este dato, por cierto, se sitúa a la altura de compactos “high-class” como el Golf (350), el Astra (370) o el BMW Serie 1 (330 litros).
Resumen
El JUKE convence por tres motivos: su precio es notablemente más bajo, permite salir con un poco más de confianza fuera del asfalto gracias a una altura libre un poco mayor y en su interior hay nuevas ideas como los botones multifunción. En MINI ya nos sonará casi todo de antes, incluido el diseño, pero por primera vez en esta marca podremos realizar trayectos largos con cuatro personas a bordo y un maletero realmente amplio. El problema será el de siempre… ¿merece la pena pagar 5.000 euros más sólo por eso?.