Estos dos modelos irradian deportividad... aunque sus motores diesel se empeñen en 'murmurar' lo contrario.
Una combinación delicada
Un auténtico deportivo, si quiere ser considerado como tal, debe utilizar gasolina", le apostillo convencido a Roberto, nuestro lector de este mes, mientras nos preparamos para salir a probar las versiones diesel de dos de los coupés compactos más populares: el Audi TT y el Peugeot RCZ.
"Ya, pero, ¿por qué privar de coches como estos a conductores que, por el kilometraje que realizan, necesitan elegir un motor de gásoleo? Máxime cuando se trata de consagradas mecánicas como la 2.0 TDI de Audi y la 2.0 HDI de Peugeot", argumenta Roberto. "No te falta razón, pero observa lo que pasa si arranco el motor del Audi delante de aquellos chicos que están contemplando fascinados el coche mientras charlan sobre él", le digo.
Lo que sucede a continuación, te lo puedes imaginar: giro la llave de contacto del TT y, de repente, un traqueteo diésel entra en escena. Aquellos chicos ponen una cara de entre asombro y decepción cuando lo que parecía ser un TT RS, resulta que es diésel. "Vale, hay que tener en cuenta que esta unidad lleva el paquete S-Line Competition –4.985€–, que le hace estéticamente mucho más agresivo, pero entiendo a lo que te referías", comenta Roberto.
Los coches
Audi TT 2.0 TDI Quattro Aut.:Cuesta 44.200€, a la venta desde 2008. Tiene 170 CV a 4.200 rpm y un par máximo de 350 Nm entre 1.750 y 2.500 rpm. Alcanza 224 km/h, pasa de 0 a 100 km/h en 7,4 segundos y consume 5,5 litros/100 km. De serie: ABS, ESP, 4 airbags, radio CD Mp3 con conexión aux., clima., llantas de 16"... Opciones: Pint. met. –795e–, tapicería de cuero –desde 770€–, faros bixenón –1.065e–, naveg. –desde 1.280€–, USB –300€–, asientos baquet –4.715€–...
Peugeot RCZ 2.0 HDI: Cuesta 31.000€, a la venta desde 2010. Tiene 163 CV a 3.750 rpm y un par máximo de 340 Nm entre 2.000 y 3.000 rpm. Alcanza 220 km/h, pasa de 0 a 100 km/h en 8,2 segundos y consume 5,3 litros/100 km. De serie: ABS, ESP, 4 airbags, radio CD Mp3 con conex. aux. y USB, clima., llantas de 18", sensor tras. de aparc... Opciones: Pint. met. –550€–, tapicería de cuero –desde 750€–, naveg. –desde 970€–, faros bixenón –950€–, techo de carbono –1.550€–, llantas 19" –650€–...
Y, por si fuera poco, el precio de estos dos coches echa 'más leña al fuego', pues el del RCZ diésel es 2.950€ superior al de su equivalente de gasolina, mientras que el TT diésel cuesta nada menos que 7.910€ más que su 'semejante' de gasolina –si bien es cierto que sólo el primero lleva tracción total–, razón por la cuál apenas un 11% de las ventas del TT corresponden a la versión TDI".
Volviendo al tema de la estética, para Roberto, "aunque el RCZ tiene una línea escultural, me convence más la del TT, sobre todo porque el mencionado paquete S-Line le queda espectacular. En cambio, de puertas adentro prefiero el Peugeot: puede que por calidad esté un poco por detrás del Audi, pero su postura de conducción es mejor, su visibilidad también lo es, y resulta un poco más amplio –aunque, en ambos casos, las plazas traseras son prácticamente testimoniales debido a su escasa altura–".
Una vez en marcha, lo importante y lo que hay que dilucidar es en qué medida el propulsor diesel puede afectar al carácter deportivo que estos dos coches deberían ofrecer. "Ambos modelos llevan motores de similar potencia –170 CV en el TT y 163 CV en el RCZ–, pero me convence más la respuesta del propulsor francés ya que, aunque a bajas revoluciones no destaca tanto como el del Audi, a partir de las 2.500 rpm se muestra más enérgico. Además, el tacto de su cambio manual es firme y de recorridos cortos, lo cual ayuda a que puedas manejarlo rápido. Por su parte, esta unidad del Audi TT lleva cambio automático S-Tronic de seis marchas que, si bien resulta bastante correcto, en conducción deportiva no es ni tan eficaz como nos gustaría, ni se muestra especialmente 'inteligente'", menciona Roberto.
"En cuanto al comportamiento, el RCZ me ha parecido más ágil, manejable y divertido a la hora de enlazar curvas cerradas, y eso que la dirección del TT es mejor por precisión y tacto.
Pero con esas enormes llantas de 19", los neumáticos de 255 mm de ancho y la amortiguación deportiva opcional de esta unidad, el Audi se muestra menos equilibrado y más nervioso, con tantos botecitos y una comodidad muy perjudicada. Al menos, la tracción total con embrague Haldex –de serie; el RCZ es tracción delantera– ayuda a 'redondear' los giros cuando las ruedas delanteras llegan a su límite de adherencia y traspasa par al tren posterior, lo cual le permite pasar muy rápido por las curvas y salir de ellas con mucha velocidad", comenta nuestro probador.
El veredicto de Roberto García
- Edad: 27 años
- Vive en: Alcorcón –Madrid–
- Profesión: Arquitecto técnico
- Años de carnet: 8
- Coche actual: Peugeot 306
- Su sueño: Porsche Cayman
"En este duelo, lo cierto es que el Peugeot RCZ partía con una clara desventaja, puesto que se enfrentaba a todo un Audi TT equipado con un kit deportivo de carrocería que consigue que todos los ojos se dirijan a él. No obstante, el 'discreto' Peugeot me ha convencido más por comportamiento y tacto de conducción. Además, su consumo es inferior –gasta unos 6 l/100 km por los 6,8 l/100 km del TT–, viene más equipado y cuesta 13.200€ menos que el Audi –10.730€ si lo comparamos con un TT 2.0 TDI con cambio manual–".