No lo hemos negado nunca y, por el momento, no tenemos motivos para hacerlo: nos gustan las versiones “S” de Audi. Nos parecen coche muy deportivos, pero equilibrados en cuanto a las prestaciones y el confort. El Audi S3 Sedán es un claro ejemplo de ello por tener un buen aislamiento, no ser incómodo, pero sí ser eficaz en el paso por curva, tener alta potencia y proporcionarte sensaciones de conducción de pura cepa.
Entre los coches compactos, el Audi S3 Sedán compite por tamaño con coches como el BMW Serie 2 o el Mercedes Clase A Sedán o, incluso, el Mercedes CLA en sus versiones deportivas. Aunque, si no te interesa la tradicional carrocería berlina, tienes opciones en el VW Golf R o el Cupra Formentor VZ5.
Este coche reemplaza a la anterior generación del S3 y lo hace con 10 CV más de potencia, ahora entrega 310 CV y mantiene la tracción a las cuatro ruedas. Pero, estéticamente, es un coche nuevo.
Está disponible en versión sedán, que es la que estamos probando, o en versión Sportback, que tiene 5 puertas. Además del aspecto de la carrocería, la del Audi S3 Sedan es más larga que la del S3 Sportback (4,5 m por los 4,34) y su maletero también es mayor (370 l frente a 325). Aunque es menor práctico por el peor acceso a este. Sí pueden, ambos, abatir los respaldos.
En el vídeo que aparece a continuación, te contamos muchas cosas del coche y esperamos servirte de ayuda a la hora de conocerlo un poco mejor.
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Cómo cambia el chasis del Audi S3 Sedán
Este coche está basado en el Audi A3 de tres volúmenes que está disponible con motores gasolina y diésel de menor potencia, pero ha recibido modificaciones para adaptarlo a la nueva potencia del motor. Así, el Audi S3, independientemente de su carrocería, tiene los muelles de la suspensión más cortos que los del resto de versiones, por lo que la carrocería queda a 1,5 cm más cerca del suelo. Tiene suspensión independiente en ambos trenes de rodaje; la trasera, multibrazo.
Por unos 1.000 € puedes pedirlo con amortiguadores de dureza variable de manera electrónica. Estos funcionan automáticamente, midiendo las irregularidades de la carretera y adaptándose ellos solos a ella. O, como conductores, podemos elegir cuatro niveles de dureza que están programados y que elegimos con un menú en la pantalla multimedia del salpicadero o, directamente, asociados al modo de conducción.
Los frenos también cambian y son más potentes que los del resto de la gama y tienen pinzas flotantes de 4 pistones. De serie, son negras; pero, en opción, puedes pedirlas en rojo. Solo cambia el color, no la frenada. La gama cuenta con freno de mano eléctrico, que actúa sobre las 4 ruedas y podemos usarlo como emergencia en plena marcha, y que sirve para integrar los cada vez mayores sistemas de asistencia a la conducción.
Por daros el dato, las llantas de serie son de 18”, pero las opcionales son de 19”.
Cómo es el nuevo motor del Audi S3
Audi ha tomado como base, una vez más, el motor de gasolina TFSI de 2 litros y 4 cilindros para el Audi S3, tanto Sedán como Sportback. Con doble árbol de levas en cabeza, cuatro válvulas por cilindro turbo e Intercooler y combinación de inyección directa e indirecta, también cuenta con distribución variable en admisión -llamado Valvelift por Audi-. Entrega 310 CV entre 5.500 y 6.500 rpm, lo que te proporciona un buen margen de aprovechamiento máximo del motor. Además, el par máximo son 400 Nm entre 2.000 y 5.400 rpm, lo que habla muy bien del empuje y la respuesta desde bajo régimen de giro de este motor de carrera larga.
Está colocado en posición delantera transversal y, aunque nos gustaría decirte que está fabricado completamente en aluminio, lo cierto es que el bloque es de fundición y solo la culata es de aluminio.
Se une con una caja de cambios automática de embrague doble y 7 marchas y no está asistido por ningún tipo de hibridación por lo que consigue la etiqueta “C” de la DGT.
Qué tiene de diferente la estética del Audi S3
Una de las características de los “S” de Audi es su discreción. Si te fijas, notarás que hay señales que delatan su deportividad, pero para un profano podría llegar a pasar desapercibido. No obstante, el Audi S3 tiene como seña de identidad más notable, la cuádruple salida de escape. Están acabadas en negro, para integrarse menos llamativamente en el difusor aerodinámico que monta. Esta elemento, complementa la acción de los bajos casi totalmente carenados.
Otro detalle que le “delata” son las carcasas de los retrovisores en color plateado. Como hemos indicado, las llantas de serie son de 18”, pero puedes pedir una gran opción de modelos de 19”.
En el interior, te gustarán los asientos deportivos específicos y con su tapicería fabricada, profusamente, con material procedente del reciclaje de botellas de plástico “PET”.
Como es el sistema multimedia del Audi S3
El cuadro de relojes es digital de serie de 10,25”, pero puedes ponerle otro más grande, de 12,5”. Tiene diferentes modos de visión que podemos configurar con un botón en el volante o con la pantalla multimedia. Además, puedes programar la información que quieres que aparezca en él con distintos menús como consumo medio o temperatura.
La pantalla multimedia del salpicadero sirve para manejar muchas funciones del coche y programar, por ejemplo, el modo de conducción “Individual”. Puedes conectar el móvil y tiene conexión a Internet y nos informa, por ejemplo, de la climatología. Mide 10,1” y solo se puede manejar con el dedo, no hay mando satélite, pero sí reconoce letras escritas con los dedos.
No te sorprenderás si te decimos que, como en otros Audi y coches, puedes darle órdenes vocales que, dicho sea de paso, tampoco te sorprenderás si te indicamos que no funciona del todo bien, ni siquiera siguiendo claramente las indicaciones de uso.
Como en otros Audi A3, el S3 puede estar equipado con faros matriciales de ledes, información proyectada en el parabrisas (Head-up display) o puedes de configurar el teléfono para que funcione como llave.
Qué prestaciones consigue el Audi S3
Aparte de la finura de comportamiento y entrega de potencia, el Audi S3 Sedán es un coche rápido. Consigue alcanzar los 100 km/h desde parado en menos de 5 segundos, 4,8 para ser exactos, y tiene la velocidad máxima autolimitada a 250 km/h. Por otra parte, homologa unos consumos más propios de coches menos potentes, con 7,8 l/100 km en ciclo combinado. Aunque, en el día a día y yendo a velocidad moderada, no será raro que consuma unos 9 litros a los 100 kilómetros. Es difícil de decir porque dependerá de tu conducción.
