Si el año empezó fuerte para Toyota con el lanzamiento de los nuevos RAV4, Corolla, y Supra este final de 2019 no se queda, ni mucho menos, atrás. El fabricante japonés acaba de desvelar la cuarta generación de uno de sus modelos más representativos, el Yaris, aunque las primeras unidades no se empezarán a ver por las carreteras hasta la primavera de 2020.
Una pena, porque a tenor de lo que se comprueba en las imágenes, este Yaris tiene una pinta espectacular. Su diseño evoluciona dotándole de un carácter más deportivo (a destacar una zaga cuya moldura superior en negro recuerda mucho a la del T-Cross), mientras que sus cotas se mantienen prácticamente inalteradas. Su longitud es la misma, 3,94 metros, aunque no así su anchura, que crece en 5 cm, hasta los 1,75 metros, ni su altura, que pierde 4 cm, 1,47 metros.
Cotas que, según la firma no redundan en un habitáculo más pequeño, pues gracias al empleo de la nueva plataforma TNGA-B, este Yaris crece 5 cm ofrece una distancia entre ejes 5 cm superior, 2,55 metros. El puesto de conducción se moderniza gracias al volante de nueva factura y a la pantalla central de tipo flotante.
Cambio de batería
Pero más allá del llamativo diseño, este Yaris destaca por lo que no se ve. Ya hemos mencionado que se sostiene sobre la nueva plataforma modular TNGA, lo que le ha permitido hacer uso de la última evolución de la tecnología híbrida de la marca. Cierto es que durante el próximo año llegarán versiones de combustión, pero la primera en aterrizar será la híbrida.
Motorización que combina el nuevo bloque de gasolina de tres cilindros y ciclo Atkinson 1.5 Dynamic Force con una eficiencia térmica elevadísima y con un nivel de potencia que aún no se ha desvelado dado que aún está en fase de homologación. Se combinará con el también inédito motor eléctrico integrad en la transmisión CVT, capaz de impulsar al vehículo de manera independiente. Ahora bien, la gran novedad reside en el montaje, por fin, de una nueva batería de ion-litio, más potente pero también un 27% más ligera que la actual de níquel metal hidruro.
Como guinda, el nuevo Toyota Yaris sobresaldrá por sus altas cotas de seguridad activa y pasiva, gracias al Toyota Safety Sense, el conjunto de sistemas de seguridad y ayuda a la conducción de Toyota. Así, incluye avanzados sistemas de asistencia al conductor como el Control de Crucero Adaptativo Inteligente, que funciona a cualquier velocidad, y el Sistema de Mantenimiento de Trayectoria, que se equipan en los últimos modelos de Toyota.