Para SEAT, los modelos del segmento B son esenciales. Ibiza y Arona se han convertido en las puntas de lanza de esta estrategia comercial, protagonistas que ahora se renuevan ligeramente en su ecuador de vida comercial para mantener esos retos y recuperar su posicionamiento. Los dos comparten un nuevo interior y una gama mecánica optimizada.
En el habitáculo destaca la mejora en la conectividad con una pantalla central táctil de tipo flotante que pasa a ser de 8,25 pulgadas y que puede ampliarse hasta las 9,2 pulgadas. Integra un nuevo asistente vocal que responde al comando de “Hola, Hola”, así como función inalámbrica para Apple CarPlay y Android Auto. El cuadro digital puede seguir pidiéndose 100% digital con un monitor de 10,25 pulgadas y las funciones de la aplicación móvil se han ampliado.
La calidad percibida también ha aumentado al emplear materiales más mullidos en la zona alta del salpicadero, al tiempo que el volante puede estar forrado en cuero Nappa. Estrena igualmente un tapizado de mayor calidad, molduras decorativas y aireadores, pudiendo estar además retroiluminados. En cuanto a la habitabilidad, ambos hacen gala de un maletero amplísimo, de 355 litros en el Ibiza 2021 y 400 litros en el Arona 2021. Capacidad que se ve reducida hasta los 262 y 282 litros respectivamente en las versiones TGI.
Sin diésel, pero con TGI
Porque el motor de gas natural comprimido de 90 CV y 160 Nm sigue siendo la única opción ‘eco’ de la gama. Sin rastro alguno de la micro-hibridación, es el único con sello ECO de la DGT en el parabrisas. Se combina con una caja manual de seis relaciones y homologa una autonomía conjunta de casi 500 kilómetros.
El resto, los conocidos bloques de gasolina 1.0 TSI de 95 y 110 CV así como el 1.5 EcoTSI de 150 CV con sistema de desconexión de cilindros. En el Ibiza 2021 se suma además un 1.0 MPI aspirado con 80 CV asociado a la transmisión manual de cinco marchas. El cambio DSG está disponible opcionalmente en el de 110 CV y de serie en el tope de gama.
Más seguros que nunca
Los nuevos sistemas de asistencia al conductor, como el asistente de viaje, ofrecen una conducción semiautónoma a cualquier velocidad mediante la combinación del control de crucero adaptativo (ACC) y el asistente de salida involuntaria de carril. Con el asistente lateral o de ángulo muerto, el reconocimiento de señales de tráfico y el asistente de luces de carretera, el SEAT Arona se sitúa en lo más alto en cuanto a seguridad. Sin olvidar el asistente de aparcamiento, que realiza las maniobras de forma automática y sin esfuerzo.
Estética más atrevida
Entrando en el apartado estético, ambos estrenan nueva iluminación Eco-LED de serie en todos sus acabados pudiendo mejorar a Full LED en opción. Nuevas también son los dos juegos de llantas de aleación de 17 pulgadas y la de 18, así como colores de carrocería Azul Zafiro y Azul Asfalto. El logo estrena diseño cromado, los grupos ópticos traseros tienen tecnología LED y el nombre del modelo ahora se coloca en el centro del portón y tiene tipografía manuscrita.
Hasta ahí los puntos en común, pues el Arona estrena un inédito acabado bautizado como Xperience que se encarga de aumentar la robustez y la apariencia off road del conjunto. A destacar el tramado cromado de la parrilla, el splitter en color plateado o el alerón posterior. Este acabado sustituye al Xcellence presente en el Ibiza 2021 y se une a los existentes Reference, Style y FR. Además, el B-SUV puede escogerse con otro tono de carrocería más, el Dark Camuflaje así como con tres tonos para la carrocería: Negro Midnight, Magnetic Tech y el nuevo Blanco Candy.