El RUF CTR "Yellowbird", un icono del mundo del automóvil de finales de los años 80, ha vuelto a ser noticia tras la reciente subasta de una de sus escasas unidades por más de 5,6 millones de euros, superando en 41 veces su valor original.
En la subasta organizada por Gooding & Company en Amelia Island (Estados Unidos), una unidad del RUF CTR de 1989, con solo 1.673 kilómetros recorridos, alcanzó un precio récord de 6,1 millones de dólares (algo más de 5,6 millones de euros). Este ejemplar, el número 26 de las 29 unidades fabricadas, se encontraba en un estado de conservación excepcional, lo que contribuyó a su elevado precio de venta.
Apenas se fabricaron 29 unidades del RUF CTR original
El RUF CTR, apodado "Yellowbird" por su distintivo color amarillo, debutó en 1987 y se basó en el Porsche 911 Carrera 3.2. Alois Ruf, fundador de RUF Automobile, realizó modificaciones significativas para optimizar el rendimiento del vehículo. Estas incluyeron la sustitución de paneles de carrocería por piezas de aluminio, reduciendo el peso total en 200 kg. Además, se ampliaron ligeramente los arcos de las ruedas traseras para acomodar llantas Speedline más grandes
El corazón del "Yellowbird" era un motor bóxer de seis cilindros y 3.4 litros con doble turbocompresor, que entregaba 469 CV y 553 Nm de par. Esta potencia, combinada con un peso de 1.150 kg, permitía al CTR acelerar de 0 a 100 km/h en 3,65 segundos y alcanzar una velocidad máxima superior a 340 km/h, posicionándolo como el coche de producción más rápido de su época.
El RUF CTR ganó notoriedad mundial tras participar en el evento "World's Fastest Cars" organizado por la revista Road & Track en 1987, donde alcanzó una velocidad máxima de 340 km/h, superando a competidores como el Porsche 959 y el Ferrari F40. Este logro consolidó su estatus como uno de los superdeportivos más destacados de la década.
La reciente venta de esta unidad del "Yellowbird" no solo destaca por el precio alcanzado, sino también por reflejar el creciente interés y aumento de valor de vehículos clásicos de altas prestaciones. Este récord establece un nuevo estándar en el mercado de subastas para modelos RUF y resalta la importancia histórica y técnica del CTR en la evolución de los superdeportivos.