Repasamos los 10 artilugios que nos hacen la vida a bordo más confortable y que nos salvan la vida en caso de accidente... o ayudan a prevenirlo. Si Karl Benz, desde que patentara el primer automóvil movido por un motor de explosión en 1896, levantara la cabeza... 1931: primer sistema de suspensión independiente. Hasta el momento, los ejes estaban fijos y soldados, por lo que no permitían las oscilaciones. El último Clase S de Mercedes, de 2012, aterrizó con un revolucionario mecanismo que, a través de una cámara, lee las imperfecciones de la carretera para adaptar la amortiguación y que los ocupantes no sientan nada.
1959: De la mente del ingeniero Nils Bohlin surgió la idea de unas tiras que sujetasen el cuerpo en caso de una frenada brusca o de un vuelco, a imagen de las que ya se empleaban en la aviación. Nacía así el cinturón de seguridad de tres puntos tal y como lo conocemos, frente al de los anclajes que usó Ford desde 1956. Bohlin trabajaba en Volvo. En las plazas traseras se empezó a usar a partir de 1967 y en la central en 1986.
1965: Bosch inventa el antibloqueo de frenos, el ABS, si bien hasta cinco años más tarde no lo lleva a la práctica con éxito. En 1974, BMW lo comercializa y en 1978 es el Mercedes Clase S el que lo monta en opción, si bien es el Ford Scorpio el primer modelo en llevarlo de serie. Siete años más tarde de esto, todos los Mercedes vienen con ABS de serie. En 2003, 33 años después del hito de la marca de componentes, la Unión Europea establece que todos los vehículos nuevos deben llevarlo obligatoriamente.
1968: El reposacabezas. Hasta la fecha, los asientos carecían de estas útiles almohadillas que protegen la cabeza y el cuello de los ‘latigazos cervicales’. En 1996, Saab mostró un mecanismo que hacía que el reposacabezas se moviese solidariamente con la cabeza en caso de colisión. En 1998, Volvo lo evolucionó y lo instaló en el S80. La práctica totalidad de berlinas premium tiene esta dotación.
1991: El BMW Serie 7, la gran berlina de la marca de Múnich, es el primer modelo en equipar los faros de xenón, creados ex profeso por Osram.
1993: Nace el ESP, el control de estabilidad electrónico, un instrumento de vital importancia para evitar que, en situaciones de pérdida de control, el coche termine fuera del asfalto. Las autoridades se dieron cuenta de su importancia que han obligado a los fabricantes a montarlo de serie en todos los vehículos del mercado.
1996: No hay que olvidar que los primeros crash test datan de 1951 si bien no es hasta esta fecha cuando surge EuroNCAP, un organismo independiente y cuyas valoraciones en forma de estrella son muy codiciadas. ¿Te acuerdas de la publicidad de Renault y su Mégane anunciando que había logrado las cinco estrellas?
1996: El neumático antipinchazo (Pax System) de Michelin, un avance importantísimo para seguir la marcha sin necesidad de tener que cambiar una rueda. La práctica totalidad de fabricantes de ‘gomas’ tiene en su catálogo algún modelo que, en caso de pinchazo, sigue sirviendo, eso sí, hasta unos 100 kilómetros de distancia y a una velocidad máxima de 80 por hora (son los conocidos Runflat).
2002: capó activo de Ford. Se trata de un sistema pirotécnico que, en caso de atropello a un peatón, se eleva para ‘recoger’ el cuerpo del viandante y acomodarlo para reducir las lesiones. Volvo y Lexus, entre otros, perfeccionaron el dispositivo y añadieron un airbag, que minimiza aún más rotunas de fémur y de cadera.
2014: El airbag de techo más grande del mundo tiene el sello de Ford. Mide cinco metros de largo por un metro de alto y en su interior caben hasta 120 litros de aire. Se instalará en la furgoneta Transit que se vende en EE.UU. y Canadá, para proteger a todos los ocupantes que viajen en el interior. Según la marca, está realizado en poliester y en su concepción ha trabajado TRW Automotive, una compañía especializada en seguridad vial.