Sin lugar a dudas, uno de los modelos más grabados en las retinas de los fans de Renault es el mítico R-5 Turbo "culogordo", el espectacular deportivo de motor central trasero con el que la marca del rombo arrasó en las competiciones de la época.
En el año en el que el mítico Renault 5 celebra su 50 cumpleaños, la marca francesa no para de deleitar a la afición con concept cars inspirados por las formas del simpático utilitario. Al coqueto Renault 5 Diamant Concept se le suma ahora este R-5 Turbo 3E que se posiciona en el extremo opuesto: nada de frivolidades, esto es un especialista para drift.
Renault 5 Turbo 3E: "culogordo" eléctrico
Bajo una carrocería que no puede negar estar inspirada por el mítico R-5 Turbo 2 (apodado "culogordo por lo evidente) se esconde un chasis tubular con suelo plano en el que se monta un motor eléctrico de 380 CV en el eje trasero. Alimentado por una batería de 42 kWh, este bólido es capaz de acelerar de 0-100 km/h en apenas 3,5 segundos y está diseñado para convertirse en una especie de peonza si elegimos el modo Drfit.
El Renault 5 Turbo 3E está diseñado para deleitar a la afición, tanto a los nostálgicos como a los fans del drift, una disciplina del automovilismo que cada vez tiene más adeptos.
Con 4,006 m de largo, más de 2 metros de ancho y apenas 1,32 m de alto, las proporciones del Renault 5 Turbo 3E reinterpretan muy bien las formas del clásico, pero con detalles que dejan claro que se trata de un modelo del futuro, como los faros pixel led delanteros, las llantas o los grupos ópticos traseros.
Renault 5 Turbo 3E: un concept que enamora
En el interior también encontramos esos contrastes entre el estilo retro (como el volante de 2 radios o las formas rectas del salpicadero) con la última tecnología (en los mandos digitales).
Los asientos baquet Carbon Fiber Racing Seat, el arnés de seguridad y el volante están firmados por el especialista Sabelt. El impresionante mando del freno de mano vertical – característico de los coches de drift - está situado en el centro de la consola central en un color amarillo muy « pop ».
El Renault 5 Turbo 2 contaba con diez relojes circulares que mostraban distintas informaciones sobre el coche. Por su lado, R5 TURBO 3E hereda esta característica con diez pantallas digitales que funcionan como widgets.
En ellos se muestran gráficos inspirados en el Pixel Art (una forma de arte digital que utiliza una baja resolución y un número limitado de colores) y en el Glitch Art (estética de errores analógicos o digitales) con funciones inspiradas en los videojuegos retro. Por ejemplo, para poner en marcha el vehículo, hay que pulsar el botón « free play » de la consola central. En la misma línea, los diferentes modos de conducción se denominan « turbo » para hacer drift, « track invader » para el disfrute, « donut » para hacer derrapadas de 360°, etc.
Un último guiño de R5 TURBO 3E es la presencia a bordo de un oso de peluche llamado « Drifty ». Su misión es relajar y reconfortar a los pasajeros que se ven atrapados por la potencia del show-car.