El Land Rover Freeander, bajo su nomenclatura actual, tiene los días contados. Land Rover está trabajando en el desarrollo de su sustituto que será algo mayor y se incorporará –al menos, nominalmente– a la familia Discovery. El futuro Discovery Sport estará basado en la plataforma del Range Rover Evoque, aunque será algo más largo que este, y, en principio, compartirá su planta motriz. Es decir, montará motores de cuatro cilindros, tanto en diésel como en gasolina, habrá versiones de tracción delantera y total y equipará la caja de cambios automática de nueve velocidades. Más adelante incorporará nuevas mecánicas de origen Jaguar que saldrán de la fábrica de motores de Wolverhampton, después de que la matriz Tata hay inyectado 800 millones de euros en el desarrollo y mejora de dichas instalaciones.
Aunque la mula que podemos ver en las imágenes es, básicamente, un Evoque, parece confirmado que el nuevo Discovery Sport exhibirá una línea menos cuadrada que la del actual Freelander 2. El parabrisas será más tendido y el portón trasero presentará una caída más atenuada. Asimismo las ópticas, tanto frontales, como traseras, incorporarán el diseño que inauguró el Range Rover Evoque y que se ha ido incorporando a todos los modelos de la firma que se han ido renovando desde entonces.
El nuevo SUV de la marca de Solihull se fabricará en carrocería de cinco puertas y tendrá mejor habitabilidad que el actual Freelander 2, pero en un primer momento mantendrá la capacidad para cinco pasajeros. Más adelante se incluirá una versión –que podría denominarse "Grand Discovery Sport"– que tendría capacidad para siete ocupantes.
La llegada al mercado de las primeras unidades del Discovery Sport está prevista para 2015, mientras que las versiones de siete plazas lo harían en 2016 o 2017, y su precio podría situarse entre 30.000 de un tracción delantera en versión de acceso y los 48.000 euros de las variantes más completas; aproximadamente 3.000 euros más caro que una versión más o menos equivalente de la actual gama Freelander.
En paralelo al del Discovery Sport sigue el desarrollo del SUV que Jaguar pretende poner a la venta en breve, por lo que parece muy factible que ambos modelos compartan plataforma, mecánicas y transmisión.