En Abril de este año llegará una nueva generación al mercado, y nosotros ya hemos podido conducirla. Te contamos de qué es capaz... 2015 ha sido un año difícil para Volkswagen, de eso no hay ninguna duda. Sin embargo, desde lo más alto del grupo se muestran optimistas, y más teniendo a su disposición productos como éste. El objetivo del nuevo Tiguan no es otro que seguir la estela marcada por su predecesor y conservar esa cuota de mercado con un poco más de dinamismo y algún que otro cambio a nivel de diseño. Con más anchura y longitud, el nuevo modelo cuenta con más aplomo y con detalles de personalidad como las nervaduras de los laterales o del capó así como un frontal afilado que nada tiene que ver con su predecesor. (Ver todas las ofertas de VW Tiguan en AutoScout24).
EL hecho de haber ganado en la cota de anchura y longitud beneficia directamente a los pasajeros de las plazas traseras, donde ahora disponen de tres centímetros más para las piernas. Un punto débil del anterior Tiguan era también el maletero, el cual ofrecía poco espacio y su borde de carga era demasiado elevado. Ahora, este borde está cuatro centímetros más cerca del suelo y el volumen de carga ha crecido hasta los 615 litros, llegando hasta los 1.655 en el caso de abatir los asientos posteriores. Esto supone un incremento de 145 litros.
Ordenado e intuitivo
Dentro del Tiguan todo se ve muy ordenado y el manejo general de la instrumentación y de la consola es muy intuitivo. Hay además sensación de calidad en los materiales utilizados y la impresión que ofrece es de durabilidad. Los controles están orientados hacia el conductor y, por primera vez en este modelo, se ofrece un mando giratorio para seleccionar los modos de gestión de la tracción total (Nieve, Asfalto, Offroad o Offroad Individual). Como toque final, el nuevo Tiguan ofrece de forma opcional un Head-Up Display que proyecta la información de a bordo y diferentes avisos de conducción sobre una lámina de plástico situada en el salpicadero justo antes del parabrisas. Quien haya disfrutado de un Head-Up display proyectado directamente sobre el parabrisas sabrá distinguir la calidad de uno y otro, aunque ésta solución permite disfrutar de este equipamiento a un precio razonable (unos 600 euros). Volkswagen ya ha realizado sus estudios de mercado y sabe bien que esta decisión hará que las solicitudes de este equipamiento crezcan como la espuma.
En cuanto a motorizaciones, hay dos motores disponibles desde el inicio de la comercialización del Tiguan, uno de gasolina 2.0 TSI con 180 cv (42.200 euros) y otro diésel 2.0 TDI con 150 cv que supone el acceso a la gama con un precio a partir de 29.560 euros. La versión de acceso incluye cambio manual y tracción delantera, por lo que habría que sumar otros 9.000 euros si queremos disfrutar del DSG de siete marchas y la tracción en los dos ejes.
Más adelante llegarán a la gama nuevos motores, dos de gasolina (1.4 TSI DE 125 cv y otro 1.4 TSI de 150 cv) así como otros tres diésel (1.6 TDI 115, 2.0 TDI de 190 cv y un tercer 2.0 biturbo de 240 cv). También habrá una variante híbrida enchufable llamada GTE.
No hay quien lo pare
Durante nuestra toma de contacto, realizada en las gélidas carreteras y caminos de Suecia, el sistema de tracción Active Control 4Motion se comportó de un modo asombroso, especialmente en el modo Nieve. Con este modo seleccionado la entrega de potencia es más plana para evitar acelerones o picos de demanda de par exagerados que puedan hacer patinar alguna de las ruedas. El control de tracción también se ha mejorado, y si el sistema detecta que algún neumático gira más rápido que otro, la potencia entregada por el motor se reduce en milésimas de segundo.
Con esta confianza la organización de Volkswagen nos metió en una carretera idílica cubierta de nieve y hielo, donde además de la tracción comprobamos como la dirección es capaz de mover con soltura y con mucha precisión las 1,9 toneladas de peso del Tiguan. A medida que iba desapareciendo el hielo y la nieve, el ritmo aumentaba y nuestras ganas de enlazar curvas ponían en evidencia que 1,9 toneladas son muchos kilos de peso. Al final, la física nos puso en nuestro sitio y el Tiguan empezó a pedir ayuda. Gracias al ESP, cualquier error de cálculo o exceso de euforia era rápidamente corregido.
A pesar de que aún nos queda probar el nuevo Tiguan en condiciones más favorables (es decir, en un clima totalmente seco), las primeras impresiones en frío, nieve y con hielo son muy positivas. Con el motor de gasolina de 180 cv la aceleración se puede completar en 7,7 segundos, mientras que el consumo homologado es de 7,4 litros. El diésel, por su parte, es bastante más lento (9,3 segundos hasta llegar a los 100 km/h) pero a cambio muestra un consumo de combustible excelente, tan solo 4,8 litros (siempre que sea con tracción delantera y con cambio manual). El 4Motion con cambio DSG necesitará al menos un litro más por cada cien kilómetros recorridos.
Conclusión
Volkswagen ha metido mano al Tiguan y ha conseguido mejorarlo considerablemente. Ahora parece más dinámico con sus nuevas cotas y también es más auténtico gracias a sus nuevas señas de identidad (un morro afilado y nervaduras muy pronunciadas en los laterales). También ha mejorado a nivel dinámico con nuevos modos de conducción y con equipamientos que refuerzan su competitividad en uno de los segmentos más reñidos del mercado.