Su nuevo nombre, Sportsvan, tratará de justificar con una nueva estrategia de marketing su elevado precio, algo que siempre ha caracterizado a este modelo de Volkswagen. Volkswagen ha rebautizado este coche con el término Sportsvan para expandir más las posibilidades de su clientela y conquistar ahora a un público más joven cuya prioridad sea la del espacio de carga. Así, con un diseño de líneas más frescas, el cambio de nombre y su actualización tecnológica pretende impulsar sus cifras de ventas en Europa.
Por otro lado, parece casi un milagro que en los tiempos que corren Volkswagen no haya comercializado ninguna versión SUV del Golf, aunque probablemente el año que viene haya alguna novedad a este respecto. En cualquier caso, parece que la prioridad de los alemanes es la de responder ante la demanda de espacio en el maletero por parte de las familias con dos variantes: el Variant y el Sportsvan.
Compacto pero espacioso
El VW Sportsvan sigue siendo tan compacto como su predecesor. La cota de altura se ha mantenido inalterada - 1,58 metros - pero ahora es 13 centímetros más largo hasta llegar a los 4,34 metros. También en anchura ha ganado unos centímetros - ahora mide 1,81 metros -, lo cual ha dejado una apariencia algo más sólida y deportiva con más capacidad si cabe: 500 litros de volumen ampliables hasta 1.520 litros. Todo esto además teniendo en cuenta que el Sportsvan pesa unos 90 kilogramos menos que el Golf Plus.
Las ventajas que ofrecía el Golf Plus han sido rescatadas una a una: el generoso espacio interior para la cabeza y las piernas en todas las plazas, la posición elevada del asiento, la facilidad para acceder y para instalar sillitas infantiles, etc. El Sportsvan además es muy manejable y fácil de aparcar, ya que puedes meterlo en plazas de aparcamiento estrechas con la sensación de saber siempre lo que está sucediendo alrededor del coche. En cualquier caso, de forma opcional se puede contar incluso con una cámara de visión trasera que nos de seguridad a la hora de realizar maniobras.
Flexibilidad en el habitáculo
Gracias a una división asimétrica de la fila trasera y a que la banqueta posterior puede desplazarse longitudinalmente hasta 18 centímetros, la flexibilidad que ofrece el Sportsvan es superior a la del Plus (en éste sólo podía moverse 16 centímetros hacia atrás o hacia adelante). Ahora los pasajeros de más altura pueden viajar mejor en la parte trasera y además pueden disfrutar de diferentes inclinaciones del respaldo para mayor comodidad.
Motores turbo con inyección directa
La propulsión de toda la gama corre a cuenta de motores de inyección directa. Hay cuatro versiones de gasolina con cilindradas de 1,2 o 1,4 litros que cubren un rango de potencia que va desde los 85 hasta los 150 CV, con especial interés en los motores de 110 y 125 CV. En el apartado diesel encontramos el TDI de 1,6 litros con potencias de 110 o 150 CV. Todos los propulsores cumplen con la norma Euro 6 y están equipadas con tecnología Start / Stop. Salvo en dos excepciones (el 1,2 TSI/86 cv y 1.6 TDI/110 PS ) todos van acoplados también a una transmisión manual de seis velocidades.
A partir de aquí nos adentramos en un amplio catálogo de opciones más o menos útiles donde destacan principalmente la gran cantidad de sistemas de asistencia a la conducción. Entre estos hay que mencionar especialmente el control automático de distancia con el vehículo que nos precede y la frenada de emergencia en ciudad, así como el avisador de ángulo muerto, el asistente de carril, el Park Assist o el control dinámico de iluminación. Otros equipamientos interesantes se pueden encontrar en los apartados de radio y navegación o bien en cuanto a la elección de llantas y neumáticos.
Desde 19.625 euros (en Alemania)
Mucha atención hay que prestar al precio del nuevo Sportsvan, aunque de momento sólo se han definido para el mercado alemán. Aquí el precio de partida es inferior a 20.000 euros y corresponde a la versión de 85 cv en la que se incluye aire acondicionado, pantalla táctil en la consola, pantalla multifunción, control de presión de neumáticos y asiento del conductor con ajuste en altura.
Pasar al motor superior supone pasar a gastarse entre 21.325 y 25.675 euros si apostamos por los gasolina o entre 23.900 y 28.350 euros si preferimos el diesel. Según Volkswagen, los nuevos motores de cuatro cilindros consumen hasta un 20 por ciento menos que su predecesor, habiéndose reducido la media de consumo desde 5,6 a 4,9 litros en el apartado gasolina y de 4,7 a 3,9 en los TDI.
Un Bluemotion a partir de Junio
En la nueva gama del Sportsvan destacará especialmente la variante Bluemotion, la más ahorradora de todas con un precio de salida de 24.125 euros. Esta variante, que en el mercado alemán estará disponible a partir del mes que viene, está dotada del motor TDI 110 cv y cuenta con una optimización aerodinámica más detallista. Entre otras cosas, tiene la carrocería 15 mm más rebajada, un spoiler en el techo y una parrilla del radiador parcialmente cerrada, lo que le hace conseguir un coeficiente aerodinámico de 0,27.
Además, este modelo vendrá con neumáticos de baja resistencia, sistema start&stop, recuperación de energía en las frenadas así como una transmisión manual de seis marchas (el TDI normal cuenta con cinco). El resultado es que este diesel de 1.6 litros consume la valiosa cifra de 3,6 litros cada cien kilómetros emitiendo tan sólo 95 gramos de CO2 por cada kilómetro recorrido.
Resumen
El Sportsvan ofrece un nueva línea mucho más atractiva pero las mismas cualidades del VW Golf Plus. Ahora, si cabe, es más espacioso, más aprovechable, y sus motores consumen bastante menos combustible. Ahora, además de las personas mayores y con cierta falta de movilidad (el público más frecuente del Plus) el Sportsvan será el principal atractivo de familias con necesidad de espacio y ahorro.