Además de una economía de espacio ejemplar, este minimonovolumen sorprende por sus excelentes prestaciones. De momento no está disponible para el mercado español, pero todo se andará… Gustar. Esto es lo que debe hacer un automóvil, especialmente en términos estéticos, pero los Toyota no suelen provocar nunca ninguna montaña rusa de sensaciones. Siguiendo esta línea, la silueta funcional del Verso S no pertenece a aquellas que despiertan el irrefrenable deseo de dejarlo todo y salir corriendo al concesionario. Sin embargo, gracias a sus llantas de 16" y las inserciones cromadas repartidas por todo el habitáculo resulta moderno y brilla por mérito propio, y eso sin contar con tecnología LED, florituras dinámicas o techo tipo coupé. No obstante, lo que más nos ha impresionado del Verso S es su excelente habitabilidad.
Los voladizos cortos, su estructura elevada y una batalla ancha son indicios de que en este caso Toyota le ha dado mucha importancia al espacio interior. El acceso al puesto de conducción ya transmite una agradable sensación de amplitud. La cabina y el salpicadero no resultan agobiantes y, gracias a un volante regulable en altura y profundidad y a un asiento también ajustable, uno se puede organizar el espacio de la forma más óptima posible. Además, los asientos son duros en su justa medida y ofrecen una excelente sujeción lateral. La libertad de movimiento a la altura de la cabeza es excepcional, por lo que el Verso S sería el coche ideal para, por ejemplo, aquellos a los guste llevar sombrero.
Mucho espacio detrás para pasajeros y equipaje
El acceso a la parte trasera es amplio, la libertad de movimiento a la altura de las rodillas no desmerece en absoluto e incluso el espacio en la zona de los pies ofrece un gran margen de maniobra gracias a la ausencia del túnel de transmisión. No obstante, el asiento intermedio del banco trasero resulta bastante incómodo, incluso para trayectos cortos.
Los fanáticos del espacio estarán encantados con el maletero. La abertura del portón trasero es generosa, por lo que una persona de 1,80 metros de altura puede estar de pie debajo sin ningún tipo de problema. Por el contrario, el plano de carga es muy bajo y, gracias a un piso intermedio, ni siquiera resulta necesario elevar mucho los bultos. Y los que necesiten más espacio pueden rebajar el piso intermedio. Una solución práctica son sus 19 compartimentos de almacenamiento, grandes y pequeños, así como sus tres portavasos.
Otra gran idea son las dos grandes palancas situadas en ambas paredes del maletero y con las que se puede plegar hacia adelante el banco trasero de división asimétrica. El respaldo desciende automáticamente junto con la superficie de asiento, lo que hace que la capacidad del maletero aumente de 429 litros a 1.388 litros. El Verso S es, por tanto, un utilitario que ofrece una oferta de espacio adaptada a una familia completa y que además se puede aprovechar de forma muy versátil.
Demasiada variedad
La calidad también convence. Ya sea en el revestimiento del maletero, en la tapicería de los asientos o en la multitud de piezas de plástico existentes en su interior, Toyota no se ha permitido ningún error de bulto en lo que respecta a sus acabados. Sin embargo, el Verso S cuenta con muchas zonas y piezas de plástico duro y tan sólo el plástico suave del salpicadero resulta más agradable al taco. Por lo demás, de su consola central bien organizada cabría destacar que la combinación de distintas superficies y tonos de color resulta más bien poco atractiva. Aunque este puzle de piezas de plástico no es casual sí resulta demasiado variado.
En cambio, el nuevo sistema de sonido multimedia Touch, que se puede manejar en gran medida desde la amplia pantalla táctil a color, es una solución muy conseguida. Con el sistema Touch podremos disfrutar de una radio RDS que muestra la lista de las emisoras recibidas, conexión bluetooth, múltiples indicaciones del ordenador de a bordo, así como de la imagen de la cámara de visión trasera. Sin embargo, este sistema está reservado exclusivamente a las líneas de acabado superiores Life y Club.
Navegar con Google
En el momento de su lanzamiento al mercado en marzo de 2011 ya estará disponible, por 550 euros, la ampliación funcional del sistema de navegación completamente integrado Touch & Go, aunque no se suministrará hasta junio de 2011. Por este motivo no tuvimos el placer de probar esta función tan elogiada por la casa en nuestro ejemplar de prueba. Sin embargo, Toyota ya ha anunciado algunas funciones interesantes como la integración de Google Maps. En este caso, Google puede resultar útil para buscar las zonas más turísticas o la ruta más ecológica. Además, el navegador Touch & Go se conectar al móvil, por lo que podremos aprovechar la información almacenada en nuestra libreta de direcciones elegir destino. Al fin y al cabo, las futuras aplicaciones deberían servir de ayuda en la búsqueda de estaciones de servicio baratas o plazas de aparcamiento libres.
Sin embargo, nuestro Verso S nos convenció gracias algunas de las soluciones ya integradas. El modelo superior dispone de sensor de luz y lluvia, un sistema de acceso y arranque sin llave, un sistema de arranque y parada y un techo acristalado panorámico que ofrece a sus ocupantes unas vistas maravillosas. Pese a tratarse de un utilitario, el Verso S se puede equipar con algunos extras muy útiles.
Un gasolina algo perezoso
En el apartado de la motorización, la oferta resulta algo limitada. El único motor de gasolina es un viejo conocido de la casa de cuatro cilindros, 1,33 litros de cilindrada y 99 CV de potencia. En este caso lo único que tenemos es la posibilidad de elegir entre un cambio manual de seis velocidades o un cambio CVT continuo llamado Multidrive por 1.300 euros.
Ante esta perspectiva podemos asegurar que este propulsor no convierte al Verso S en un automóvil divertido en términos de dinámica longitudinal. Incluso para adelantar a los camiones que se nos pongan por delante en una carretera nacional tendremos dificultades, ya que para ello tendremos que reducir varias marchas de golpe y, además, mantener pisado el pedal del acelerador durante mucho tiempo. Esto no es precisamente lo que nosotros llamamos un par motor y una progresión fuera de serie. Sin embargo, este cuatro cilindros no sólo da la sensación de que podría soportar un régimen alto de revoluciones, sino que además estaría encantado. En este caso, el único inconveniente sería que aunque en realidad se trata de un minimonovolumen con una acústica agradable gracias al bajo nivel de ruido procedente del exterior, éste se volvería bastante molesto por el estruendo provocado por el motor.
Multidrive: cómodo y eficaz
Lo que nos ha sorprendido positivamente es su cambio automático CVT. El confort inherente a un cambio automático es algo fuera de toda duda, sin embargo, como guinda del pastel este cambio nos ahorra cualquier tipo de sacudida, estrangulamiento o cambio de marcha brusco. Las órdenes del acelerador se ejecutan de forma limpia y, al arrancar, se traducen de forma sorprendentemente potente en un avance hacia adelante. Al menos en conducción por ciudad el cambio convence en todos los sentidos. Sin embargo, en conducción interurbana o en autopista presenta un efecto elástico algo molesto. Por ejemplo, al acelerar de 100 a 130 km/h las revoluciones se disparan en un primer momento y no vuelven a bajar hasta que no se levanta el pie del acelerador y se regresa a la zona de carga media.
El tiempo de aceleración de 0 a 100 km/h del Verso S con cambio Multidrive es de 13,7 segundos y su velocidad máxima alcanza los 165 km/h. La combinación con el cambio manual de seis velocidades ofrece unas cifras algo mejores. En cambio, con un consumo de 5,2 litros el Multidrive resulta 0,3 litros más económico. Y con el sistema de arranque y parada el Verso S es capaz de registrar un consumo aún más reducido. Parece ser que este extra algo caro, de unos 450 euros, ahorra otros 0,2 litros de combustible. Sin embargo, independientemente de que disponga o no de un cambio automático, el Verso S es el modelo de gasolina más eficiente del segmento de los minimonovolúmenes.
De forma alternativa, y para aquellos que están más tiempo en la carretera, Toyota ofrece un motor diésel de 90 CV que, junto con unas prestaciones ligeramente superiores, también ofrece un consumo más bajo de unos 4,3 litros. El sobreprecio de esta variante asciende como mínimo a 2.350 euros, por lo que esta inversión adicional frente al gasolina sólo resulta rentable a muy largo plazo y si se recorren muchos kilómetros.
Excelente dirección
El chasis del Verso S nos ha causado una impresión algo contradictoria. En términos generales el nivel de confort es agradable pese a sus llantas de 16". Su suspensión es sensible y absorbe muchas de las irregularidades del firme de forma convincente. Sin embargo, con baches más pronunciados o sobre firmes adoquinados el chasis se muestra sorprendentemente comunicativo y los ocupantes sufren con demasiada precisión el estado de la calzada.
Por lo demás, el Verso S es fácil de conducir, tiende a subvirar ligeramente y muestra un balanceo moderado, lo que no quiere decir que su configuración sea demasiado blanda. En otro orden de cosas, la dirección resulta muy precisa y obedece de forma ejemplar a las órdenes del conductor. Podemos afirmar, sin miedo a equivocarnos, que se trata de una de las mejores direcciones asistidas eléctricas que existen hoy en día en el mercado. Los frenos también muestran un excelente comportamiento. Por este motivo, en ocasiones el Verso S incita en cierta medida a realizar giros algo más atrevidos. Además, si la cosa se pone fea también se puede recurrir al ESP que realizará cualquier corrección de la dirección.
Mucho coche a un precio razonable
En el tema de la seguridad Toyota se mantiene fiel a su política, por lo que el Verso S presenta un equipamiento ejemplar. Junto con una amplia lista de asistentes electrónicos activos de última generación, en el aspecto de la seguridad pasiva también se sitúa al máximo nivel. Pese a sus cortos voladizos la carrocería ofrece una excelente superficie de absorción de impactos y, además, los sistemas de retención – con un total de siete airbags – y el sistema de protección contra latigazos cervicales minimizan aún más el riesgo de sufrir lesiones.
Este amplio equipamiento de seguridad está disponible de serie en el modelo básico por un precio de 15.000 euros. Sin embargo, además de esto ofrece pocos detalles. Los equipamientos superiores Cool, Life y Club resultan, por supuesto, más atractivos. Con la segunda línea de acabado más alta (Life) y el motor gasolina en combinación con el cambio Multidrive se obtiene un conjunto redondo. Los que encarguen además el navegador Touch & Go, así como el techo panorámico acristalado, disfrutarán por 19.000 euros de un Verso S cómodo y bien equipado a un precio más que razonable.
Con todo, el Verso S deberá hacer frente a varios competidores. Ya sea el Skoda Roomster, el Citroën C3 Picasso, el Kia Venga, el Hyundai ix20 o el Lancia Musa, todos están equipados con motorizaciones y equipamientos similares, aunque son más caros. Por lo tanto, en lo que respecta a la relación calidad/precio el Verso S también se encuentra en primera línea.
Conclusión
El argumento más sólido a favor del Verso S es su oferta de espacio amplia y sumamente versátil. Pese a que su carrocería no supera los 4,00 metros de longitud, el Verso S puede albergar cómodamente a una familia de cuatro miembros con equipaje incluido. Otro elemento a tener en cuenta es su cómodo cambio Multidrive que, además de todo el confort posible, también logra un consumo reducido. No en vano el Verso S 1.3 Multidrive es el minimonovolumen más eficiente del mercado. Su amplio equipamiento de seguridad y sus excelente relación calidad/precio son otras de las características que hablan a favor de este pequeño monovolumen.
Como no puede ser de otra forma, también hay algunos aspectos criticables. En este sentido, la mecánica de gasolina no es demasiado vivaz y al exigirle más resulta algo molesto en términos acústicos. En ocasiones el chasis se muestra algo incómodo e inquieto. Además, la consola central carece de toda armonía estética debido a su mosaico de piezas de plástico.
Como ya habíamos dicho, el Verso-S no se vende en el mercado español, y tampoco lo hará a corto plazo. Toyota prefiere estructurar su estrategia en sus pilares básicos (Auris, Verso, Avensis) antes de introducir más subsegmentos en su gama. Seguiremos esperando.
Nota: los equipamientos, precios y versiones reflejados en este artículo corresponden, de momento, exclusivamente al mercado alemán.