A Volkswagen le suele gustar alardear de su carácter pionero y, sin embargo, este exitoso fabricante también es un imitador, puesto que los triángulos acristalados de los montantes A, los asientos AGR o el techo de cristal panorámico –innovaciones del recién presentado Golf VII– son características ya conocidas del Opel Astra. Pero Opel también toma como ejemplo a la competencia y algunas de las innovaciones que presenta el recién renovado Astra no son nada nuevo, aunque no por ello dejan de aumentar en gran medida el atractivo de este modelo compacto. Una mención especial merece, en este sentido, el nuevo diésel biturbo de casi 200 CV de potencia. El «nuevo» Astra ya carga con tres años de historia a sus espaldas y, en este sentido, iba siendo hora de que Opel se decidiera a incorporar alguna que otra innovación. Las medidas estéticas del tratamiento rejuvenecedor al que se ha visto sometido el Astra son de poca importancia, aunque sumamente llamativas. Así, el listón cromado de la parrilla ocupa ahora una posición más central. Los discretos perfiles cromados situados en el faldón delantero, en la entrada de aire central y en los faros antiniebla laterales mejoran aún más su semblante deportivo, mientras que en la zaga un nuevo hueco para la matrícula y un listón cromado más ancho logran un efecto similar.
Además de las pequeñas mejoras estéticas, Opel también ha apostado por una ofensiva en lo que respecta a las opciones de equipamiento. Así, de ahora en adelante se puede encargar la luz de conducción diurna tipo LED en combinación con los faros halógenos. Para el interior está disponible un nuevo tono marrón. Aparte, algunos sistemas de ayuda han mejorado técnicamente y otros son incorporaciones complemente nuevas a la lista de opciones. De esta forma, la segunda generación de la cámara delantera presenta ampliaciones funcionales en lo que respecta al sistema de reconocimiento de señales de tráfico y al sistema de advertencia de cambio involuntario de carril, así como en la indicación de la distancia y en el sistema de alerta de colisión frontal.
Entre los asistentes totalmente nuevos se encuentra la cámara de visión trasera, un asistente de aparcamiento con detección de plazas de aparcamiento, un sistema de control de ángulos muertos y un regulador de velocidad adaptativo por radar con función automática de frenada en caso de peligro entre los 50 y los 180 km/h. No obstante, todos estos sistemas de ayuda solo están disponibles previo pago del correspondiente suplemento.
Aproximadamente el doble
Probablemente, por la nueva motorización 2.0 BiTurbo CDTI Opel pedirá el doble que por el modelo más básico de su gama, un 1.4 de 100 cv a un precio de 15.900 euros. Este propulsor diésel con doble sobrealimentación en serie se estrenó en elInsignia BiTurbo y a principios de 2013 también pondrá sus 195 CV de potencia al servicio del Astra.
El nuevo BiTurbo de la familia Astra comienza a reivindicar su posición privilegiada en el plano estético. Entre otras cosas, el faldón delantero del cinco puertas y del familiar es similar al del GTC deportivo de tres puertas. Además, el listón cromado que exhibe la parrilla de las otras motorizaciones del Astra está pintado en el color de la carrocería en el caso del BiTurbo. En contrapartida, las ventanillas laterales del cinco puertas y del Sports Tourer presentan un perfil cromado. En la zaga, dos tubos de escape de tamaño moderado, aunque estética claramente deportiva, acentúan la naturaleza privilegiada del BiTurbo.
Ya en el interior, Opel a intentado crear para el diésel tope de gama un ambiente ligeramente deportivo. Los laterales de los asientos, que destacan por su diferencia cromática con respecto a la zona central, aportan un toque sofisticado al habitáculo, mientras que el volante achatado en su parte inferior y las costuras rojas transmiten un estilo más deportivo.
Un chasis excelente
Opel también ha perfeccionado el reglaje del tren de rodaje del Astra, el cual ya en su versión estándar ofrece una excelente base para divertirse al volante. En el caso del BiTurbo, no obstante, se ha apostado por una configuración más deportiva. En este caso, su eje trasero más rígido procedente del GTC garantiza un menor índice de rotación, más estabilidad y, por lo tanto, una mayor dinámica.
Además, con tan solo un botón el conductor puede determinar si desea una configuración más cómoda o más deportiva para su chasis. Lo bueno es que en modo confort el BiTurbo equipado con llantas de 18 pulgadas salva de forma sorprendentemente suave las irregularidades del piso, a la vez que permite trazar las curvas con facilidad, de manera precisa y con abundante fuerza.
Configuración GTC inteligente
Gracias a su dirección sumamente homogénea y cómoda, el Astra hace todo lo que el conductor quiere, y con bastante precisión. El BiTurbo resulta incluso algo más resolutivo al GTC de tres puertas, dado que dispone de un eje delantero HyperStrut inteligente y, además, su reglaje es aún más duro.
Gracias a sus impresionantes 400 Nm de par motor, el BiTurbo domina en todo momento la aceleración a la salida de la curva sin referir grandes interferencias. ¿Sacudidas excesivas sobre la dirección? ¿Efecto turbo? Ni lo uno, ni lo otro. El cuatro cilindros traslada sus 320 Nm de par motor a las ruedas delanteras a tan solo 1.250 r.p.m. y entre las 1.750 y las 2.500 vueltas es cuando alcanza su par máximo. Los que quieran y dispongan de suficiente espacio para ello podrán llevar al cinco puertas de 0 a 100 km/h en apenas 8,4 segundos y, al menos en teoría, alcanzarán una velocidad máxima de 225 km/h.
Algo flojo en la zona alta del rango de velocidades
Sin embargo, en combinación con el suave cambio manual de seis velocidades nosotros no fuimos capaces de alcanzar esta impresionante marca en la relación de transmisión más alta. Poco antes de los 200 km/h el incremento de la velocidad se vuelve algo lento e incluso con una aceleración más prolongada no llegamos a superar la marca de los 210 km/h. Teniendo en cuenta el penetrante ruido provocado por el aire llegando a la máxima velocidad, una conducción prolongada al límite tampoco resultaría muy recomendable. Y, por otro lado, su consumo homologado de apenas 5 litros pasaría a registrar una cifra de dos dígitos.
En cualquier caso, nadie ha dicho que conducir un Astra BiTurbo fuera un placer barato. Seguramente a partir de octubre de 2012 podremos encargar ya este excepcional diésel con un buen equipamiento de serie por aproximadamente 30.000 euros. Las primeras unidades están previstas para principios de 2013.
Conclusión
Opel ha mejorado aún más si cabe el Astra en su modelo para 2013. Las pequeñas mejoras estéticas visibles en todos los modelos y una serie de nuevos sistemas de ayuda hacen del nuevo Astra un coche aún más atractivo. Como atractivo es también el nuevo modelo de acceso disponible en versión cinco puertas con un buen equipamiento y un precio de tan solo 15.900 euros.