Esto supone romper con la idea de que los mejores compactos proceden indiscutiblemente de Alemania. El lejano oriente vuelve a demostrar, una vez más, que son capaces de plantar cara a la tradición alemana. Hay que reconocer el valor de una marca como Nissan, ya que se han puesto el traje de baño para tirarse a una piscina plagada de tiburones. El nuevo Pulsar es un coche de 4,39 metros de largo, tiene cinco puertas y, a grandes rasgos, retoma la senda que el fracasado Tiida marcó allá por el año 2011. El Pulsar está disponible desde 16.050 euros y su diseño es inconfundiblemente Nissan, con detalles procedentes de X-Trail y del Qashqai, como la parrilla cromada en forma de V o los faros con iluminación LED. También destaca el reborde del capó y los prominentes pasos de rueda, detalles que nada tienen que ver con la escasez de ideas que lastraba a su predecesor.
Larga distancia entre ejes
Es especialmente llamativo en el Pulsar la distancia entre ambos ejes. Con 2,7 metros, no hay otro compacto que ofrezca una cota similar en su ficha técnica, aseguran los responsables de Nissan. El espacio de carga oscila, por su parte, entre los 385 y los 1395 litros, lo cual supone que los ocupantes gocen de una cantidad de espacio elevada tanto en el habitáculo como en el maletero. De hecho, la sensación de espacio en el habitáculo es impresionante, sobre todo en lo que se refiere al espacio disponible para las rodillas y a la buena anchura que hay para los hombros. Además, los asientos son muy cómodos y el material del que están hechos da una sensación de calidad alta.
El manejo del nuevo Nissan es tan efectivo como sencillo. Los menús interactivos son de lo más intuitivo, asó como las funciones de audio y de navegación pueden gestionarse con muy pocas acciones en los botones. Por lo demás, la calidad general de los materiales es buena, aunque abunda el plástico hay superficies blandas y bastantes huecos portaobjetos que mejoran la habitabilidad.
Dos motores para empezar
Dos son los motores disponibles en la nueva andadura del Pulsar. Se trata de un bloque 1.2 litros de gasolina y otro 1.5 dCi turboalimentado, ambos ayudados de un sistema start-stop, transmisión manual de seis marchas y recomendación del momento óptimo de cambio de marcha. El motor de gasolina ofrece 115 cv y 190 Nm de par una vez superadas las 2.000 revoluciones. Esto permite alcanzar una velocidad máxima de 190 km/h y ofrecer una aceleración de 0 a 100 en 10,7 segundos, lo cual es una cifra aceptable teniendo en cuenta que el Pulsar pesa casi 1.300 kg. El motor diesel, de 110 cv, consigue la misma velocidad máxima pero acelera un poco más lento, en 11,6 segundos, eso sí, consumiendo 3,6 litros cada cien kilómetros (frene a 5 litros del motor de gasolina). El par motor del motor de gasolina es de 260 Nm que están disponibles en su totalidad una vez alcanzadas las 1.750 rpm. El año que viene estará disponible en la gama el motor de gasolina 1.6 con 190 cv.
En lo que se refiere a la calidad de su marcha, el Pulsar es un vehículo de suspensión muy confortable (lo que no quiere decir blanda) con una dirección precisa y que devuelve buena cantidad de información sobre el asfalto a las manos del conductor, así como un escaso ruido aerodinámico. Y a todo esto, el que piense que por tener una distancia entre ejes de 2,7 metros el Pulsar no puede ser manejable está muy equivocado. Su diámetro de giro de 10,2 metros hace accesible hasta el rincón más estrecho.
Equipamiento de serie completo
Las líneas de equipamiento procedentes de otros modelos de Nissan (Visia, Acenta y Tekna) llegan con el mismo planteamiento al Pulsar. Todas las versiones cuentan de serie con aire acondicionado, elevalunas eléctricos así como ordenador de a bordo y pantalla de cinco pulgadas. Las llantas de aleación están disponibles a partir del equipamiento Acenta, mientras que el Tekna ofrece equipamiento de seguridad de primer nivel, como por ejemplo el novedoso “Escudo de Seguridad Nissan” que incluye asistente de frenada de emergencia, vigilancia de ángulo muerto, cámara omnidireccional y navegación superior gracias al sistema “Connect”.
En Asia y Australia ya están familiarizados con el nombre de Pulsar, ya que Nissan vende desde 1978 coches con este nombre. El Pulsar está fabricado en la planta que la marca tiene en Barcelona y su precio de salida es de 16.000 euros. Desde ahí, y en función del motor y el equipamiento elegido, podremos llegar hasta los 21.800 euros que cuesta el Pulsar dCi 110 cv Tekna.