Dentro de los buenos números que finalmente se han alcanzado en 2015 (más de un millón de coches vendidos con un crecimiento del 20% con respecto al año anterior), uno de los nichos que más ha crecido ha sido el de los vehículos de energías alternativas, esto es, el de los eléctricos puros (EV), los híbridos (HEV) y los híbridos enchufables (PHEV). En concreto, el crecimiento en las ventas de este tipo de coches ha sido superior al 50% con respecto al año anterior, con una cifra total de más de 20.000 unidades y representando ya el dos por ciento del mercado total de coches. Dentro de este acotado segmento de vehículos, Mitsubishi se ha hecho muy fuerte porque apenas hay alternativas para el Outlander PHEV, un SUV híbrido y enchufable que además se renueva con un precio al que, sinceramente, es difícil decir que no. Una vez aplicadas la ayudas del gobierno y aplicada la campaña de promoción de la marca, el precio final para el cliente es de 35.020 euros. Independientemente de sus cualidades como híbrido, es muy poco dinero si tenemos en cuenta que estamos ante un coche de 200 cv, cargado tecnológicamente “hasta arriba” y con una garantía de ocho años.
¿Qué cambia?
Mitsubishi se ha propuesto un objetivo fuera de lo común para este coche: pasar de las 400 unidades vendidas en 2015 a más de 1.000 en 2016. Para ello, la nueva generación del Outlander PHEV parte de un diseño mucho más atractivo capaz de conquistar a más público antes de descubrir sus cualidades técnicas. Así, en la parte delantera del coche cambian la parrilla, que ahora tiene un cromado oscuro, la moldura del paragolpes y las de los antinieblas así como las llantas de aleación, que son exclusivas y específicas para este modelo. Junto a esto, también hay una moldura lateral, los pasos de rueda van sin molduras y la antena del techo es de tipo “aleta de tiburón”, con lo que se consigue una estética Premium sin necesidad de recurrir a equipamiento extra. A nosotros nos parece un diseño muy conseguido, no llega a ser espectacular por nada pero entra bastante bien por los ojos.
Por dentro, lo que más se nota con respecto al modelo anterior es la mejora en la insonorización del interior. El aislamiento acústico es muy bueno, y la presentación del interior – con luz ambiental LED y una nueva consola central- da sensación de calidad general al coche. Hay un par de detalles lujosos, como el volante de 4 radios calefactable o la tapicería mixta de cuero y Alcantara de los asientos delanteros.
Un gadget muy interesante es la posibilidad de controlar ciertas funciones del coche desde una aplicación para móvil (vale para Android e iOS), como el encendido de la calefacción o el estado de carga del coche.
¿1,8 litros?
La cifra de consumo que Mitsubishi va a comunicar en sus anuncios es de 1,8 litros cada cien kilómetros, lo que equivale también a unas emisiones de CO2 de 42 gramos por kilómetro. Estos datos son ligeramente mejores que los del Outlander PHEV anterior (1,9 litros y 44 gramos de CO2/km). Como ocurre en este tipo de coches, esta homologación refleja el consumo durante los primeros cien kilómetros y con las baterías cargadas a tope, con las cuales puede recorrer hasta 52 kilómetros sin necesidad de pedir ayuda al motor de combustión. Mitsubishi asegura que el consumo del coche sin ayuda de las baterías es de 5,8 litros cada cien kilómetros.
Técnicamente, en el Outlander PHEV contamos con un motor de gasolina 2.0 de 121 cv y con dos motores eléctricos, uno en cada eje, capaces de generar 82 cv cada uno y diferentes cifras de par motor (137 Nm en el eje delantero y 195 en el trasero). La potencia total máxima es de 203 cv. Además, hay un generador de 70 kW cuya misión es cargar las baterías de ion-litio de 300V y 12 kWh con la energía procedente del motor de combustión o de la recuperación de la misma en las frenadas. Al ser un híbrido enchufable, la labor de carga puede hacerse también a través de un enchufe casero convencional (5 horas) o a través de un sistema de carga rápida CHAdeMO que puede encontrarse en algunas “electrolineras” y que tarda media hora en cargar el 80% de la batería.
Según Mitsubishi, recargando las baterías con la tarifa nocturna el gasto por km es de 0,77 euros, con lo cual se puede reducir a la séptima parte el gasto con respecto a un Outlander 220 DI-D de 150 cv, cuyo consumo es de 5,8 litros cada cien km. Obviamente, esta comparación solo sirve en el caso de que el Outlander circule solo con electricidad, es decir, que nuestro trayecto diario no supere nunca los 52 km y que podamos acogernos a la tarificación más barata posible (0,04 euros/kw).
Hasta 120 km/h en modo eléctrico
A priori el funcionamiento es sencillo porque el coche se ocupará siempre de elegir el modo de conducción más eficiente, ya sea aprovechando la carga de la batería, haciendo que el motor de combustión mueva el coche o cargue las baterías o poniendo todo a funcionar al mismo tiempo para maximizar la entrega de potencia. El conductor tiene disponible al lado de la palanca de cambios un botón SAVE, que sirve para conservar la energía acumulada en la batería, y un botón CHARGE, que se ocupa de pasar energía del motor de combustión a las baterías. Es importante saber que el modo EV funciona hasta 120 km/h, con lo cual nos sirve perfectamente para salir a vías rápidas y no solo aprovecharlo dentro de la ciudad.
- Datos técnicos
Sistema de propulsión:
- Motor de gasolina de 2.0l, 121 CV
- Motor eléctrico delantero 60kW (82CV); 137 Nm
- Motor eléctrico trasero 60kW (82CV); 195 Nm
- Generador 70 kW
- Bateria Li-ion 300V; 12kWh
- 4WD sin eje de transmisión
- Suspensión McPherson delantera
- Suspensión Multilink trasera con barra estabilizadora
Dimensiones:
- 4.695/1.800/1.710 (largo/ancho/alto en mm)
- Distancia entre ejes: 2670 mm
- Peso: 1845 kilos
- Angulo ataque: 21º
- Angulo salida: 22,5º
- Neumáticos 225/55R18
Capacidad maletero:
- 498 litros ampliables hasta 921
Durante la presentación hicimos un recorrido de 68 kilómetros en el cual se combinó a partes iguales ciudad, carretera secundaria y autovía. El consumo más bajo registrado entre todos los Outlander PHEV que había fue de 1,7 litros de combustible (la medición no se hizo con el ordenador de a bordo, sino rellenando de nuevo el depósito hasta que rebosara).
Equipamiento
Sin duda uno de los puntos fuertes de este Outlander es todo el equipamiento que se ofrece de serie. Solo hay un nivel de equipamiento, el Kaiteki, y todo va incluido en él, es decir, no se ha escatimado lo más mínimo a la hora de incluir equipamiento. Realmente creemos que la relación entre precio y cantidad de equipamiento es difícil de mejorar en cualquier SUV de este tamaño (mide 4,69 metros, más o menos lo mismo que un Hyundai Santa Fe o que un Volvo XC60).
Entre otras cosas, están incluidos en el pack de equipamiento la cámara de 360 grados, el volante calefactable, parktronic delantero y trasero, luces LED delanteras, control de crucero adaptativo, alerta de salida de carril y mitigación de colisión frontal.
La única pega que podemos poner en el interior del coche tiene que ver con el sistema de infoentretenimiento, el cual nos parece bastante lento y poco claro. Pese a todo, los diagramas de información sobre el consumo de electricidad y de gasolina, así como los flujos de energía entre los sistemas ayudan bastante bien a entender cómo funciona este coche.
Conclusión
Mitsubishi da cinco años de garantía para el vehículo y 8 años de garantía para sus baterías, lo cual es un plus de seguridad a la hora de comparar y decantarse por la compra de este híbrido enchufable. Las ventajas de elegir este modelo frente a otro de combustión tradicional es que se pueden cubrir a diario unos 50 km en modo eléctrico (gasto cero en combustible) y que se circula con total silencio y ausencia de vibraciones desde parado y sin necesidad de que se alcance una temperatura óptima de funcionamiento. El tamaño de las baterías apenas resta habitabilidad y, a pesar de ser tan tecnológico, es un coche muy fácil de conducir en todos los sentidos. Realmente, son todo ventajas, por lo que creemos que no tendrá problemas en alcanzar su pretencioso objetivo de doblar el número de ventas en un año.