Todas fueron presentadas en el último Salón de Ginebra. De momento solo está disponible en el mercado la versión híbrida; los otros dos llegarán en noviembre y en primavera de 2017 respectivamente. Muchos ya lo han calificado como el “anti Prius”, pero la pretensión de Hyundai con el IONIQ va mucho más allá de desbancar o al menos robar protagonismo al actual rey de los compactos híbridos. Este modelo (cuyo nombre viene de cruzar los conceptos ión y único), es el abanderado de los más de 20 modelos que la marca presentará en los próximos años con la misma etiqueta ecológica.
La primera baza con la que juega este IONIQ frente al Prius es el precio, ya que la diferencia del primer precio de uno y otro es notablemente diferente. El coreano está disponible desde 23.900 euros (a los que habría que descontar una promoción de 3.000 euros), mientras que el japonés tiene un precio único de 29.900 euros. Si comparamos la versión más equipada del IONIQ frente al Prius entonces el precio es similar.
Plataforma ligera y aerodinámica
Sin entrar a juzgar el diseño (que a nosotros personalmente nos gusta), Hyundai ha demostrado con datos el trabajo realizado por los ingenieros y por los diseñadores de la marca. El IONIQ parte de una carrocería muy aerodinámica (su coeficiente cd es de 0,24) y se apoya en soluciones que favorecen aún más este aspecto (como las entradas de aire activas, el difusor trasero o los bajos carenados, así como las llantas de aleación de diseño específico).
Es un coche que mide 4,47 metros y pesa 1.440 kg. Hyundai asegura haber utilizado materiales reciclables y ecológicos en algunos de sus componentes, y ha reducido el peso de algunas piezas de manera importante. Por ejemplo, el capó y el portón del maletero están hechos de aluminio, lo que ha permitido reducir en más de 12 kilos el peso del conjunto. En general, Hyundai ha empleado el acero de alta resistencia en un 53% del chasis, lo que permite que el IONIQ se beneficie de una buena rigidez y mejore la absorción de energía en impactos. Por tanto, no es solo un avance de construcción, sino también a nivel de seguridad.
Seguridad ante todo
Esta seguridad también se complementa con los muchos sistemas que se incluyen (según nivel de equipamiento) en este híbrido, como el aviso de salida y mantenimiento de carril (muy útil por ejemplo en carreteras secundarias con doble sentido), el frenado de emergencia autónomo, aviso de otros vehículos en ángulo muerto o el control de crucero inteligente. El IONIQ dispone en su interior de siete airbags, distribuidos para proteger a los ocupantes del vehículo en caso de accidente, incluyendo un airbag para las rodillas del conductor.
Motor más que suficiente
Con la eficiencia en el punto de mira, el sistema híbrido del IONIQ parte de un bloque 1.6 GDI de ciclo Atkinson con inyección directa y cuatro cilindros. Este motor pone sobre la mesa 105 cv y un par motor de 147 Nm que se complementarán con los otros 43 cv de potencia de la unidad eléctrica (170 Nm). Al funcionar de manera conjunta, la potencia máxima de salida es de 141 cv y el par máximo que se puede alcanzar es de 265 Nm.
La novedad más importante en la parte mecánica es que se ha incluido una caja de cambios de doble embrague y seis marchas, un requisito especialmente demandado por el mercado español y al que Hyundai ha sabido responder. No se ha podido optar por una caja de 7 relaciones por cuestiones de tamaño, pero la eficiencia y la rapidez al gestionar los cambios de marcha son muy positivos. Por ejemplo, el consumo homologado en ciclo mixto con este motor y caja de cambios es de 3,4 litros (eso sí, en la versión con llantas de 15”).
Eléctrico puro incluso a 120 km/h
Como ocurre en todos los coches que ofrecen autonomía eléctrica, la fase del arranque se cubre con el motor eléctrico (modo EV), por lo que el coche no suena nada al recorrer los primeros metros y hasta que entra en funcionamiento el bloque de combustión. La entrega de par es plana, se produce desde el principio y durante casi cuatro mil vueltas. Según Hyundai, se pueden recorrer en el mejor de los casos hasta 5 km en modo eléctrico y a velocidades de hasta 120 km/h.
Es importante destacar que la batería está alojada bajo el asiento trasero, lo cual facilita que el centro de gravedad baje un poco y mejore las cualidades dinámicas sin perjudicar el espacio de carga en el maletero. Esta disposición de la batería también permite utilizar el esquema multilink en la suspensión trasera, lo que se traduce en mayor comodidad para los ocupantes de la parte trasera.
Dinámico y con cambios muy suave
Durante una brevísima toma de contacto, lo que más nos ha llamado la atención del IONIQ es la buena calidad de su interior, con un cuadro de instrumentación bastante moderno y elegante (refleja su carácter tecnológico pero sin parecer una nave espacial) y el espacio disponible para las piernas en las plazas traseras.
Sin haberlo podido probar en profundidad, es un coche que acelera de una forma muy enérgica y en el que la suavidad del DSG hace que estemos ante otro concepto totalmente diferente a aquellos primeros híbridos con transmisiones CVT en los que eran muy frecuentes los tirones y las subidas de vueltas repentinas.
El conductor dispone de dos modos de conducción, uno Eco y otro Sport, que se accionan desde la propia palanca de cambios y que actúan sobre el tacto de la dirección y sobre la respuesta del acelerador, que llega hasta un régimen de vueltas más alto antes de saltar a la marcha superior. En el cambio de un modo a otro cambian algunos detalles del cuadro de instrumentación.
Tres versiones
El IONIQ se ofrecerá con tres versiones de equipamiento, la primera de ellas disponible desde 23.900 euros y en la cual se incluyen equipamientos de calidad como la cámara de aparcamientos, alerta por cambio involuntario de carril, control de crucero, etc. Esta versión se llama Class y es la que ofrece llantas de 15” con las que lograr los mejores consumos.
Si queremos subir al segundo nivel llegamos a la versión Tecno, a la que se añaden las llantas de 17”, el Apple Car Play (o el sistema de conectividad similar de Android), así como faros de xenón HD o el cuadro de instrumentación un poco más grande (7 pulgadas). Por último, el acabado top de la gama es el Style e incorpora, además de todo esto, asientos ventilados, cuero, sistema de detección de ángulo muerto y techo solar.