Ocho años después de su lanzamiento, Fiat presenta una actualización del modelo en el mismo sitio donde empezó todo aquel 4 de Junio de 1957 en el barrio de Lingotto (Turín). El Fiat 500 y el Fiat 500 C son incuestionables desde un punto de vista estético. Te pueden gustar más o menos los coches pequeños, pero ambos irradian armonía, simpatía y sobre todo un marcado estilo italiano. Es un coche con el que fácilmente se dibujan las sonrisas en las caras de su conductor y acompañantes.
Poco temperamento
No obstante, conseguir sensaciones no es igual de fácil con todos los motores que ofrece. Durante nuestro primer test pudimos dar una vuelta con el propulsor 1.2 de gasolina, el cual desarrolla 69 caballos de potencia y un par máximo de 102 Nm entregados a partir de las 3.000 vueltas. Son datos demasiado humildes, pero si nuestro nivel de exigencia no es alto puede cumplir con las expectativas de transporte en ciudad sin carga de equipaje ni de ocupantes.
En los primeros kilómetros de nuestra prueba ya podemos sacar las primeras conclusiones. Cualquiera que quiera exprimir un poco la dinámica de este motor tendrá que pelearse con el cambio manual de cinco marchas y sacarle una “chicha” que parece que nunca llega. El hecho de querer buscar siempre revoluciones más elevadas esperando que despierte hace que el consumo medio de combustible ronde los 8 litros, superando incluso los diez litros en el tramo en el que la cosa se puso cuesta arriba.
Los que no se conformen con esto y quieran ir más rápido tienen a su disposición el motor de gasolina TwinAir de dos cilindros con 85 y 105 cv, con un traqueteo característico de esta arquitectura pero con una respuesta rápida y un consumo moderado. Los dos cumplen ahora con la normativa de emisiones Euro 6 sin haber modificado nada notable en su tecnología.
Acabado superior
En lo que respecta al equipamiento, solo pudimos comprobar el acabado más alto de la gama, el Lounge. Lógicamente, aquí todo parece de mucha calidad y el acabado es muy bueno, aunque no entendemos cómo hay cosas tan sencillas que sólo están disponibles en este acabado, como por ejemplo la regulación en altura del asiento del conductor.
En el equipamiento de serie Pop la marca ofrece sin coste adicional mandos en el volante, luz diurna por LEDS, seis altavoces y conexión USB. El Popstar añade el climatizador y ya en la versión superior podemos disfrutar del Uconnect para conectarse a internet a través de un Smartphone.
En cuanto a la habitabilidad, los asientos traseros se merecen el punto positivo, ya que al menos para las piernas hay espacio suficiente para viajes cortos. Las dimensiones de este 500 no varían con respecto al anterior, pero es un aspecto que hay que mencionar teniendo en cuenta que supera por muy poco los tres metros y medio de longitud.
No obstante, aunque no haya cambios en las dimensiones, Fiat asegura que ha modificado el cuarenta por ciento del coche. ¿Y dónde están esos cambios? Aún no lo sabemos, porque a simple vista estamos ante un coche bastante similar al anterior. Estéticamente, tan solo cambia el diseño de los faros delanteros y de los pilotos traseros.
Personalización
Entre los colores disponibles en el catálogo encontramos dos que nos llaman especialmente la atención, el rojo Corallo y el Opera Burdeos. Gracias a la personalización ofrecida por Fiat llamada “Second Skin” se puede obtener un efecto bicolor en el coche gracias a unas pegatinas con diseños predefinidos, con los cuales se puede conseguir más exclusividad en el coche pero también requiere ciertas precauciones para no dañarlas (sobre todo a la hora de limpiar el coche). Estas pegatinas, dependiendo del modelo elegido, van sobre el techo, sobre los pilares, en el capó o a lo largo de la carrocería.
- Fiat 500 1.2 69 cv
Longitud: 3,57 Metros, Ancho: 1,63 Metros, Alto: 1,49 Metros
Batalla: 2,30 Metros
Maletero: 185 Liter
4 plazas
1,2-Litros gasolina
4 cilindros, cambio 5 velocidades
51 kW/69 CV,
Par máximo: 102 Nm a 3.000 rpm
0-100 km/h: 12,9 s, Vmax: 160 km/h,
Consumo: 4,9 Litros/100 Km
Emisiones CO2: 115 g/km
Precio: desde 11.300 euros
## Conclusión
Tanto el 500 como el 500C (descapotable) sigue siendo el coche urbano por excelencia si lo que queremos es diseño. Es pequeño, maniobrable y no presenta ninguna complicación a la hora de aparcar en pleno centro. Con un precio de salida de 11.300 euros (1.2 69 cv), el precio se mantiene estable con respecto al modelo anterior. No obstante, el que quiera moverse con un motor lo suficientemente divertido tendrá que decantarse por las versiones de 85 cv o 105 cv, ésta última a un precio de salida superior a 15.000 euros. Para finales de año se espera también la llegada de un motor diésel 1.3 Multijet de 95 cv.