BMW ha sacado al mercado la séptima generación de su Serie 5, un modelo para el que ya sobran las presentaciones y que después de 45 años de vida conseguirá pasar a la historia por ofrecer -antes que cualquier otro- cosas tan increíbles como un sistema de conducción semiautónoma, un sistema de aparcamiento sin necesidad de conductor y un control por gestos de muchas funciones multimedia. Estas tres son solo algunas de las muchas mejoras que BMW ha introducido en su berlina de tamaño medio, el Serie 5 (con denominación G30), un coche que se bate el cobre en el segmento E con los implacables Audi A6 y Mercedes-Benz Clase E y junto con otras alternativas de otras nacionalidades como por ejemplo el Jaguar XF, el Lexus GS o el Volvo S90.
La generación a la que sustituye este nuevo Serie 5 – la sexta, conocida internamente como F10- ha sido la más vendida de la historia con un total de 2,2 millones de unidades vendidas en todo el mundo, un éxito que debe en gran parte a la introducción en la gama de la carrocería GT y que ha disparado el interés no solo por el modelo, sino también por la marca en general.
Ver todos los BMW Serie 5 de ocasión en AutoScout24.## Más grande pero mucho más ligero El nuevo Serie 5 ha crecido un poco en sus dimensiones (mide 4,93 metros de longitud, 1,86 m ancho y 1,46 de alto) y tiene un poco más de espacio de maletero (10 litros más, 530 litros en total). En contra de lo que se podía esperar, el aumento en las dimensiones también va unido a una reducción en el peso total del coche (unos 100 kilos menos) lo cual repercute necesariamente tanto en las prestaciones del coche como en su eficiencia. En su versión más eficiente, el 520d Efficient Dynamics, el consumo homologado del coche es de tan solo 3,9 litros.
Durante esta presentación hemos podido conocer la carrocería de tipo berlina, de momento la única que se ha presentado al mercado y que lleva a la venta en concesionarios desde el pasado día 11 de Febrero. A lo largo de 2017 llegarán el resto de variantes, empezando por el Touring (presentado en el Salón de Ginebra este mes de Marzo), y siguiendo con el GT, además de las versiones i Performance, “M”y M5, sobre las cuales recibiremos noticias muy pronto.
Conducción semiautónoma
Uno de los grandes saltos que se producen con este nuevo Serie 5 es lo que BMW vende como conducción semiautónoma, y que no es más que la conjunción de numerosos sistemas de asistencia a la conducción puestos en común durante un periodo máximo de 30 segundos. A partir de ese tiempo, el conductor debe retomar la conducción, con lo que se permite una pequeña liberación, pero no una retirada completa de la atención.
Como decimos, este sistema pone en común al control de velocidad activo, a la navegación, al sistema de reconocimiento de señales así como al asistente de dirección y al mantenimiento de carril para que el coche pueda mantenerse dentro de la trayectoria durante el tiempo que hemos indicado. Funciona hasta una velocidad de 210 km/h y es capaz de detener completamente el vehículo si detecta obstáculos o vehículos que se aproximen a un cruce.
Además de esto, la llave con pantalla que ya conocemos del Serie 7 permite que el coche entre o salga de una plaza de parking sin necesidad de que el conductor esté dentro.
Sobre todo, muy cómodo
Durante la presentación a la que pudimos asistir condujimos el 520d con cambio automático y las conclusiones de las que estamos seguros antes de probar a fondo el coche es que estamos ante un modelo mucho más cómodo que el Serie 5 anterior. Desde dentro se percibe una sensación más agradable, quizá por los centímetros que se han conseguido en plazas traseras y de altura libre al techo, y tanto la calidad de aislamiento como la mejora del chasis (con dirección integral incluida) hacen que el paso por curva sea más preciso y que se absorban todavía mejor las irregularidades del asfalto.
La caja de cambios ZF es una auténtica delicia y es capaz de ofrecerte una conducción eficiente al mismo tiempo que permite sacar el lado más animal del motor. Lo único, es que para realizar un buen control de la conducción deportiva hacen falta levas tras el volante, y nuestra unidad probada no las llevaba incorporadas.
En cuanto a dinámica, no podemos más que alabar el resultado conseguido por BMW, que no es otro que dar la comodidad de un Serie 7 casi con la misma agilidad de un Serie 3. Pronto probaremos el coche a fondo y os brindaremos todas las conclusiones que saquemos a este respecto.
Más Serie 7 que nunca
En esta séptima generación los cambios de diseño son muchos. La calandra del frontal es mucho más ancha y es activa, es decir, puede abrirse si necesita refrigerar el vano motor o cerrarse si por el contrario busca un mejor coeficiente aerodinámico (el cx es de 0,22). Destaca también por las nuevas ópticas LED (hay faros LED adaptativos opcionales con alcance de hasta 500 metros), los espectaculares “air breather” de los laterales y por tener una batalla sensiblemente más larga que en la generación anterior (ahora parece más que nunca un Serie 7).
En el interior, el aspecto general del salpicadero recuerda mucho al del X1 o el Serie 7 debido a la disposición de los elementos en forma de V. Se percibe una mejora notable de la calidad de los materiales y sobre todo una mejora en los aislamientos acústicos – gracias a la técnica de encapsulado del motor SYNTAK-.
En cuanto a los equipamientos, cambia la pantalla táctil de la consola central (10,25 pulgadas) y la disposición de todos los elementos de la interfaz, que pueden ordenarse libremente. También se ofrece un curioso sistema de control gestual que permite subir o bajar el volumen, hacer zoom en el mapa de navegación, cambiar de menú o pasar de canción con leves movimientos con los dedos. El sistema es capaz de distinguir el pulgar del dedo índice y asignar diferentes funciones a uno u otro, por lo que es necesario leer bien el manual de instrucciones y ponerlo en práctica unas cuantas veces hasta conseguir sacarle el máximo rendimiento.
En la unidad que pudimos probar también estaba instalado el sistema de carga inalámbrica del teléfono móvil y el nuevo Head-Up display de la marca, el cual presenta la información en alta resolución con un 70% más de visibilidad y ahora es a todo color. También hay otros detalles que hacen que el viaje a bordo del Serie 5 se parezca mucho más al del Serie 7, como por ejemplo el ajuste eléctrico del asiento mediante sensores táctiles o la función masaje gracias a las 20 cámaras de aire que hay en los asientos.
Cuatro motores y más versiones para 2017
Como hemos dicho, el nuevo Serie 5 está disponible desde el pasado mes de Febrero con cuatro motorizaciones, dos diésel (520d y 530d) y dos gasolina (530i y 540i), todas ellas con tracción trasera y con posibilidad de equipar el xDrive -con dirección integral-. Este sistema permite una mayor maniobrabilidad en ciudad gracias a que las ruedas traseras giran en el sentido contrario a las delanteras hasta una velocidad de 60 km/h y también una mayor capacidad dinámica por encima de esta velocidad.
El más pequeño de los diésel (520d, disponible desde 49.400 euros) es un cuatro cilindros asociado a una transmisión manual de seis marchas (el Steptronic de 8 es de serie en todos los motores, menos en éste que es opcional) y ofrece 190 cv de potencia a 4.000 vueltas. El par disponible es de 400 Nm entre 1.750 y 2.500 vueltas y tiene un consumo homologado de 4,1 litros (con caja automática es 4,0 litros y con xDrive 4,2). Por encima de este bloque se sitúa el seis cilindros que da lugar a la versión 530d (desde 61.900 euros), un 3.0 de 265 cv que genera 620 Nm de par y que va asociado siempre al Steptronic de 8 marchas. Su consumo es de 4,5 litros (4,7 con xDrive).
En lo que respecta a los motores de gasolina, las opciones son un motor de dos litros y cuatro cilindros (530i, desde 56.400 euros) con 252 cv de potencia y 350 Nm de par (1.450-4.800 vueltas) que consume 5,4 litros, o bien un tres litros de seis cilindros (540i, desde 67.500 euros) con 340 cv y 450 Nm de par con un consumo combinado de tan solo 6,5 litros.
Los niveles de acabado son tres (Sport, Luxury y M Sport) y en todas, salvo el 520d, el cambio de serie es el automático de convertidor de par de 8 relaciones, fabricado por ZF. Su funcionamiento es muy rápido y suave, aunque en las unidades que pudimos probar no contaba con levas tras el volante.
La gama se completará próximamente con la versión 530e i Performance, el 550i xDrive y, por supuesto, con la variante Efficient Dynamics del 520d (llegará este mes de Marzo), el modelo más ahorrador de la gama con un consumo homologado de 3,9 litros cada cien kilómetros.