El nuevo Gran Turismo estará disponible en todos los concesionarios a partir de junio. El diseño exterior del modelo A5 no tiene nada que envidiar a sus predecesores tal y como confirma la primera impresión, a menudo tan decisiva. "El diseño es el criterio de compra más importante en el caso de un coupé", explica Silke Hofer, Manager de Productos para el descendiente más joven de Audi.
Walter de Silva es responsable de las curvas laterales, del esbelto parabrisas y del techo "agazapado". "El A5 es el vehículo más atractivo que he diseñado hasta el momento", afirma seguro de sí mismo este diseñador italiano. Y apenas nadie puede contradecirle. Sólo que al ver la parte posterior uno pensaría que de Silva ha dedicado demasiado tiempo al estudio del coupé de la serie 3 de BMW.
Nuevo frontal
Los ingenieros han reconstruido por completo toda la parte frontal, el eje delantero se encuentra ahora más adelantado que en los modelos Audi anteriores. El corto voladizo y la amplia distancia entre ejes de 2,75 metros dotan al A5 de un aspecto alargado, confieren una gran seguridad sobre la carretera y un mayor espacio en el habitáculo.
El interior es tan deportivo como en el exterior. Las formas básicas son de sobra conocidas: instrumentos con forma de gota, consola central con una gran pantalla y sistema central de mando MMI (man-machine interface - interfaz hombre-máquina) en el reposabrazos. Por el contrario, el acabado de los detalles demuestra individualidad, por ejemplo, las teclas del MMI, tan elegantes en su curvatura. Los materiales empleados como el frío aluminio, las maderas nobles o el más fino lacado en negro ébano ofrecen un aspecto de gran calidad y acabado perfecto.
Confort para dos
Como en la práctica totalidad de los modelos coupé, sólo las plazas delanteras permiten disfrutar del confort. Los asientos de gran tamaño y acolchado firme ofrecen una gran estabilidad lateral y comodidad. La inclinación de la línea del techo del A5 conlleva una falta de espacio para la cabeza en los asientos traseros. El acceso a las plazas posteriores es dificultoso a pesar de sus grandes puertas.
Por regla general, el comprador típico de un coupé viaja habitualmente con un solo acompañante, pudiendo disfrutar del espacio extra que supone la bandeja adicional del fondo. En caso necesario, los asientos traseros pueden abatirse ampliando el ya generoso maletero de 445 litros de volumen. Esto convierte al A5 en un vehículo perfectamente adaptado a los viajes largos ya que incluso da cabida sin problemas a una bolsa de golf.
Variante deportiva
Audi presentó simultáneamente el modelo A5 y la variante deportiva S5, de la cual dispusimos para nuestra primera salida. Pulsando el botón de arranque se pone en funcionamiento el motor V8 de 4,2 litros de cilindrada, fabricado en la localidad húngara de Györ. Un agradable gruñido saluda al conductor para pasar a continuación a una marcha en vacío tranquila.
Sin embargo, esta tranquilidad no es duradera. Una suave presión sobre el acelerador basta para despertar a este motor, al que le gustan las revoluciones elevadas. 354 CV esperan a ser desatados. El S5 arranca de forma espontánea, aumenta obedientemente su régimen de giro y, al alcanzar las 3.500 revoluciones, transmite sus 440 Nm a los neumáticos de 245 para acelerar de 0 a 100 en tan sólo 5,1 segundos.
quattro es estándar
Para dominar toda la fuerza que es capaz de desarrollar, el S5 viene equipado de serie con el sistema quattro de tracción a las cuatro ruedas. La distribución tiene una relación de 40:60 en favor del eje posterior. No obstante, el S5 conserva el comportamiento en la conducción de un vehículo de tracción delantera, típico de Audi: en la dirección se notan los ligeros efectos de la tracción y tiende al subviraje. El sistema ESP viene a compensar todo esto, con su funcionamiento perfecto e inadvertido, desactivable a dos niveles.
El S5 negocia las curvas más estrechas como si circularán sobre vías y su dirección suave y directa permite las maniobras más precisas. Con tanta o más precisión realiza su trabajo el cambio manual de seis marchas. No obstante, este cambio de marchas es ligeramente más rígido de lo que nos tiene habituados Audi. En ocasiones es preciso empujar un poco más.
Una mera cuestión de gusto
Decidir si el chasis deportivo estándar es demasiado duro o perfectamente agradable depende de los gustos del usuario. El hecho es que el S5 no compensa por completo las irregularidades del piso, dejando parte de esta labor a los discos intervertebrales de los ocupantes. Por otra parte, el ajuste del chasis es perfectamente adecuado al carácter dinámico de este vehículo de Ingolstadt.
Tras una prueba de conducción ciertamente rápida, con un consumo medio en torno a los 16 litros, cambiamos de vehículo. Pasamos del modelo S5 al A5 3.0 TDI "normal". Su exterior no muestra apenas cambios salvo la diferente rejilla del ventilador, sólo dos en lugar de cuatro tubos de escape y la ausencia de los faldones laterales.
Motor diesel deportivo
Con sus 240 CV, el motor diesel de seis cilindros muestra asimismo un carácter deportivo. Su potentísimo par motor, con un máximo de 500 Nm, es impresionante. Dentro del rango entre 1.500 y 3.000 revoluciones, éste se transmite al cigüeñal, catapultando al A5 de 0 a 100 km/h en tan sólo 5,9 segundos. Como en el caso del S5, el motor diesel detiene su evolución al alcanzar los 250 km/h. El ordenador de a bordo calcula un consumo medio de unos diez litros.
A pesar de que el A5 diesel dispone asimismo de sistema de tracción quattro, su motor desarrolla en las ruedas delanteras una fuerza notablemente mayor. Aunque el motor pesa sólo en torno a 50 kilos más que el motor V8 del S5, el mayor par motor supone un esfuerzo mayor para los neumáticos. No obstante, todo se mantiene óptimamente dentro de lo controlable.
Motores eficientes
Además de los dos motores mencionados, Audi ofrece el A5 equipado con el conocido 2.7 TDI (190 CV) y dos motores de gasolina. Audi recomienda ambos motores de inyección directa debido a su eficiencia en el consumo de combustible. El motor 1.8 TFSI de 170 CV de potencia, con carga por compresor y turbo compresor (a partir de otoño) se encuentra satisfecho con tan sólo siete litros a los 100 kilómetros. Por encima de éste se sitúa el potente motor 3.2 FSI de seis cilindros, con 265 CV y un consumo medio de 8,7 litros.
Los futuros conductores del A5 deberán desembolsar entre 33.000 y 45.000 euros, llegando a los 55.900 euros para el modelo S5. El equipamiento de serie es aceptable, ahora bien, es posible mejorarlo notablemente mediante una gran diversidad de extras sujetos a recargo. La oferta incluye, además de elementos estándar tales como los sensores de aparcamiento y el climatizador automático multizona, un techo panorámico, el sistema de apertura sin llave y un sistema de sonido de Bang+Olufsen entre otros.
En resumen
El modelo A5 no tiene nada que envidiar a sus legendarios predecesores. Las prestaciones de este gran coupé son extraordinarias y sus motores económicos aumentan adicionalmente el placer. Al observar su parte trasera inspirada en otros modelos, el Audi supone asimismo un gran éxito y su banda de faros diurnos compuestos por LEDs lo convierte casi en un pequeño R8 al observarlo a través del espejo retrovisor. Una serie de pequeños detalles útiles completan el A5: su innovadora llave sin dientes guarda datos tan importantes como el kilometraje para facilitar la recepción para el servicio técnico en el taller.
