Su principal novedad es que el motor va situado en la parte posterior y por consiguiente el espacio, las sensaciones y el diseño son ahora diferentes. Volkswagen ha presentado en el Salón del Automóvil de Frankfurt otro proyecto de futuro. El nuevo Up! es un concepto fresco y atrevido en el que la idea de un compacto da mucha preferencia a la habitabilidad y al rendimiento ecológico. Se ha pensado en un coche de bajo consumo, que recupere el concepto de motor trasero y que exprima al máximo todo lo que puede dar de sí un coche pequeño.
En comparación con el resto del coche, el ancho de vías es bastante generoso (1,42m) para su tamaño. Las ruedas (en un principio serán de 15”) están dispuestas hacia afuera en la zona de los parachoques y reducen los salientes de la carrocería al mínimo.
No tiene una parrilla delantera clásica, sino que va más en el camino del Beetle. El logo de Volkswagen, el parachoques liso o los detalles cromados le dan la originalidad de un diseño exclusivo. Lo más atractivo visualmente son las llantas de diseño radial y el tamaño de las puertas y las ventanas laterales.
Tecnología intuitiva en un espacio muy aprovechable
La principal explicación de por qué se ha situado el motor en la parte trasera es porque se ha dado prioridad al diseño. Todos los asientos, salvo el del piloto, tienen la posibilidad de ser abatidos e incluso desmontados. Gracias a la logística de las plazas se ha conseguido ganar, además de espacio en el maletero (frontal), un hueco extra en la parte trasera (la del propulsor).
Pero lo mejor sin duda es que los asientos del VW Up! son, además de ergonómicos, parcialmente desinflables. Existe la posibilidad de extraer o introducir aire a través de una válvula mejorando la adaptación a los diferentes pasajeros que hagan uso de ellos.
El interior del Up! contará con pantalla táctil y sensores de proximidad para el control del navegador, además de ordenador de a bordo y climatizador. El manejo de las funciones puede hacerse a través de este monitor, que reacciona a los movimientos de las manos, tanto de conductor como de acompañante.
El acceso a la mayor parte de los menús podrá hacerse con un simple acercamiento gracias a un display giratorio compuesto por las funciones principales del sistema (navegación, teléfono, películas, radio, etc).
Habrá dos pantallas centrales de 7 “y una de ellas proporcionará información al conductor sobre consumos, distancias e incluso niveles de emisión de CO2.
El jefe de diseño de Volkswagen, Klaus Bischoff, ha explicado que la prioridad a la hora de crear el interior ha sido la de ofrecer un espacio intuitivo en el que el hombre y la máquina puedan interactuar a la perfección.