A nivel mecánico, llega el motor 1.5 TSI Evo que genera 150 CV y que, más adelante, animará a la variante Bluemotion con una función a vela que apagará totalmente el motor. Ahora que estamos en plena celebración de los 40 años de la variante GTI, Volkswagen ha decidido dar el paso y actualizar el Golf. Una restyling característico de cada modelo que llega a mitad de su vida comercial. En este caso, el compacto alemán, el ‘rey’ de su segmentocomo muchos le denominan, se renueva con la intención de ampliar su mandato hasta que aterrice su octava generación, previsiblemente, en un par de años.
Diseño continuista
Como es tradición en los modelos alemanes, en general, y en el Golf en particular, esta actualización no supone una revolución estética externa. Nuevos parachoques delantero y trasero, la supresión del antiestético radar de proximidad en la parte baja de la parrilla –que ahora pasa a estar ubicado tras el logo-, nuevos juegos de llantas, más colores de carrocería o unos nuevos faros delanteros y traseros, son sus principales características.
Apartado este, el de la iluminación, que merece una mención aparte. Y es que el nuevo Golf no solo modifica el diseño de las luces diurnas LED –de serie en toda la gama- sino que estas ahora integran los propios intermitentes. Además, la tecnología Full LED pasa a estar presente en los faros delanteros, en detrimento de los anteriores Xenón, y en los traseros, donde igualmente se podrán equipar, opcionalmente, los intermitentes dinámicos. Cambios que, como es obvio, estarán disponibles tanto en las versiones de 3 y 5 puertas como en el familiar –Variant-, mientras que las versiones GTI y GTE –el híbrido enchufable que nosotros probamos hace unas semanas- contarán con detalles específicos en rojo y azul, respectivamente.
Era digital
El habitáculo, por su parte, es el que más novedades incorpora. En este sentido, el Golf se actualiza casi por completo. Un hecho que se observa, primero, en el cuadro de instrumentos digital, heredado del Passat, que sustituye los típicos relojes por una pantalla de 12,3 pulgadas totalmente personalizable y en la que poder visualizar todas las funciones del coche, incluida la navegación.
No obstante, la pantalla que acaparará todas las miradas será la que presida la consola central. Según la marca, todas las que el anterior Golf tenía disponibles, crecen ligeramente, siendo la más llamativa la que se posicionará como el tope de gama. Se trata de una enorme pantalla táctil con protección de cristal, de 9,2 pulgadas. Entre sus novedades, además de incluir la última versión del sistema multimedia con nuevas aplicaciones y compatible con todos los Smartphone del mercado, ofrece una función inédita en su segmento: el control gestual. Así es, al igual que los Serie 5 y 7 de BMW, el nuevo Golf permite a su conductor cambiar de emisora o de menú con el simple movimiento de su mano.
Entre otras características que muestra la digitalización del modelo están, por ejemplo, el uso de las llaves inteligentes que memoriza ajustes de cada usuario tales como la iluminación ambiente, la climatización, la regulación del asiento, los retrovisores, el control de velocidad de crucero adaptativo o el asistente de carril. Y ya que mencionamos los asistentes, el compacto equipa importantes mejoras como es la integración del asistente de conducción en atascos, el control activo de asistente de carril, el Emergency Assist, con el que el coche es capaz de pararse si nota que el conductor no reacciona como es debido, el Trailer Assist o la frenada de emergencia en ciudad con detección de peatones.
Nuevo motor
En el apartado mecánico, la novedad más significativa es la llegada del nuevo bloque de gasolina 1.5 TSI Evo de 150 CV con desconexión de cilindros que llega para sustituir al 1.4 TSI de la misma potencia. Propulsor que también servirá para animar la futura versión Bluemotion, que ofrecerá una potencia menor, 131 CV, y que dispondrá de un modo de conducción a vela totalmente nuevo, ya que en lugar de colocar la caja de cambios en posición neutral, apagará por completo el motor cuando el conductor deje de acelerar.
Por lo demás, el resto de variaciones mecánicas se centran en el aumento de potencia de las versiones GTI y GTI Performance, que pasan de 210 a 220 y de 230 a 245 CV, respectivamente. Sin olvidar que Volkswagen elimina ya de la gama la caja de cambios automática DSG de seis relaciones en detrimento de una más eficiente de siete, que antes únicamente estaba disponible para algunas motorizaciones.
Con todo, la gama de este Golf todavía no se ha configurado pero todo hace indicar que mantendrá la estructura comercial, con los acabados disponibles hasta ahora, Edition, Advanced y Sport, mientras que sus precios subirían ligeramente como consecuencia de un mayor equipamiento de serie.