Los SUV continúan con su imparable escalada. Un contexto que mantiene en alerta a cada una de las marcas que cuenta con un modelo de estas características y que, además, pretende situarse entre los puestos de cabeza de este segmento. Uno de los pesos pesados es, sin lugar a dudas, el Toyota RAV4, el cual, de cara a afrontar el 2018 con todas las garantías, acaba de anunciar ciertas mejoras en su gama.
Todo al negro
Como suele ser habitual en este tipo de actualizaciones, uno de los aspectos que suele retocarse es el del diseño. Aquí, el todocamino japonés enfatiza su angulosa imagen con la llegada del denominado Pack Black, el cual añade elementos en negro a lo largo de la carrocería tales como los protectores inferiores y las carcasas de los retrovisores o las llantas específicas de 18 pulgadas. Este Pack Black solo podrá asociarse con los RAV4 que equipen el acabado Feel.
Igualmente, el color de carrocería Rojo Burdeos se sustituye por otro más claro, el Rojo Tokio que es el mismo que ya montan otros hermanos de gama como el Yaris, Auris, Verso o Avensis.
Sin cambios mecánicos
Donde no se anuncian novedades es bajo el capó, punta angular del éxito del modelo. Así, el RAV4 2018, mantiene las mismas versiones que hasta ahora, es decir, un gasolina atmosférico de 2.0 litros y 150 CV, un turbodiésel, también de 2.0 litros y 150 CV y la opción más demandada por los consumidores (acumula el 90% de las compras), el RAV4 Hybrid, con una potencia de 197 CV, la etiqueta ECO de la DGT (le habilita para entrar en las urbes en días de restricciones) y la posibilidad de circular en modo 100% eléctrico.
Tampoco aparecen variaciones en lo que a tren de rodaje se refiere. Así, la variante híbrida es la única que puede combinarse con ambos sistemas de tracción, 4x2 o 4x4, mientras que el diésel solo puede asociarse con el primero y el gasolina, con el segundo.
En cuanto a los equipamientos, se mantienen los cuatro niveles: Business —enfocado a flotas—, Advance, Feel! y Executive. La gran novedad es que el techo solar pasa a ser una opción dentro del acabado Feel! cuando antes ni siquiera se contemplaba. Con todo, las unidades del RAV4 2018 ya están disponibles en la red de concesionarios d la marca por un precio que parte de los 25.900 euros o desde 218 euros al mes con el sistema Pay per Drive —financiación de pago por uso— según las condiciones especiales que ofrece Toyota.