Gracias a ello, el consumo medio se rebaja hasta los 1,4 l/100 km. Estará disponible a finales de año. Como ya ocurrió en la generación precedente, el nuevo Prius, el cuarto de toda la historia, también tendrá su variante híbrida enchufable, aunque habrá que esperar hasta finales de año para poder empezar a verlo rodar.
En el momento en el que lo haga, será fácilmente reconocible pues la marca ha querido diferenciarlo del Prius ‘normal’ acercando su estética un poco más al Mirai e introduciendo elementos como unos faros LED de efecto diamante o una zaga que incluye una tira de LED que delimita la anchura del vehículo. También estrena tecnologías innovadoras como el primer techo solar con carga, un sistema de climatización mediante inyección de gas o un aire acondicionado completamente eléctrico.
Variaciones mecánicas
Pero los grandes cambios se centran en la parte mecánica. Bien es cierto que su motor principal seguirá siendo el 1.8 VVTi de cuatro cilindros y ciclo Atkinson que se combinará con otro eléctrico que mantendrá la posibilidad de impulsar al vehículo de forma independiente, aunque ahora lo podrá hacer hasta un máximo de 50 kilómetros. Una autonomía que, en comparación con su predecesor supone ofrecer el doble de distancia.
Un aumento del recorrido que se consigue gracias al montaje de una batería de ión-litio con una capacidad de 8,8 kWh que puede cargarse si se conecta a una toma de corriente convencional, necesitando en ese caso algo menos de 5 horas para obtener toda la carga, tiempo que se puede recortar hasta las 2,3 horas si se enchufa a una red de 230 V.
Decir que, además, este Prius Plug-in puede alcanzar los 135 km/h de velocidad cuando elegimos el modo de conducción EV. En lo que a consumo se refiere, este baja hasta los 1,4 l/100 km con unas emisiones de CO2 de solo 32 g/km, lo que implica lograr una autonomía de 965 kilómetros.