El diseño, sin embargo, es ahora más deportivo y pone en evidencia sus múltiples cualidades En el recién llegado, hay detalles exteriores que denotan claramente su identidad. El junquillo de la parrilla de radiadores frontal y trasero, el bandón de la placa de matrícula trasera y las barras de techo en cromo satinado, le confieren un aire más deportivo y elegante.
Las lunas traseras sobretintadas, las llantas específicas de 10 brazos y el techo abierto panorámico completan el nivel de equipamiento Dynamique, del que toma su base de equipamiento. Además del sistema electrónico de estabilidad ESP, del regulador-limitador de velocidad y de la Radio 4 x 15W mono CD, esta nueva versión S-Line incorpora el climatizador de regulación automática, el encendido automático de luces y limpiaparabrisas con sensor de lluvia, bandejas tipo aviación en el respaldo de los asientos delanteros y opcionalmente, radar de proximidad trasero.
Como tonalidad específica se ha retenido para los Renault Mégane Grand Tour S-Line el color Azul Amanecer y en su interior dispone de una armonía carbón oscuro con tapicería específica.
El abanico de motorizaciones sobre los que se ofrece esta nueva versión contempla un propulsor de gasolina 1.6 16v con 110 CV y en ciclo Diesel, el motor 1.5 dCi de 105 CV, 1.9 dCi de 130 CV y el motor de la Alianza 2.0 dCi 16v de 150 CV.
Los precios y versiones en los que se ofrece el recién llegado Mégane van desde los 19.500 del 1.6 (con 110 cv), hasta los 24.100 del 2.0 dCi (de 150cv). Los motores intermedios serán el 1.5 dCi de 105 cv (aa un precio de 21.450 euros) y el 1.9 dCi de 130 cv (por 22.850 euros).
Sobre estos precios Renault aplica un eco ahorro en función del menor impuesto de matriculación que le correspondería a partir del 1º de enero de 2008, por el que se fijan cuatro escalones en función del nivel de emisiones de CO2.