El Cayenne, sin lugar a dudas, se ha convertido en el salvoconducto de Porsche. Desde su lanzamiento en 2002, y pese a las críticas iniciales de gran parte de sus entusiastas, el todocamino de lujo alemán ha logrado cautivar el corazón de 760.000 conductores en todo el mundo… que se dice pronto. Unas cifras que confirman no solo la fama de este tipo de vehículos, sino en particular del icono de Stuttgart, el cual, sirvió de pistoletazo de salida para que la marca se metiera de lleno en otros terrenos, dando así lugar a los Panamera (target=undefined), Macany más recientemente Panamera Sport Turismo.
No hay dos sin tres
Pero centrémonos en el protagonista de estas líneas, un vehículo que fue presentado por todo lo alto en el Museo de Porsche. Un coche que, como suele ocurrir con las marcas alemanas, parece que no ha cambiado cuando en realidad cambia todo. Y esta tercera generación es un fiel reflejo de ello.
En este sentido, quien observe el coche por delante, apenas notará cambios. Si bien todos los Cayenne saldrán de fábrica con faros LED, en opción, el SUV Premium podrá elegirse con otros LED Adaptativos (Porsche Dynamic Light System) e incluso con los PDLS Plus, compuestos por 84 diodos que funcionan de forma individual para modificar la potencia de iluminación y su distribución. La línea lateral también es continuista, aunque con el metro en mano se comprueba que su longitud ha aumentado ligeramente. En concreto hablamos de 65 milímetros, llegando así a los 4,92 metros. Cota a la que acompañan una altura 9 milímetros inferior 1,69 y una anchura 41 milímetros mayor.
Sensación que parece ser incluso mayor gracias a los nuevos grupos ópticos que cruzan todo el portón de un lado a otro. Una solución que Porsche acaba de emplear en el Panamera Sport Turismo y que deriva de la utilizada en la familia Nueveonce. El conjunto externo se completa con una paleta de colores más extensa y con llantas de aleación que van de las 19 a las 21 pulgadas.
Interior de familia
Dando el salto al habitáculo, lo primero que se comprueba es un aire familiar. Sí, el todocamino alemán se ha basado en el comentado Panamera para dar forma a su salpicadero. De esta forma, la consola central está presidida por una enorme pantalla de 12,3 pulgadas que logra eliminar gran parte de la botonera de su predecesor y que se complementa con las otras dos de 7 pulgadas situadas en el cuadro de instrumentos.
Comandos que también parecen haber desaparecido del túnel central en favor de botones capacitivos que le confieren un aspecto más limpio. Todo ello envuelto en una atmósfera de lujo y con detalles excelentes, características a las que acompaña, además, una habitabilidad encomiable, con una fila de asientos trasera muy amplia y un maletero que aumenta su capacidad en 100 litros, hasta los 770 litros.
Desde este preciso momento, ya se pueden reservar los nuevos Cayenne. Aunque eso sí, únicamente con los motores de gasolina 3.0 V6 de 340 CV y el 2.9 V6 biturbo de 440 CV. El primero da nombre a la versión Cayenne mientras que el segundo se denomina Cayenne S y en comparación con sus predecesores, hay que resaltar que son 40 y 20 CV más potentes, respectivamente. Más adelante, llegarán las versiones Diésel, Turbo y la más que probable híbrida enchufable, con dos niveles de potencia como ocurre actualmente en el Panamera.
En cualquier terreno
La tercera generación del Cayenne se sostiene sobre la nueva plataforma MLB Evo del Grupo Volkswagen, lo que le ha permitido reducir ligeramente su peso frente a la báscula. Así, las versiones básicas pasan de los 2.040 a los 1.985 kilos. Una circunstancia que unida a las mejoras dinámicas introducidas, convertirán al Cayenne en todo un traza curvas.
Mejoras que llegan de la mano de la dirección activa en el eje trasero (primera vez en el modelo), mejorando el paso por curva y la maniobrabilidad, del equipo de frenos PSCB con discos de acero recubiertos de carburo de tungsteno o el opcional con discos carbocerámicos (PCCB), de los diferentes tipos de suspensión e incluso de las nuevas barras estabilizadoras activas que compensan el balanceo (PDCC) y que funcionan gracias al montaje de una batería de 48 V. Todo ello sin olvidar los diferentes modos de conducción, entre los que se incluyen cuatro específicos para circular por fuera del asfalto: Gravel, Mud, Sand y Rocks; lugar en el que como comprobamos hace escasos meses, el Cayenne se mueve como pez en el agua.
Porsche ya ha facilitado los precios de su tercer Cayenne, el cual, estará disponible desde 87.579 € para el más básico, y desde 107.127 € para el Cayenne S. Las primeras entregas se realizarán el 4 de diciembre.
