Recurre a la tecnología HYbrid 4 (híbrido y enchufable, lo que permite tener tracción integral) y lo verdaderamente inédito se encuentra en la construcción empleada en su fabricación, con materiales más ligeros. El Exalt adelanta la línea que tendrá la próxima berlina, que vendría a situarse por encima del 508. Ahora que ya sabemos cómo es el renovado 508, Peugeot vuelve a la carga y nos muestra por dónde pueden ir los tiros a la hora de lanzar un sustituto de este modelo o posicionar otro por encima. El Exalt, el modelo del que estamos hablando, se trata de una evolución del que ya vimos hace un tiempo aunque presenta novedades de cara al Salón de París, la muestra de casa.
Los 4,70 metros de largo lucen ahora un aspecto diferente al usar materiales novedosos. La carrocería en acero en bruto está esculpida manualmente por un maestro chapista, algo que contrasta con las llantas de 20 pulgadas y la zaga, donde se ha usado el tejido bautizado como Shark Skin, un compuesto granulado que mejora sensiblemente la capacidad aerodinámica para reducir el consumo.
En el habitáculo asimismo se ha instalado un tratamiento de aire especial que, cuando está en parado y no hay nadie en él, purifica las superficies mediante la difusión de agentes bactericidas y fungicidas.
Curioso detalle
El Exalt guarda una sorpresa en la zaga y es que a través del portón eléctrico se tiene acceso a un patinete eléctrico que está siempre disponible para pequeños desplazamientos por la ciudad. “Peugeot es un actor único en el mercado con sus gamas de dos, tres y cuatro ruedas. La incorporación de un patinete eléctrico al concept Exalt demuestra la capacidad de la marca de proporcionar soluciones integradas e innovadoras para la movilidad de los últimos kilómetros”, afirma Xabier Peugeot, director de producto de la compañía gala.
Dos por uno
La opción elegida para impulsar al Exalt es la misma que se conoce en modelos que ya se fabrican, como el 3008 o el RXH, es decir, la de emplear un bloque tradicional asociado con uno eléctrico. Frente a estos dos coches que emplean un HDI, el Exalt lleva un gasolina 1.6 THP de 270 caballos (instalado en el eje delantero) que trabaja con uno eléctrico de unos 80 caballos que va colocado en el tren trasero. Esta particular disposición ayuda a que el prototipo tenga tracción integral ya que un motor mueve sólo las ruedas delanteras y el otro las traseras (la potencia conjunta es de 340 caballos). Asimismo, el eléctrico, cuando dispone de carga suficiente, es capaz de mover el sólo al coche.