Lo estrenó el RCZ (más…) y era cuestión de tiempo que este brillante motor fuera incorporándose poco a poco al resto de la familia de modelos de Peugeot. Ahora le toca el turno al 308 descapotable, que hasta la fecha contaba con las mecánicas 1.6 de 120 CV, 1.6 THP de 156 CV y 1.6 HDI de 112, 2.0 HDI de 140 y 2.0 HDI de 163 CV. Este bloque motor de 1,6 litros de sobra conocido, dispone de turbocompresor de doble entrada, inyección directa de gasolina y sistema de alzado variable de válvulas.
Asociado obligatoriamente a un cambio manual de 6 velocidades, ofrece un par máximo de 275 Nm. constantes entre las 1.700 y las 4.500 revoluciones por minuto y una potencia de 200 CV. Con esta motorización, las prestaciones mejoran notablemente respecto a la variante de 156 CV, parando el crono en la maniobra del 0 a 100 en 8,3 segundos (1,3 segundos más rápido) y alcanzando una velocidad punta de 240 Km/h (frente a 215).
El consumo medio homologado es de 7 litros a los 100, con unas emisiones de CO2 de 162 gramos por kilómetro. Hay que recordar que este modelo disponible de un techo duro que se pliega y despliega automáticamente en 20 segundos. La capacidad del maletero es de 403 litros, cifra que disminuye hasta los 226 circulamos descapotados.
Obligatoriamente está ligado al nivel de acabado tope de gama que incluye, entre otros muchos elementos, llantas de aleación de 18 pulgadas y asientos de cuero. El 308 CC con este propulsor se convierte en la versión más potente de la gama pero no en la más cara, ya que el diésel de 163 CV (que sólo está disponible con cambio automático) cuesta 36.280 €.