No contentos con esto, los de Rüsselsheim vuelven con un nuevo y revolucionario dispositivo que mantiene conectadas las largas siempre por defecto. Hace ya diez años que Opel presume de ser el primer fabricante en incorporar un sistema de iluminación adaptativa en su gama. Ya casi no lo recordamos, pero los primeros que utilizaron la tecnología AFL fueron el Vectra y el Signum, modelos con los que por primera vez se podía controlar el haz de luz en maniobras, en curvas e incluso las luces de largo alcance de forma automática. No obstante, no fue hasta 2008 cuando los de Rüsselsheim perfeccionaron esta tecnología para el Opel Insignia dotándola de iluminación por LED y hasta ocho funciones adicionales.
Ahora, los alemanes presentan una nueva propuesta con la que pretenden volver a revolucionar el sector de la iluminación. Se trata, en resumidas cuentas, de utilizar por defecto la iluminación de largo alcance para que la conducción nocturna sea lo más segura posible. El invento en cuestión ha sido bautizado como Matrix y ya está siendo utilizado en prototipos de la marca para su posible implantación en los próximos años.
¿Cómo funciona?
El sistema Matrix se basa en la información recogida por la cámara frontal del coche, el Opel Eye, que va colocado en la parte posterior del retrovisor interior. Cuando los sensores de esta cámara detectan luz procedente de otros vehículos (ya sea en nuestro sentido o en el contrario), nuestro coche será capaz de atenuar la iluminación exclusivamente del área que puede provocar el deslumbramiento. Así, el resto de la carretera puede permanecer iluminado con las luces de largo alcance con la máxima seguridad.
El secreto de este sistema se basa en la tecnología LED. Cada uno de los faros cuenta con cuatro segmentos de luz, que a su vez están divididos en otras cuatro fuentes de iluminación que se encienden o apagan de forma individual, produciendo dieciséis combinaciones de iluminación diferentes por cada faro. En total, son 256 posibilidades para que el haz de luz cubra la mayor parte de nuestro campo de visión.
Por último, este nuevo sistema también ha permitido a Opel dibujar su característico rayo con las luces de cruce y no sólo con las diurnas como ocurría hasta ahora. Esto se consiguió combinando las dos funciones, de cruce y cortas, en una línea compartida de siete elementos luminosos.