Ese concept car se llamaba Qazana y contaba con elementos prácticos como la apertura de puertas traseras en el sentido inverso al habitual o un túnel central flotante (como el de gran parte de los modelos de Volvo). En aquel prototipo la capacidad era para cuatro ocupantes y su aspecto exterior era bastante agresivo: llantas de 20”, pasos de rueda gigantes y unos grupos ópticos sobresalientes. Algunos de esos rasgos “premium” se han conservado en el modelo definitivo… ADN Nissan
... y es que salta a la vista que Nissan ha apostado por una visión más lujosa en la plataforma B de la alianza Renault-Nissan, que es en la que se basa este modelo. De hecho, al pequeño SUV de la marca se le han dado algunas pinceladas de modelos Inifiniti (fíjense sobre todo en las formas del capó, la caída de la trasera y los pronunciados pasos de rueda) y de modelos deportivos de Nissan como el 370Z, del cual también ha tomado referencias como los faros traseros con forma de “boomerang”.
El Juke mide 4,13 metros, 1,56 de alto y 1,76 de ancho con una distancia entre ejes de 2.530 milímetros. Es, por tanto, una alternativa dentro de un segmento poco frecuentado por las marcas. El más parecido será el Mitsubishi ASX, al cual le falta poco tiempo para ser presentado, aunque existen versiones en el mercado como el Fiat Sedici 4X4, el Focus X-Road o el Skoda Yeti que podrían robarle algo de protagonismo. A juzgar por sus medidas y su aspecto, el Juke es un coche relativamente válido para circular fuera del asfalto con soltura. La altura libre al suelo es generosa, así como el tamaño de los neumáticos o la dimensión de los pasos de rueda.
Mecánicas
Entre las tres mecánicas que se ofrecerán para el Juke, hay dos conocidas y sólo una completamente nueva que ha aplicado la técnica más de moda entre los ingenieros, el “downsizing”. Se trata de un bloque 1.6i con inyección directa al que se le ha añadido un turbocompresor para alcanzar 190 cv y cuyo control de apertura y cierre de las válvulas se realiza ahora en las carreras de admisión y escape. De esta forma, se pueden conseguir unas prestaciones “equivalentes” a las de un motor 2.5, pero con un consumo realmente inferior, según las estimaciones de la propia marca.
En cuanto a la tracción, sólo este nuevo motor podrá equiparse con sistema 4WD. Es un sistema interesante porque reparte par entre ambos ejes (pudiendo llegar al 50:50) pero también entre las ruedas del eje trasero para controlar el subviraje. Hasta ahora este tipo de reparto de tracción sólo estaba disponible en modelos mucho más caros, como el BMW X6.
Los dos propulsores restantes son un 1.5 dCi de 110 cv y un 1.6i de 116 cv. Todos cumplen con la normativa EuroV y ya han sido montados previamente en modelos de Nissan como el Note o el Qashqai.
Equipamientos
Aunque el Juke sea un modelo totalmente nuevo, Nissan seguirá usando los clásicos niveles de equipamiento – Visia, Acenta y Tekna -. No se detalla por el momento qué cosas incluirá cada uno, pero como adelanto Nissan asegura que en el Juke se podrá equipar cámara de visión trasera, llave inteligente o tapicería de cuero. En un entorno que rompe bastante con lo que conocíamos de Nissan, lo realmente interesante en el Juke es que el conductor tendrá la opción de seleccionar diferentes modos de conducción a través del Dynamic Control System. Parámetros como la respuesta del acelerador, los límites de las marchas en el cambio automático o la disponibilidad de par cambiarán según elijamos los modos Normal, Sport y Eco. Además, y de igual forma se pueden controlar otras funciones del coche como el climatizador o los controles de audio.