Mientras que por fuera la única novedad en el Countryman es la llegada de dos nuevos colores a elegir para la carrocería -rojo "Blazing Red" y el "Brilliant Cooper", ambos metalizados-. Dentro estrena una instrumentación más fácil de leer, con un velocímetro central rediseñado, al igual que los conductos de aire. Los anillos que rodean a estos elementos pueden ir ahora en negro satinado o, con el correspondiente paquete interior, cromados. Los elevalunas pasan a estar en los reposabrazos de las puertas, en vez de en la parte inferior de la consola central. Esto permite ganar espacio para dejar objetos en su anterior ubicación. El conductor también encontrará en los apoyabrazos todo un panel de control, con los botones para subir y bajar las ventanillas -permitiendo desactivar los elevalunas traseros- y para la regulación eléctrica de los retrovisores. Gracias a que la banqueta trasera pasa a ser corrida, el nuevo Countryman obtendrá la homologación para cinco ocupantes. Opcionalmente, seguirá pudiéndose solicitar con asientos individuales, sin coste adicional.
El nuevo Countryman contará con tres motores diésel y tres gasolina, de entre 90 y 184 CV, junto a la edición John Cooper Works, de 218 CV. En éste último, la tracción total ALL4 de Mini es de serie, mientras que en los Cooper S, Cooper SD y Cooper D es opcional. Todas las versiones con cambio manual cumplirán la futura normativa Euro 6 de emisiones, de obligado cumplimiento para los fabricantes a partir de 2014. Por su parte, la caja de cambios automática de seis velocidades puede pedirse para todos los Countryman, excepto para el One D. El Countryman revisado sale a la venta este mismo mes.