Además del nuevo diseño y de las mejoras de equipamiento, contará con dos potentísimos motores de gasolina además de otras dos versiones firmadas por el departamento AMG. De momento no hay noticias acerca de que Mercedes esté preparando una variante descapotable de su súper deportivo, el AMG GT, pero lo cierto es que la marca alemana cuenta con un modelo que bien podría suplir dicha carencia como es este SL. Sí, en esencia no es un AMG pero gracias a esta última actualización a la que ha sido sometida, el roadster biplaza bien podría pasar como alternativa al deportivo de altas prestaciones.
Y es que Mercedes ha querido acercar ambos modelos al dotar al descapotable que ocupa estas líneas de una apariencia muy similar a la del AMG GT. Desde su frontal, que es una copia del modelo comentado, hasta la zaga, en donde se incluye un gran difusor que le ayudará a pegarse al suelo, o unos nuevos faros en color rojo.
El habitáculo, totalmente nuevo
No obstante, el habitáculo es el que más cambios ha sufrido con respecto a su predecesor. Además de haber integrado la fibra de carbono como uno de los elementos principales, el SL ahora posee con una nueva consola central presidida por una gran pantalla, nuevos tapizados en cuero Nappa, mejores sistemas de navegación, conectividad de última generación... Mientras que algunos de los mandos principales, como el que controla los modos de conducción, también han sido revisados y muchos se han agrupado para ser más fáciles de ver por el conductor.
Todo ello sin olvidar que se trata de un descapotable biplaza que cuenta con un techo rígido de accionamiento eléctrico, el cual, podrá ofrecer el Magic Sky Control, un sistema que permite variar la opacidad del cristal que nos resguarda del sol.
Pocos, pero bien escogidos
A nivel mecánico, el descapotable alemán seguirá apostando por una gama reducida pero que promete emociones fuertes. En este sentido estará disponible con dos motores de gasolina, un atmosférico V6 de 3.0 litros que entrega 333 CV (SL 400) y otro biturbo V8 de 4.7 litros que eroga nada menos que 435 CV (SL 500). Ambos están acoplados a una caja de cambios automática de 9 velocidades 9G-Tronic.
Por encima de ellos estarán las dos versiones más deportivas, firmadas por AMG, como son el SL 63 AMG, con motor 5.5 V8 biturbo de 585 CV, y SL 65 AMG, bloque 6.0 V12 biturbo de 630 CV.
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