El Mercedes Clase S ya tenía dos híbridos en su gama: los S 300 y S 400 Hybrid se presentaron cuando apareció la nueva generación de esta berlina de lujo. Sin embargo, la comercialización de un Clase S enchufable es algo inédito.
Esta versión del Clase S combina un motor 3.0 V6 de gasolina de 333 CV y 480 Nm, con un motor eléctrico síncrono, que aporta 80 kw -109 CV- y un par de 340 Nm. Para hacernos una idea, el motor eléctrico de los otros dos Clase S híbridos entrega 27 CV. Mercedes no ha facilitado la cifra de potencia conjunta, pero debería ser similar a la de un S 500 de combustión -motor V8 de 455 CV-. Con una velocidad máxima de 250 km/h, el S 500 Plug-In Hybrid acelera de 0 a 100 km/h en 5,5 segundos.
En la autonomía es donde se nota claramente que, frente a la del Audi A8 Hybrid, la del S 500 Plug-In Hybrid es una mecánica nueva: con el Clase S se puede circular durante 30 km en modo eléctrico, mientras que el A8 sigue sin pasar de los 3 km. El resultado combinado para el Clase S es un consumo de 3 litros a los 100 km y unas emisiones de 69 gramos de CO2 por km recorrido. El S 500 Plug-In Hybrid ofrece cuatro modos de funcionamiento: Hybrid, E-Mode -funciona el motor eléctrico en exclusiva-, E-Save -cuando la batería está totalmente cargada, la reserva para funcionar más adelante sólo con el eléctrico- y Charge -carga la batería en marcha gracias a que el motor de gasolina actúa también como generador-. Mercedes ha instalado un punto de resistencia en el pedal del acelerador que, cuando se alcanza, avisa al conductor de que se ha entrado en funcionamiento el motor de combustión.
Otra de las novedades en el S 500 Plug-In Hybrid es el sistema Intelligent Hybrid, con el que el Clase S calcula las necesidades de energía de los próximos 8 km de la ruta -pendientes, límites de velocidad, etc-. De esta manera, decide si cargar o descargar la batería, y maximiza la eficiencia.