Sustituta del anterior CLK, esta nueva gama llega con una amplia gama de motores, con elementos exclusivos adquiridos directamente del Clase S y con una capota de lona, disponible en cuatro colores, que es capaz de abrirse o cerrarse en menos de 20 segundos. Está claro que Mercedes quiere sacar el máximo partido a la nueva generación del Clase C. Así, tras presentar la carrocería coupé, del cual te hablamos hace unas semanas, ahora el fabricante alemán hace lo propio con la que será su carrocería más exclusiva, la descapotable. Una versión que, además, es completamente inédita en esta gama ya que el modelo que antes ocupaba su lugar era el conocido como CLK.
Un modelo que comparte muchas soluciones estéticas y de confort con el también nuevo Clase S Cabrio, aunque la calidad y el refinamiento de este último están varios escalones por encima del Clase C Cabrio.
Comparte plataforma con el Clase C Coupé, no en vano ambos miden lo mismo, 4,69 metros, aunque en lo que a altura se refiere, nuestro protagonista es 40 milímetros más alto. Un hecho que tiene su respuesta en el montaje de un techo de lona que, además, es el elemento que le otorga esa distinción Premium.
En un abrir y cerrar de ojos
Un techo eléctrico que puede plegarse y desplegarse en menos de 20 segundos y en marcha, siempre que no se rebasen los 50 km/h. Con un diseño similar al que emplea el S Cabrio, esta capota presume de una gran calidad en lo que insonorización acústica y térmica se refiere. Disponible en cuatro colores (negro, marrón, azul y rojo), una vez se pliega en su maletero, que reduce su capacidad de los 360 a los 285 litros, los cuatro pasajeros quedan totalmente a merced de la belleza del cielo.
En caso de que la temperatura no acompañe demasiado, al igual que otros modelos de la marca, este Clase C Cabrio equipa el sistema de calefacción para el cuello, Airscarf, con las salidas de aire ubicadas en los reposacabezas delanteros. Del mismo modo, incorpora elementos propios de un descapotable, como el cortavientos retráctil situado tras los asientos traseros, el delantero ubicado encima del parabrisas, unos arcos de seguridad que emergen automáticamente en caso de vuelco e incluso una tapicería reflectante y resistente al calor.
Hasta ocho motores
Desde el inicio de su comercialización, prevista para el verano, el Clase C Cabrio estará disponible con hasta ocho motores diferentes. De momento, la gama de gasolina es la que más incluirá con hasta seis propulsores, todos turboalimentados y con potencias que varían entre los 156 y los 367 CV, valor que corresponderá con el C43 Cabrio AMG 4Matic. En cuanto a los propulsores alimentados por gasóleo, de momento sólo habrá dos opciones: el C220d de 170 CV y el C250d de 204 CV.
Todos ellos, independientemente de su potencia, podrán asociarse a la caja automática de 9 velocidades, 9G-Tronic que será de serie en las versiones más potentes y opcional en el resto, que optarán entonces por una manual de seis relaciones. En cambio, en lo que a la tracción total 4Matic se refiere, será de serie en el C43 AMG y el C400 y opcional en el gasolina de 184 CV y en el diésel de 204 CV.
Dinámicamente, el contar con una suspensión rebajada 15 mm le aportará un tacto más deportivo, aunque en opción será posible adquirir una con un tarado más deportiva, con muelles y amortiguadores más rígidos así como la neumática Airmatic.