Ambos podrán elegirse con la carrocería de cinco puertas mientras que la de tres, Coupé, sólo podrá hacerlo con la más potente. En cualquier caso, gracias a él, el i20 mejora en lo que a prestaciones y consumos se refiere, al tiempo que se adapta a la normativa de emisiones europea. El Grupo Hyundai-KIA mantiene su apuesta por el motor de gasolina tricilíndrico. Un propulsor que hizo su debut en el KIA Ceed y que, poco a poco, se ha ido colando en el resto de modelos del conglomerado surcoreano. En el caso particular de Hyundai, la llegada del nuevo i20 Active, una versión con una estética aventurera, supuso igualmente el estreno del motor 1.0 TGDI.
Se trata de un bloque tricilíndrico de gasolina de 998 cm3, que recurre a la sobrealimentación para generar 100 y 120 CV. Pues bien, este motor estará ahora disponible tanto en la carrocería de cinco como de tres puertas, Coupé, del urbano asiático… aunque con matices. Y es que el segundo de ellos, únicamente podrá asociarse al nivel de potencia más alto.
Con todo, las prestaciones de este propulsor son más que notables. En lo que a aceleración se refiere, el de 100 CV necesita 10,9 segundos, mientras que el de 120 CV rebaja dicho tiempo en medio segundo. Si hablamos de velocidades máximas, el primero podría alcanzar los 176 km/h, 7 km/h menos que el más potente. Por su parte, en lo que a consumos se refiere, ambos firman un gasto medio muy contenido, de 4,3 y 4,8 l/100 km, respectivamente.