El Ford Mustang Bullitt, que celebra el 50 aniversario de la legendaria película protagonizada por Steve McQueen, se pudo ver por primera vez en Europa en la pasada edición del Salón del Automóvil de Ginebra y, aunque todavía quedan unos cuantos meses para que lo veamos rodar (llegará en otoño), si tienes en tu cuenta corriente 55.550 €, ya puedes ir a la web de Ford y reservarlo.
Esta edición especial está equipada con el motor V8 5.0 litros que Ford mejorado con un sistema de alimentación atmosférica, válvula de admisión, cuerpo de aceleración de 87 mm y módulo de control de calibración cuadro/motor del Shelby Mustang GT350 para acabar entregando 459 CV.
Disponible únicamente en la carrocería fastback, el Ford Mustang Bullitt también incorpora de serie con la nueva tecnología de ajuste de revoluciones que ofrece reducciones de marcha más suaves acompañada por un leve acelerón del potente propulsor.
Detalles exclusivos
El icónico Mustang estará disponible en colores exteriores Negro Shadow o el clásico Verde Oscuro Highland, así como llantas de 19 pulgadas, pinzas de freno rojas Brembo y una simulación de tapa de depósito de combustible con distintivo Bullitt.
El interior, por su parte, ofrece el nuevo cuadro de instrumentos digital de 12 pulgadas (con una pantalla de bienvenida Bullitt exclusiva que arranca en verde con una imagen del coche, asientos deportivos Recaro con costuras en hilo verde opcionales. Cada Mustang Bullitt cuenta, además, con una placa numerada de manera individual. Por último, como guiño al interior del coche original, el pomo del cambio tiene una esfera.
Entre los detalles de equipamiento que vienen de serie, destacan el nuevo sistema de sonido premium B&O Play, con 1.000 vatios, 12 altavoces y un subwoofer con doble bobina móvil, detalles cromados alrededor de la rejilla y las ventanillas delanteras, así como una exclusiva rejilla delantera negra.
En lo que respecta al apartado dinámico, también estará disponible con el nuevo sistema de válvula de escape que mejora la sonoridad del V8 y con el sofisticado sistema de suspensión ajustable Magneride de Ford, y utiliza un fluido estimulado de manera electrónica dentro del amortiguador para responder en tiempo real a las condiciones cambiantes de la carretera, optimizando la conducción sin sacrificar la comodidad.