Este modelo se pone a la venta con un precio de 21.800 euros (es decir, unos 2.000 más que la versión convencional) y llevará el motor 1.8 TDCi de 115 cv que actualmente monta el Focus. Lo cierto es que Ford no se ha complicado la vida para realizar este modelo. Punto a su favor, porque no lo encarece demasiado, pero algo en contra ya que seguirá limitado frente a sus rivales (como el Skoda Combi Scout) por no contar con una tracción total. Unas simples protecciones laterales, faldones en el exterior y unas barras en el techo son suficientes para darle al X-Road una apariencia más robusta y de paso evitar los leves daños producidos en caminos fáciles de tierra.
El X-Road, aunque no cuente con un reparto de tracción entre ejes, ha sido equipado sin embargo con unos neumáticos M+S aptos para circular sobre barro y nieve (Mud + Snow) y con la posibilidad de levantar su altura libre al suelo 2 centímetros más. Esta opción ha de solicitarse, ya que de serie cuenta con la misma altura que el Focus Sportbreak.
Equipamiento
Entre las opciones que Ford incluye para esta versión destacan las llantas de 16”, asientos deportivos, preinstalación de navegador sobre el salpicadero y radio cd-mp3 con entrada USB. El paquete exterior añade a lo comentado anteriormente una moldura especial alrededor de los faros antiniebla, pasos de rueda y faldones laterales en negro, así como las barras en el techo que van en el mismo color. Además, cuenta con identificaciones “X-Road” en el lateral de la carrocería y en el portón del maletero.