Modelos clásicos e históricos repartidos en varias categorías, ejercicios de diseño e incluso prototipos definitivos que pasarán a producción pasan a formar parte de la alfombra roja del Gran Hotel Villa d´Este, el incomparable escenario donde tiene lugar el Concorso d´Eleganza Villa d´Este. En esta edición, BMW ha presentado de la mano del carrocero artesanal Zagato un modelo que, si bien no se ha confirmado su producción en serie, cumpliría todas las condiciones y homologaciones para circular legalmente en cualquier parte del mundo. El BMW Zagato Coupé es por tanto una fusión en el estilo de ambas empresas y una nueva historia que une como protagonistas al diseño italiano junto al carácter de la marca alemana. Así, éste modelo se sumaría a la larga lista de colaboraciones entre ambos países que han dado incomparables frutos a lo largo de la historia, desde el BMW 328 de 1939 o los bocetos que BMW compró a Renzo Rivolta para la creación del Isetta hasta el BMW M1 de 1978 creado por Giorgetto Giugiaro.
Por tanto, no podemos hablar de un concept-car pero tampoco de un futuro modelo de la marca alemana, aunque bien podría dar lugar a un nuevo BMW Z4. Las claves de su impresionante diseño están en la desproporción del capó con respecto al resto del cuerpo, el doble abombamiento del techo (sello inconfundible de Zagato) y el corte recto de su zaga, que toma el testigo de otros modelos como el 328 Kamm Coupé o los Alfa SZ y TZ. A estas claves de diseño hay que sumar la escasa altura libre al suelo, lo que incrementa la sensación de anchura y desciende el centro de gravedad visual, al mismo tiempo que las entradas de aire sobre el capó advierten del motor de altas prestaciones del que por el momento nada sabemos.
Esta obra artesanal está terminada con llantas de 19 pulgadas, fabricadas en aluminio ligero, y con una pintura exterior de color “Rosso Vivace”, la cual puede cambiar la tonalidad entre el rojo brillante o el negro según incida la luz sobre la carrocería. Por su parte, el habitáculo ha sido construido siguiendo la máxima exigencia de una creación artesanal, con materiales de la más alta calidad para los paneles de las puertas, el cuadro de instrumentación o la tapicería de cuero de los asientos, éstos últimos con la letra “Z” cosida a mano en los reposacabezas.